La Divina Comedia

El presente ensayo busca dar una opinión acerca de LA DIVINA COMEDIA del autor Dante Alighieri (1265 – 1321), pero haciendo énfasis en una de las tres partes que conforman la obra: “el infierno”, el cual es mencionado primero por Dante (personaje principal) y describe de una manera cruel como son tratadas las almas según el pecado que cometieron, pues entre más grave sea más fuertes son los castigos y más cerca al demonio quedan ubicadas. El infierno se representa según el texto como un lugar terrorífico pues se mencionan elementos como demonios, ríos de sangre, fuego, lamentos de las almas que están pagando sus culpas, desmembramientos, entre otras cosas que hacen que las personas se estremezcan por momentos y que en tiempos de la edad media, época en que se ubica la obra, hacían meditar a los lectores sobre la idea de cometer o vivir en pecado y no arrepentirse de ellos.

Este ensayo tiene como tema central el infierno, el temor que generaba y cómo repercutía este tema en la vida de la personas que vivieron en la época o en los tiempos de Dante Alighieri, las cuales se vieron fuertemente influenciadas por la iglesia y la religión; que de alguna manera avivaron más la idea de la existencia de un paraíso, de un infierno y un intermedio que vendría a ser el purgatorio, pero que años más tarde la iglesia se retractaría en el concilio de Florencia hacia el año 1438 citando “fuera de la Iglesia Católica, nadie, ni pagano, ni judío, hereje, musulmán o un separado de la unidad de la Iglesia, participaría de la vida eterna, más bien caería al fuego eterno”(infierno).

La historia se basa en un hombre (Dante) el cual se pierde en un bosque hasta que es encontrado por el alma de Virgilio, su escritor favorito que fue enviado por Beatriz, el amor eterno de Dante para que fuera salvado porque en realidad estaba perdiendo su rumbo.

Virgilio le propone a Dante un recorrido por los tres lugares a los que un alma puede ir, entre estos están el infierno, el purgatorio y el paraíso, éste acepta aunque con miedo por lo que pueda pasar. El primer lugar por recorrer es el infierno y en él se encuentran con las almas destinadas a pagar por sus pecados y también se dan cuenta de que el lugar esta dividido en nueve sectores de acuerdo a los pecados cometidos por las personas, teniendo en cuenta que entre más grave sea el pecado, más grave es el castigo. Allí Dante, junto con su guía recorren cada lugar y conocen personajes importantes de la historia que les relatan sus experiencias y porqué fueron merecedores del lugar asignado.

En el infierno también existe un pre infierno, una especie de limbo en el que se encuentran las personas que no fueron bautizadas o que nacieron antes de los tiempos de Jesús y no adoraron debidamente a Dios, en este sector se encontraba Virgilio, y en algunas ocasiones, las almas podían subir al cielo cuando se lo ganaban. A medida que avanzaban o cambiaban de sector, estos se hacían más estrechos hasta que en el último había un orificio que conducía al purgatorio.

Cuando terminaron su recorrido por las tinieblas, llegaron al purgatorio y aún podían observar el infierno al reverso. El purgatorio estaba dividido en escalones y Dante tenía que subir para alcanzar a Beatriz pero esto tenía que hacerlo solo ya que Virgilio no le podía servir mas de guía porque no se le estaba permitido escalar por haber sido pagano. Su paso por el purgatorio fue más tranquilo que por el infierno, pues había muchas más almas arrepentidas, esperando algún día alcanzar el cielo. Al llegar a la cima Dante se encontró con Beatriz que estaba disgustada por las malas actitudes de él en la tierra.

En el cielo se vieron irradiados por la luz de Dios, y Beatriz le explico a Dante cómo estaba dividido el cielo que en este caso también eran nueve sectores, y además le mencionó cuáles personas merecían estar allí. Finalmente, cuando recorren todo el paraíso, Beatriz se despide de Dante y le dice que no se preocupe, que el va a ser admitido en el paraíso y finalmente queda en manos de san Bernardo.

Pagano: Se dice de los idólatras y politeístas, especialmente

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