Caso monstanto

Síntesis del caso

En el año 1996 la economía agrícola tuvo una gran revolución por la llegada de las semillas genéticamente modificadas al mercado, de la mano de Bob Shapiro, presidente ejecutivo de la empresa Monsanto, lo que llevó a un cambio en la producción agrícola a nivel mundial. Estas semillas son impermeables a las pestes, virus y hongos, y además necesitan pesticidas sólo una o dos veces al año, por lo que se modificó el modo de producción, disminuyendo costos y aumentando la oferta del producto, lo que la empresa percibió como el futuro de la industria alimentaria y de esta forma intentar acabar con el hambre en el mundo.

Como todo desarrollo científico la creación de estas “súper semillas” implicó inscribir y patentar los procesos y productos, por lo que cada persona que las utilizara debía pagar los derechos correspondientes

Años más tarde, el negocio de los alimentos genéticamente modificados sufrió un duro revés al publicarse un estudio que señalaba la incompatibilidad de estos alimentos con el medio ambiente, específicamente con las mariposas monarcas, las cuales morían al alimentarse del polen del maíz GM de Monsanto, lo que comenzó a verse como una propuesta riesgosa, y que luego se reflejaría en numerosas demandas judiciales de parte de grupos ambientalistas y de agricultores que les imputaban la monopolización de semillas y pérdidas millonarias para la compañía Monsanto.

Identificación de los problemas principales

• Aunque a lo largo de la historia el hombre ha influido en la evolución de muchas especies de manera que se vuelvan más provechosas para él seleccionando qué semillas plantar o qué animales reproducir, la modificación de semillas dentro de laboratorios es algo nuevo y aún no hay evidencias de largo plazo de la inocuidad de los alimentos GM, además se han publicado investigaciones in vitro con resultados dudosos que no se corresponden con el comportamiento de los miembros del ecosistema en la realidad, en concreto, en el estudio las mariposas monarcas mueren al ingerir polen de maíz GM, pero en la realidad este polen no forma parte de su dieta, ni tampoco el polen del maíz de cultivo tradicional.
• Poca confianza de parte de grupos ambientalistas y mercados importantes como Europa y potencias asiáticas hacia la manipulación genética de los alimentos (Biotecnología agrícola).
• Monopolización del mercado de las semillas.

Identificación de los protagonistas

Bob Shapiro, presidente ejecutivo de Monsanto, vinculado a esta compañía desde el año 1990.

Soluciones propuestas

• Realizar investigaciones y certificaciones de calidad.
• Persuadir a la población, en especial a los grupos ambientalistas, sobre las buenas prácticas y la necesidad de los avances en bioagricultura.
• Acogerse a las regulaciones legales de monopolio y mejorar su imagen a través del apoyo y cooperación con empresas que se quieran introducir al mercado de las semillas y los agricultores de menor tamaño.

Resumen del plan de acción o implementación

Llevar a cabo una serie de investigaciones que simulen la realidad de los campos agrícolas en especial pruebas en especies nativas del territorio en que se ubicarían los cultivos, reflejando el verdadero impacto del cultivo de estos alimentos, de modo que se lleve a cabo una certificación internacional de las semillas GM (certificaciones ISO, por ejemplo), lo que llevaría a disminuir el escepticismo e ignorancia en torno a este producto.

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