ANÁLISIS DE FLUJO DE MATERIALES COMO INDICADOR DE POTENCIALIDAD PARA IMPLEMENTAR PROCESOS DE SIMBIOSIS INDUSTRIAL

FACULTAD DE CIENCIAS DE LA INGENIERÍA

Carrera:

INGENIERÍA INDUSTRIAL

Nivel:

6TO SEMESTRE

Asignatura:

ECOLOGÍA INDUSTRIAL

Tema:

ANÁLISIS DE FLUJO DE MATERIALES COMO INDICADOR DE POTENCIALIDAD PARA IMPLEMENTAR PROCESOS DE SIMBIOSIS INDUSTRIAL  

Fecha de entrega: 16/09/2022

Introducción

Los procesos industriales son, desde la perspectiva económica, actividades imprescindibles para el desarrollo de las sociedades, sin embargo, también son una de las principales fuentes generadoras de contaminantes afectando la integridad del medio ambiente. Al no ser viable detener estas actividades industriales resulta imperativa la búsqueda de alternativas que permitan reducir a largo plazo este impacto y de este modo ralentizar el ritmo de crecimiento de los niveles de contaminación hasta un punto en el que medio sea capaz de reciclar y/o asimilar tales residuos.

El presente ensayo pretende describir y sintetizar el análisis efectuado sobre el Parque Industrial Alfa (PIA) de Jalisco, conformado por cuatro organizaciones, la cuales fueron sometidas a un análisis del flujo de materiales (AFM) con la finalidad de obtener información sobre los posibles intercambios de materiales para así establecer relaciones entre estas empresas, redes de simbiosis industrial (SI), donde el material que descarta una empresa pueda ser rehusado por otras, tomando estos “desechos” como nueva fuente de materia prima lo que a grandes rasgos permitirá minimizar la generación de desechos peligrosos y costos, elevando la productividad y logrando ventaja competitiva para las empresas en cuestión.

Desarrollo

Durante décadas ha sido notorio el deterioro ambiental causado por la actividad industrial, por lo que temas como Desarrollo Sustentable y Sostenible, Economía Circular, Sinergia de Subproductos, Metabolismo Industrial, Ecología Industrial, entre otros, son mencionados cada vez con mayor frecuencia.

La ecología industrial (EI), es un tema muy amplio que llegó a discusión en la década de los ochenta gracias al artículo “Estrategias de la producción” por Robert Frosch y Nicholas E. Gallopoulos (CRUZ ALANIS, 2014), por lo que existen diferentes posturas al momento de definirla. Según (Torre-Marín, Granados, Herrera, & Martínez, 2011), la EI es un “área de conocimiento que busca que los sistemas industriales tengan un comportamiento similar al de los ecosistemas naturales, transformando el modelo lineal de los sistemas productivos en un modelo cíclico, impulsando las interacciones saludables entre economía, ambiente y sociedad e incrementando la eficiencia de los procesos industriales”.

El ecosistema es un conjunto de sistemas complejos e interacciones entre diferentes especies y su medio, donde cada organismo transforma constantemente los materiales y energía que consume, generando desechos, proceso conocido como metabolismo. Desde este enfoque (metabolismo industrial) las organizaciones del sector industrial son un sistema en el que la sociedad y la industria convierten materias primas, energía y trabajo en bienes finales de consumo (productos y/o servicios) infraestructura y residuos (Cervantes Torre-Marín, Sosa Granados, Rodríguez Herrera, & Robles Martínez, 2009).

Por otra parte, las interacciones y sinergias existentes entre las industrias en la actualidad siguen un sistema ligado a los principios de la economía lineal, donde la relación entre empresas se limita a proveerse de materia prima virgen, y los desechos son vistos como simples pérdidas (AIDIMME, 2020). La Simbiosis Industrial trata de simular las relaciones establecidas entre las especies de un ecosistema, al proponer que las industrias actúen como organismos productores dentro de una red trófica (que obtiene materia prima secundaria a partir de desechos de otra empresa, disminuyendo su acumulación y efecto contaminante), reemplazando el modelo lineal por ciclos metabólicos cerrados (objetivo de la EI) (Gudynas, 2003).

La transición del modelo lineal al cíclico deja obsoleto el concepto de residuos/desechos; puesto que, estos tendrían solo dos vías: el retorno al ambiente (ya que, por su naturaleza no representan un peligro) o el ingreso al sistema metabólico industrial como subproducto. Sin embargo, el reto ahora es gestionarlos y diseñar las redes simbióticas de tal manera que el beneficio en conjunto sea mayor al que cada empresa obtendría individualmente.

“Lo que se puede medir, se puede controlar”, esta frase expresa en pocas palabras la premisa planteada por el físico matemático William Thomson Kelvin alrededor del año 1800. Aplicada al contexto bajo el que se desarrolla este trabajo, el control de la emisión de contaminantes provenientes de procesos industriales, se puede lograr al medir y cuantificar los residuos, de ahí la elección del método de trabajo, el análisis de flujo de materia (AFM), herramienta que, sistemáticamente, con base en la información proveída por las empresas que constituyen el parque industrial Alfa (PIA), permite asimilar la cantidad de materia residual o de “desperdicio” para analizar sus oportunidades de uso y establecer las sinergias interempresariales (SI) siendo el AFM un indicador fundamental que guía el diseño de este modelo de cooperación (Medina Ortega & Almaraz Moret, 2018).

...