Comunicación Interna.

Caso práctico mod. 21 Comunicación Interna

Preguntas:

1. Analizar la comunicación interna de esta empresa y los problemas que surgen en ella.

2. Estudiar las acciones llevadas a cabo, determinando si son convenientes y eficaces.

1. En primer lugar, señalar que la dirección no considera de manera estratégica ni planificada la comunicación interna. El simple hecho de cómo se entera el comité de empresa de los futuros cambios deja a la vista que no se tiene una concepción de la comunicación como elemento de engranaje.

Adicionalmente, señala la falta de transparencia en este sentido cuando vemos la existencia de topos en el comité de empresa de una forma tan burda, la colocación del plan de cambios en el tablón de anuncios, más como justificante a futuro, que como un verdadero interés en comunicar.

Por otro lado, la comunicación es únicamente descendente, pues, además de cómo se organizan a los jefes de departamento para comunicar e informar los cambios y controlar las reacciones, ignoran las señales de disconformidad de la plantilla.

De todo esto, se terminan desprendiendo problemas como la falta de colaboración, la falta de motivación, la falta de compromiso, pues la toma de decisiones no se ha basado, ni en el intercambio de información, ni en la toma de consideración de posibles alternativas, sino que el plan se ha desarrollado sin contar con nadie que no sea la dirección.

2. Las acciones que se llevan a cabo, por parte de la empresa es de una política de hechos consumados y de falta de transparencia absoluta.

La comunicación con la representación de los trabajadores se hace a través de dos miembros del comité de empresa, pero no con el presidente, lo que manifiesta una falta de atención y de respeto por los canales establecidos.

El aleccionamiento a los directivos para que defendieran el plan es una muestra más de la falta de consideración de la comunicación interna como elemento a gestionar correctamente.

El hecho de no reunir a los trabajadores y explicarles de forma personal unos cambios que van a suponer unos cambios tan drásticos es un error estratégico importante.

Por otro lado, la gestión que hace de la comunicación externa es, cuando menos, temeraria, al tiempo que improvisada, pues está dando a conocer sus intenciones si tener una previsión de las consecuencias laborales, mediáticas o productivas de la implementación de ese cambio.

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