“Háblame, Musa, de Aquel Varón”

Por Hernandez Erick

 “Háblame, Musa, de Aquel Varón”

La Novela “Háblame, Musa, de Aquel Varón” por la escritora española Dulce Chacón, tiene un narrador omnisciente, el cual nos cuenta todo lo que Adrián no vio en su relación con Matilde, quienes estaban casados, pero no había nada de comunicación entre ellos, ni había una valoración hacia Matilde de ideología y pensamiento. A pesar de todo, Matilde amaba a Adrián.

Adrián es un escritor, el cual hizo un guion de La Odisea. Y Ulises se enteró de su ambicioso proyecto, poniéndose en contacto con él para ejecutar la película. Adrián siempre le había contado sobre Ulises a su esposa, el cual un día se iban a reunir, y quería Adrián que Matilde lo conociera. Matilde no quería ir, ya que era tímida y tenía miedo, pero al final fue por la decisión de Adrián y su insistencia.

Desde la reunión entre ellos, Ulises empezó a ver y conocer a Matilde, donde ella vio que alguien le ponía atención, la escuchaba y valoraba su opinión. Adrián se fue distanciando y haciendo a un lado en cada reunión o encuentro que tenían entre ellos, donde él nunca le pregunto a Matilde que estaba pasando, o que pensaba de él, por el miedo de saber que fueran ciertas sus sospechas.

Ulises le pagaría por adelantado, donde Adrián con seguridad aceptaría más a Ulises. Después de un tiempo, tuvieron que irse para Aguamarina, para la producción de la película, donde se quedarían en una de las propiedades de Ulises. Ahí Matilde conoció a sus futuros amigos, inmigrantes, que trabajaban con Ulises, y tenían la mayor discreción posible para no ser descubiertos ni encontrados. Nos cuentas sobre sus tradiciones, costumbres, sus vivencias y las razones de que se fueron de su país.

Matilde había encontrado un hombre que la escuchara, y aunque amaba e intentaba amar a Adrián, el cual solo estaba interesado en la película, ella solo se dejó llevar y dejar por Ulises. La separación entre ellos la podemos ver cuando se mueren los amigos de Matilde, en una fiesta por la noche, donde Matilde encuentra soporte en Ulises y no en Adrián. Donde Adrián siempre con todo esto nunca veía nada, y lo intentaba dejar pasar para no distraerse ni preocuparse.

Cuando fueron al estreno de la película Ottelo, desde esa noche Matilde ya estaba cansada de Adrián, el cual se veía el interés entre Matilde Y Ulises. Al final Matilde separo sus cosas con las de él y le entrego una carta. Solo le dijo que no la leyera hasta que ella se fuera. Al leerla decía en resumen un adiós, le decía lo que sentía con la relación y lo que él nunca se dio cuenta. Al leer la carta fue corriendo hacia la entrada, donde vio a Ulises y a Matilde en el deportivo rojo, pero se dio cuenta que era demasiado tarde y ya la había perdido.

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