Biocombustibles

Convirtiendo basura en combustible gracias a la Termólisis

Publicado el 23/09/2011 por Ger

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La acumulación de basura es un problema gravísimo, nuestra dependencia de combustibles fósiles también. Por suerte, existen procesos que nos permiten atacar ambos frentes de batalla simultáneamente. La termólisis es uno de estos procesos y vengo a mostrarles la experiencia de una empresa argentina que está empezando a entrar en el negocio de la generación de combustibles de segunda generación a partir del tratamiento de los residuos domiciliarios.

La termólisis, tambíen conocida como descomposición térmica, es un proceso en el cual una sustancia se transforma en dos diferentes al aplicarse calor en el sistema. En el caso del tratamiento de residuos sólidos urbanos (RSU), la termólisis se realiza en una atmósfera sin Oxígeno que permite obtener combustibles de segunda generación, principalmente biocarbón y bioaceite.

El biocarbón ha demostrado ser un poderoso fertilizante, capaz de acelerar el crecimiento de plantas y cultivos. Además de mejorar la productividad de los suelos, la producción de biocarbón permite reducir la cantidad de residuos que se deben depositar en los terrenos y minimizan la emisión de gases contaminantes. Por otro lado, el bioaceite puede utilizarse como combustible para motores de combustión interna. Se emplean generalmente como agregado en los combustibles convencionales para reducir los requerimientos de derivados del petróleo.

La empresa argentina Termólisis RSU, ubicada en las afueras de Buenos Aires está incursionando en la aplicación comercial del proceso de termólisis para el tratamiento de la basura residencial. Su propuesta consta de 3 módulos que pueden operar de manera independiente o conjunta, según las necesidades del caso. Estos módulos también pueden ampliarse de manera independiente para ajustarse a las necesidades de la ciudad en la que se instalen las plantas de tratamiento.

Módulo 1 – Separación y Clasificación de RSU

En esta primera etapa, se recibe el flujo de residuos para separar aquellos aptos para el reciclaje, por ejemplo, vidrio, cartón, latas de aluminio, chatarra y papel.

Módulo 2 – Termólisis

Los residuos restantes pasan al equipo de descomposición térmica, previo secado y triturado. La energía necesaria para hacer funcionar el proceso provienen de los mismos gases que se producen al calentar la basura más una fracción del bioaceite que sale como producto. Los gases de venteo no salen directamente a la atmósfera, se los hace pasar por un sistema de lavado que elimina las dioxinas, furanos y álcalis para lograr un escape libre de contaminantes. Estos productos son re-inyectados al equipo para servir como

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