Primer cuento ‘’El gato negro’’
Enviado por skycriss • 16 de Noviembre de 2022 • Resumen • 1.470 Palabras (6 Páginas) • 87 Visitas
Sanchez Rico Jorge Armando AD109 22000414
Primer cuento ‘’El gato negro’’.
Este cuento nos habla sobre un relato de un hombre que está aproximado a morir y encuentra como manera de aliviarse, redactar todos los malos hechos que ha cometido, este hombre desde la infancia fue muy bondadoso y tierno, tanto que se burlaban de ello en la escuela, él siempre ha sido un admirador de los animales y los ama demasiado, sus padres le permitían tener mascotas y se fue enamorando más de los animales domésticos.
Siguiendo con el relato nos dice que se casó joven con una mujer que igual amaba las mascotas, por lo tanto, tenían un número considerable de mascotas, entre ellos un gato negro llamado Plutón de un gran tamaño que pronto se convirtió en su animal favorito de la casa y así esta amistad duro años hasta que este hombre empezó a cambiar radicalmente su conducta.
Esta persona cada vez era más irritante, su conducta era muy mala, todo su carácter y la manera de ser con sus mascotas y esposa era muy deplorable a tal punto de agredir tanto a sus mascotas como a su esposa, todo esto lo hacía sentir tener una enfermedad que trato de remediar haciendo uso del alcohol, pero esto hacía empeorar todo.
Entonces un día que llego a su casa totalmente ebrio, este hombre maltrato mucho a su gato a tal punto de quitarle un ojo, al día siguiente el gato huía del hombre y este enloquecido por la ira y enojo ahorco al pobre gato y termino quitándole la vida.
En esa misma noche su casa se incendiaba junto con todas sus cosas dentro, encontró a su gato muerto y una soga ahorcándolo, durante meses vivió con el fantasma de aquel animal hasta un momento donde se encontraba en una taberna y se encontró con un gato muy parecido a Plutón, pero con una mancha blanca en el pecho y al salir de esa taberna el gato lo siguió hasta la casa y siendo adoptado por el hombre en su casa.
Aunque muy pronto el hombre sintió antipatía por el animal, queriendo evitarlo en cada momento, ya que odiaba al gato, pero este parecía cada vez estar más encariñado con el hombre, siempre pegado a el cómo en las noches donde el hombre despertaba este inmediatamente sentía el caliente aliento del gato en su rostro.
Un día bajando al sótano con su mujer, el gato se atravesó por los pies del hombre provocando que por poco este cayera de cara al suelo, entonces el hombre tomo un hacha y quiso matar al gato, pero su esposa le freno la mano evitando que cometiera esa locura, sin embargo, el hombre se safo de la mano de su esposa y le clavo el hacha en la cabeza matando a su esposa.
Tratando de ocultar el cadáver pensó en distintas formas de realizarlo hasta que opto por emparedar el cadáver en el sótano justo como los monjes en la edad media, comenzó sacando ladrillo por ladrillo, luego de esto introdujo el cadáver y siguió colocando ladrillos para así tapar la pared y sepultando el cuerpo dentro de las paredes.
Al cuarto día del asesinato unos policías fueron a investigar la casa, pero este hombre se mostró muy seguro de sí mismo y no dio sospecha alguna a los policías que después de investigar todo muy detalladamente no encontraron evidencia alguna cuando se retiraban, el hombre golpeo fuertemente la pared donde se encontraba el cadáver y una voz desde la tumba asechaba el lugar, la pared cayó donde el cadáver apareció de cabeza manchado de sangre y con un ojo de fuego donde había emparedado al monstruo en la tumba, entre esas dos paredes.
Segundo cuento ‘’El corazón delator’’.
Una persona muy nerviosa y con un oído excelente, tanto así que escuchaba cosas del infierno y de la tierra, aunque podría ser por la acción tan terrible que cometió, esta persona quería mucho a un viejo, el cual tenía mucho dinero, pero esto no le importaba, el viejo mostraba un ojo muy parecido a un buitre que cada que lo veía se le helaba la sangre fue por esto por lo que cada vez estaba más decidido en matar al viejo.
Entonces los 7 días de la semana a las 12 de la noche entraba al cuarto del viejo muy cautelosamente, con mucho cuidado y muy precavido de cualquier movimiento para no alertar al viejo, entraba con una linterna apuntando a ese ojo de buitre horrible que le irritaba tanto, ya que no era el viejo sino su ojo que era lo que no soportaba.
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