INOCENCIA

En el presente ensayo, hare referencia sobre los tres cuentos escritos por Liliana Heker, cuentista y novelista, nacida en Buenos Aires en 1943. Estos cuentos, “El pequeño tesoro de cada cual”, “La fiesta ajena” y “Berkeley o Mariana del universo” presentan características similares, donde suceden tensiones y convergencias en los mundos sensibles y mundos inteligibles. El primero permanece mutable, se trata de percibir, y donde prevalece lo sensible, los sentimientos; en cambio, el mundo inteligible, permanece inmutable, es el mundo de las ideas, la razón. Además, se puede notar la ausencia de hombres en los tres cuentos, y las divergencias entre la imaginación y lo real cotidiano.

Para explicar estas cuestiones, hare referencia en el cuento “La fiesta ajena”, ya el titulo nos comunica que se trata de una fiesta que no le pertenece, que es ajena. Cuando comenzamos a leer el relato, ya nos damos cuenta que Rosaura el personaje principal, llega enojada, es decir que ya pasó, que empezó por el final ya que dice: …”Estaba enojada, pero no era por el mono, pensó la chica, era por el cumpleaños.” Además cuando la madre le dice que ella creía en todo lo que le decían utiliza “…le había dicho”… Es decir, ya sabemos que el festejo del cumpleaños terminó y pero que algo no funciono y por eso Rosaura esta disgustada por el el festejo. Principalmente, en este cuento, se reflejan las distintas clases sociales quienes solo lo notan los adultos que con todos sus problemas innecesarios, diferencias y complejidades a destruir las ilusiones de igualdad “…fiesta de ricos…”,mientras que las niñas, representan la niñez, ingenua y sencilla. “…Yo voy a ir porque va a ser la fiesta más hermosa del mundo, Luciana me lo dijo. Va a venir un mago y va a traer un mono y todo…”. La madre insiste en que no vaya a la fiesta, que será tratada como lo que es, “…sos la hija de la sirvienta, nada más...” Luego de seguir el relato, nos damos cuenta que Rosaura fue invitada a la fiesta para hacer de sirvienta “Ni siquiera tuvo problemas con la jarra de naranjada, cuando la llevó desde la cocina al comedor. La sostuvo con mucho cuidado y no volcó ni una gota”. Es una historia triste, contada alegremente, quien crea un mundo en Rosaura, donde nunca pudo ser más feliz, luego de que un nene no pudo tener al mono y lo tuvo que sostener ella, cuando debió cortar la torta y los chicos se le acercaban, si bien fue feliz, nunca dejo de ser una sirvienta “…la señora Inés le había pedido que la ayudara a servir la torta y Rosaura se divirtió muchísimo porque todos los chicos se le vinieron encima y le gritaban "a mí, a mí". “…Ni con el mono en brazos, ni cuando el mago hizo desaparecer al mono, ni al final, cuando el mago hizo ondular su capa roja sobre la cabeza de Rosaura, dijo las palabras mágicas... y el mono apareció otra vez allí, lo más contento, entre sus brazos.

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