PELÍCULA “Shine, el resplandor de un genio”
Enviado por MarianaCriminal • 28 de Junio de 2019 • Ensayo • 1.711 Palabras (7 Páginas) • 555 Visitas
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UNIVERSIDAD NACIONAL AUTÓNOMA DE MÉXICO[pic 2]
FACULTAD DE PSICOLOGÍA
PROGRAMA ÚNICO DE ESPECIALIZACIÓN EN PSICOLOGÍA
TRAYECTORIA PSICOLOGÍA CRIMINOLÓGICA
PELÍCULA “Shine, el resplandor de un genio”
Mariana Jimena Morales Ramírez
Shine el resplandor de un genio, es una película que narra la historia de David Helfgott, un niño prodigio del piano que con ayuda de flashbacks acerca de su vida nos muestra el antes y después de su brote psicótico, que más tarde se cristalizaría en una enfermedad mental, justo en el momento más importante de su carrera profesional desencadenado por la insana relación con su padre durante toda su vida.
Para comprender mejor la historia de David, la película nos contextualiza en los primeros años de su infancia y su adolescencia. Su padre, Peter, un inmigrante judío, sumamente rígido, y autoritario; un hombre que paso una vida dura, con limitaciones, en períodos de guerra, y que sólo concebía el ganar a través del esfuerzo, el sufrimiento y la competitividad. En la película se habla de las ganas que tenía Peter de estudiar música cuando era niño y de la falta de comprensión de parte de su padre y la forma en la que ahora, siendo él padre, no le quita la música a su hijo pero lo limita en otras cuestiones violentándolo tal como lo hacían con él. En este sentido, podemos notar la proyección que tenía con David, y como quería que realizara el sueño que él no había podido. Por lo que David queda encerrado en el pasado de su padre para reparar su frustración a costa de no tener ni vida propia ni identidad.
Esta dominancia y deseo de poder y control de parte de Peter, llegaba al punto que incluso le pegaba y amedrentaba emocional y físicamente. Tanta era la presión ejercida hacía David, que al apresurarlo a tocar piezas complicadas no aptas para su edad, su padre provocó una falta de desarrollo en ciertos aspectos, en lo que por momentos parecía volver a su infancia y perder el control de lo aprendido volviéndolo inseguro. Incluso uno de los síntomas de esta falta de desarrollo, que se menciona en la película, es la enuresis y la encopresis que sufría el niño prodigio del piano a los 14 años.
David había aprendido a necesitar la aceptación total de su padre en todos los aspectos, y por ello, empezó a convertirse en una persona dependiente de su aprobación. En la película observamos que la intromisión paterna se hace presente en todo momento y la interpretamos en la fuerza de las introyecciones o creencias que David recibe y sufre de su padre “hay que ganar siempre, tienes suerte, yo sé lo que es lo mejor para ti”, la introyección del cumplimiento del deseo paterno como una expectativa que no se puede defraudar. Como ejemplo de ello es cuando David interpreta el concierto de Rajmaninov tal y como su padre le demandaba desde que era un niño.
A pesar de esta relación tortuosa padre-hijo y la sumisión y aceptación de la violencia de parte de su madre, en la infancia y adolescencia de David existieron figuras como el profesor Ben Rosen o la escritora Katherine Prichard que se constituyeron como elementos compensadores que dieron amor, respeto y reconocimiento a David. Fueron figuras que le apoyaron para que continuara sus estudios fuera de Australia.
Posteriormente cuando David al fin decide independizarse e irse con una beca a estudiar fuera de Australia, su padre promete que si se va no volverá a ser parte de esa familia. A pesar de estas amenazas David decide que es tiempo de partir y consolidarse como pianista, todo parece evolucionar bien, hasta que durante su actuación en el Albert Royal Hall de Londres, interpretando la pieza de piano más importante para su padre: “El concierto para piano n.º 3 de Serguei Rajmaninov”, se desvanece teniendo una crisis que le deja fuera de la realidad, un brote psicótico. Entendiendo que lo anterior fue resultado de todo el periodo en el que se había mantenido fiel a su padre en el que había estado viviendo en una realidad guiada por este, y al ya no estar más en un contexto autoritario y demandante, había perdido totalmente el dominio de su nueva realidad. Perris y McGorry,(2004) mencionan que los adolescentes y jóvenes deben afrontar grandes retos a medida que crecen, se separan de sus familias y tratan de buscar su camino en el mundo. Muchos experimentan una serie de “cascadas de estrés” y se encuentran pobremente equipados y con apoyo inadecuado para afrontarlas. Si existe una vulnerabilidad subyacente a la psicosis, estas cascadas pueden producir una espiral descendente en el funcionamiento, en la confianza en uno mismo y en la tendencia a la búsqueda de relaciones sociales.
Tras su primera crisis, David viaja de regreso a Australia y llama a su padre, le dice que ha vuelto, pero este le cuelga el teléfono y le niega la vuelta al hogar. Lo que resulta en una fragmentación absoluta de la personalidad de Helfgott que le llevo al ingreso en un asilo psiquiátrico donde le aplicaron terapia de electroshocks. Delgado (2013) refiere que cuando no nos han dejado apoyarnos psicológicamente en nosotros mismos y se retira el apoyo externo totalmente, nos quedamos en el aire, en el vacío, psicológicamente hablando, sin conexión con la realidad y es cuando empiezan los delirios, los pensamientos irreales. Primero se produce una desconexión con lo que nos sujeta a la realidad y luego se producen los pensamientos delirantes. Es decir, en un brote psicótico, no existe un suelo psicológico en donde poder apoyarnos y “caminar”, sino que flotamos a la deriva sintiendo que todo es irreal.
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