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Artículo 2 (Foro)

La falta de honradez, la codicia y la hipocresía en Corporate America

INSTRUCCIONES

1- Lea artículo que aparece adelante publicado en un periódico reconocido de la india, escrito por Huck Gutman

2- Comente sobre el punto de que vista el autor presenta y si está de acuerdo o no con su posición y / o expresiones. Opine…

Se publicará el domingo 14 de julio de 2002 en el periódico más importante Deshonestidad el Político (Kolkata) Oriente de la India, la avaricia y la hipocresía en la América Corporativa por Huck Gutman 

Esta es una historia de codicia, falta de honradez e hipocresía. Estos son tiempos difíciles para Wall Street, la economía estadounidense, y el presidente George W. Bush. Como los informes de la revista Fortune, conservadores y principal publicación pro-empresarial, las revelaciones en curso de irregularidades contables y los escándalos corporativos han "creado una crisis de confianza de los inversores de la talla de la que no se ha visto desde la Gran Depresión." La actual ola de malas noticias comenzó con Enron, la mayor quiebra corporativa en la historia estadounidense. Ejecutivos de Enron, impulsados por la codicia, no estaban satisfechos con inmensos salarios: establecieron todo tipo de asociaciones spin-off (beneficio indirecto) para enriquecerse a costa de los accionistas y la rentabilidad de la empresa. En poco más de una década, Enron pasó de la oscuridad a convertirse en la séptima mayor empresa del país, con más de 20.000 empleados en cuarenta países. Sin embargo, su falta de honestidad acerca de los beneficios, y sus ofertas de energía off-the-books (fuera de los libros), la complicidad de la contabilidad fiscal que era errónea, engañosa, y deshonesta, finalmente causaron una implosión de proporciones gigantescas. El 28 de diciembre de 2000, Enron vendió en más de 84 dólares cada acción.  Once meses más tarde las acciones de Enron cayeron a menos de un dólar en el volumen de operaciones más pesado, en una corporación nunca registrada por una importante bolsa de valores. Los inversores de la compañía - muchos de ellos empleados de Enron - se apresuraron a salir de la acción antes de que se convirtiera en totalmente inútil. Dos meses después, Enron fue retirado de la lista de la Bolsa de Valores de Nueva York, y hoy sus acciones no tienen valor. El Departamento de Justicia federal se encuentra en medio de una investigación penal de la empresa comercializadora de energía, pero el daño a los accionistas y los pensionistas fue hecho. Enron fue sólo el comienzo, como ejemplo tras ejemplo, de la avaricia corporativa y la malversación de contabilidad ha salido a la luz.

Cada una de las corporaciones que voy a discutir es - o estaba - entre las empresas más grandes de América. La compañía telefónica regional Qwest ofrece servicio telefónico básico a catorce estados, tiene unos ingresos de más de $ 18 mil millones al año y maneja 240 millones de llamadas telefónicas y 600 millones de correos electrónicos cada día. La cuarta mayor compañía telefónica de Estados Unidos, que está siendo investigada por prácticas corporativas criminales. La Comisión de Bolsa y Valores (SEC) está examinando sus procedimientos contables. Estas indicaciones de la impropiedad fiscal han llevado sus acciones a estrellarse desde su máximo de 67 dólares hace dos años, a menos de $ 2, una caída de 97 por ciento.

Tyco International (seguridad, sistemas de seguridad e ingeniería medica) es uno de los conglomerados más grandes del mundo, opera en más de 80 países con unos ingresos de 36 mil millones dólares. En los últimos meses, surgieron grandes preguntas acerca de la forma en que la empresa representaba las múltiples adquisiciones que transformó de una pequeña compañía en un gigante corporativo. Su consejero delegado, Dennis Kozlowski, se vio obligado a renunciar, y poco después fue procesado por cargos de evasión de impuestos. Tyco, que vendía a 60 dólares por acción hace seis meses, a raíz de las irregularidades financieras en su reserva de adquisiciones, ahora vale poco más de $ 10 por acción. En comparación con Adelphia Communications Corp., uno de los mayores proveedores de televisión por cable de Estados Unidos, Tyco ha obtenido buenos resultados en el mercado de valores. Hace seis meses, la respetada revista Business Week informó el valor de Adelphia entre $ 9500 millones y $ 11.8 mil millones. Desde entonces, ha entrado en bancarrota Adelphia tras revelaciones de que sus finanzas estaban en desorden, en gran medida debido a que había hecho $ 2,3 mil millones en préstamos fuera de balance a las asociaciones dirigidas por familiares de John Rigas, el director general de Adelphia. Su bancarrota es la quinta más grande dicha desde 1980. Las acciones de Adelphia venden por $ 42 dólares de hace un año, pero habían caído a 0,70 dólares mes y medio atrás, cuando se detuvo todo el comercio de sus acciones. Global Crossing, que tuvo un papel importante en el desarrollo de las redes de cable de fibra óptica, está siendo investigado por la SEC para la contabilidad fraudulenta. La empresa, al parecer, dispuso 'ofertas' en el que se intercambian no hay bienes o servicios, pero que, no obstante, hizo parecer que se estaba generando ese beneficio. Estas transacciones de papel, inflaron los ingresos de la compañía sustancialmente. Global Crossing también se declaró en quiebra. Su cotización era de más de $ 60 hace dos años y medio. Cada acción vale $ 0.06 de hoy, una caída de 99,9 por ciento. Los mercados de valores estadounidenses - y los mercados mundiales - han sido sacudidos por la desaparición de WorldCom. Su balance enumera activos de $ 103 mil millones, y los ingresos netos para el año calendario que termina el 31 de marzo de más de $ 1 mil millones. Sin embargo, se ha puesto de manifiesto la contabilidad fraudulenta al ocultar $ 3.8 mil millones en pérdidas, y se rumora que las pérdidas adicionales pueden ser próximas. Lo que esta enorme empresa de telecomunicaciones hizo fue costes diarios de récords como los gastos de capital, un procedimiento deshonesto que le permitió borrar una enorme pérdida de operación y registrar un beneficio considerable pero ilusorio. Hace tres años WorldCom cotizaba a 64 dólares. Hoy se cotiza a 0,20 dólares, una caída de más del 99 por ciento. Se ha de pagar 4,25 mil millones dólares de sus deudas a este punto, y futuros impagos son ciertamente posible. Hay probablemente más revelaciones de malversación corporativa y la falta de honradez por venir. Por ejemplo, otros en el negocio de la energía, junto con Enron - Dynegy, El Paso Corp., CMS Energy, Williams, y Halliburton - están actualmente bajo escrutinio por la manera en que se han realizado las operaciones y representaron ingresos y gastos. Halliburton es particularmente interesante, ya que apunta a la corrupción corporativa en un nivel diferente. No es que sus irregularidades contables son más grandes que los de WorldCom o Enron, porque ellos no lo son. Pero el escándalo de Halliburton tiene mucho, mucho, que ver con la capacidad de la administración política actual en Washington para limpiar esa cloaca de la avaricia y la deshonestidad que, parece tan infelizmente, es característico de muchas salas de juntas corporativas. Halliburton es un importante proveedor de servicios de ingeniería, particularmente con el sector energético. Una investigación actual SEC está investigando las prácticas contables de Halliburton en sobrecostos en los trabajos de construcción. El ex director general de Halliburton, que estaba a cargo cuando se introdujeron las prácticas contables, es Dick Cheney, actual vicepresidente de los Estados Unidos. Un traje recientemente presentado alega que el señor Cheney conspiró, junto con otros en Halliburton, de presentar estados financieros falsos y con ello engañar a los inversores. La demanda alega que los procedimientos contables engañosas de Halliburton llevaron a exageraciones de los ingresos asciende a tanto como $ 445 millones en un período de tres años durante el mandato del Sr. Cheney como CEO. El 25 de julio de 2000, el día después de que Bush seleccionó el Sr. Cheney como su compañero de fórmula a la vicepresidencia, Halliburton acciones vendidas a $ 42. Hoy en día se vende en $ 13. Arthur Anderson LLP, antiguamente uno de los "Cinco Grandes" de las firmas contables internacionales, es hoy en desorden y probable disolución. Fue declarado culpable de obstrucción a la justicia por destruir documentos relacionados con Enron. También fue la firma de contabilidad de WorldCom, Qwest, y Halliburton. En 1996 el Sr. Cheney hizo un video promocional para Anderson. "Una de las cosas que me gusta de lo que hacen por nosotros es que, en efecto, me da buenos consejos, si se quiere, de su pueblo en base a lo que estamos haciendo negocio y la forma en que estamos operando, por encima de" Cheney dijo, "sólo una especie de la disposición de auditoría by-the-libros normales." Arthur Anderson fue también el contador de una pequeña empresa denominada por Harken Energy. Ahí radica un cuento. Hace quince años, cuando George W. Bush era un hombre de negocios frente a la insuficiencia fiscal, Harken Energy compró Spectrum 7, una pequeña empresa de la que Bush era entonces presidente ejecutivo. Desde Spectrum 7 era poco rentable cargar con la deuda, el acuerdo trajo a Harken poca ganancia pero las conexiones del CEO a su padre - que pasó a ser el Presidente de los Estados Unidos. Más tarde, aunque no antes de que se llegó a la conclusión de nuestro cuento, sí Harken se convertiría en una empresa con problemas propios.  Aunque parecía saludable, Harken amplió las opciones sobre acciones generosas al hijo del presidente George HW Bush. Entonces comenzó la contabilidad de fantasía. Paul Krugman ha reportado en el New York Times que se trataba de la creación de una entidad ficticia para luego comprar "algunos de los activos de la empresa a precios poco realistas, creando un beneficio fantasma que infla el precio de las acciones.  He aquí la descripción de Krugman de lo que pasó en Harken Energy, una descripción que a continuación se ha informado de toda la nación. "Un grupo de expertos, el uso de dinero prestado por sí mismo de Harken, pagó un precio exorbitante por una subsidiaria de Harken, Aloha Petróleo. Eso creó un beneficio $ 10 millones fantasma, que escondió las tres cuartas partes de las pérdidas de la compañía en el año 1989." Una vez que el precio de las acciones de Harken fue inflado por medio de esta maniobra - significativamente, Arthur Anderson fue a la firma de contabilidad, y el Sr. Bush estaba en el comité de auditoría de Harken - El Sr. Bush fue capaz de vender sus acciones a un beneficio grande poco antes que el precio de las acciones de Harken cayeran sustancialmente. Para ser más específicos, el 22 de junio de 1990, el Sr. Bush, director de Harken, vendió 212.140 acciones por $ 4 por acción, por un total de $ 848.000. Dos meses más tarde, el 20 de agosto, Harken anunció una pérdida de $ 23,2 millones; en ese día su precio de la acción cayó 20 por ciento a $ 2.375. Se cerró el año en $ 1 por acción. Hay más a la historia.

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