“El Cine Ecuatoriano y su Poca Acogida en la Comunidad”

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Trabajo/Actividad:

Desarrollo de un ensayo crítico sobre el tema:

“El Cine Ecuatoriano y su Poca Acogida en la Comunidad”

Asignatura:

Comunicación Oral y Escrita

Estudiante:

Andrea Gonzales

Jonathan Infante

Docente:

María Fernanda Carrera

Primero “A”

Domingo, 19 de febrero de 2022

TEMA

El cine ecuatoriano y su poca acogida en la comunidad  

INTRODUCCIÓN

Es muy triste el saber que un país lleno de riquezas monumentales, lleno de paisajes que abarcan las costas del Océano Pacífico, las zonas altas andinas, la selva del Amazonas y las Islas Galápagos de abundante fauna, no sea reconocida por su propia gente. El realizar material audiovisual sería una gran ventana para que las personas conozcan las maravillas con las que cuenta este grandioso país. A su vez, una de las películas las cuales representa muy bien todo lo antes mencionado se titula “Qué tan lejos”.

Qué tan lejos, sí, ¿Qué tan lejos podemos llegar? Al hacer las cosas bien, no existen límites y esta película es un claro ejemplo de ello. “Qué tan lejos” nos enseña que, con un presupuesto ajustado, pero con grandes ganas de dejar al país en alto, mostrar el calor de la gente, nuestra cultura y la belleza que tiene cada rincón del Ecuador, se pueden lograr grandes cosas, de este modo la película logró hacerse acreedora de grandes premios. Ahora bien, a raíz de esto surgen algunas preguntas ¿Cuántas veces hemos oído hablar de películas ecuatorianas? ¿Alguna vez hemos observado alguna película ecuatoriana?

DESARROLLO

Se considera un arte para algunos y el entretenimiento de los demás. El cine, desde su creación hasta hoy. Las partes de la película de cada país no son solo una historia que el director quiere mostrar, sino también un contexto histórico donde nació. Debido a la falta de apoyo político y de la audiencia ecuatoriana, los primeros años de producción cinematográfica fueron lentos. Asimismo, la mayoría de las historias se han vuelto repetitivas, sus temas están muy relacionados y algunas películas ya no atraen al pequeño público que las apoya. Para el Ecuador, las décadas de filmación fueron las primeras de hacer cine consciente. Dadas sus fallas y retrasos, el desarrollo de la película ha ido prácticamente desde el principio, y su existencia no es sorprendente.

Sabemos que el cine es un medio de comunicación, de modo que es necesario descifrar qué es lo que nos quiere decir, las películas están conformadas de diversos elementos que juntos establecen una narración de varios comentarios y reflexiones. Utiliza técnicas que hay que conocer, descubrir e interpretar para que el mensaje llegue de la manera que los creadores pretendían. No basta con ver una película. Es necesario analizarla con ojo crítico para aprovecharla, para entenderla mejor, para apreciarla como narradoras, como transmisoras de valores, como portadoras de arte y conocimiento.

En relación con lo planteado en el párrafo anterior, muy pocas de las veces he escuchado dentro de mi círculo social el plantear un debate sobre alguna de las 75 películas ecuatorianas, en lo que a mí refiere, es probable que la poca acogida del contenido realizado en Ecuador sea debido a dos puntos muy importantes los cuales son; su poca experiencia, puesto que, relativamente el cine ecuatoriano está pasando por un desarrollo el cual otros países le llevan años de ventaja, hay que mencionar, además su poco alcance con el público en general.

La historia del cine ecuatoriano ha vivido momentos muy difíciles que dificultaron su desarrollo. Los primeros cineastas lograron producir algunas producciones de bajo presupuesto sin ayuda del gobierno. Su objetivo siempre ha sido contar una historia que resalte la cultura y la esencia de Ecuador, una realidad dura y brutal, mezclando ficción y emoción para involucrar mejor al espectador. Sin embargo, el uso intensivo y el uso de muchos dialectos y expresiones ecuatorianas es el mayor obstáculo debido a su complejidad, ocasionando una ruptura entre la audiencia y la película.

Durante la década de 1980 se caracterizó por hacer documentales y ver películas, pero las últimas películas toman una dirección y una trama diferente, están más orientadas a las películas de ficción, tratan temas de amor y desesperación, mientras enfatizan la cultura ecuatoriana. En otras palabras, la relación entre los autores y sus historias permanece aislada y discordante.

En relación con lo planteado en el párrafo anterior, muy pocas de las veces he escuchado dentro de mi círculo social el plantear un debate sobre alguna de las 75 películas ecuatorianas, en lo que a mí refiere, es probable que la poca acogida del contenido realizado en Ecuador sea debido a dos puntos muy importantes los cuales son; su poca experiencia, puesto que, relativamente el cine ecuatoriano está pasando por un desarrollo el cual otros países le llevan años de ventaja, hay que mencionar, además su poco alcance con el público en general.

El cine ecuatoriano al empezar a competir de manera directa con productoras las cuales llevan mucho más tiempo en este mercado carece de experiencia. Como manifiesta (El Comercio, 2016) “A nuestras producciones les falta experiencia, estamos naciendo como cinematografía”.  Queda mucho por aprender y desarrollar, a medida que el cine ecuatoriano ha avanzado se ha notado una gran diferencia a las películas de antaño, las cuales marcaron un principio para que esta industria se siga desarrollando.

Algo semejante ocurre al momento de desarrollar el guion de la película, la cual es el alma del proyecto cinematográfico. (El Comercio, 2016) afirma que “La base de cualquier producción cinematográfica es siempre el guion. Con un buen guion aseguras tener una buena peli”. Muchos de los proyectos desarrollados carecen de coherencia y exposición, esto debido a que, en muchas producciones, la mayoría de los directores se están encaminando en el mundo del cine por primera vez.

Dicho lo anterior, las productoras cinematográficas, deberían brindar grandes experiencias a los usuarios, aprovechando en gran manera los recursos de los cuales somos privilegiados, realizar cintas las cuales no carezcan de desarrollo, envolventes, cinemáticas.  Con esto quiero decir, que las productoras necesitan destinar parte del presupuesto de la cinta a guionistas, directores, camarógrafos, con mayor experiencia, para de este modo generar contenido atractivo para los usuarios, contenido destinado a competir a nivel local como internacional. Es necesario recalcar que, el brindar oportunidades a profesionales especializados en estas áreas, no asegura un resultado exitoso.

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