¿El liderazgo basado en el servicio incluye actuar éticamente?

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Student: César Ulises Martínez García              Date: 9/Jan/2021

Course Name: Liderazgo y Dirección

¿El liderazgo basado en el servicio incluye actuar éticamente?

Introducción

El concepto de liderazgo basado en el servicio, al cuál me referiré en el resto de este documento como “Servant Leadership”, es relativamente reciente. Actuar éticamente es uno de los comportamientos base dentro de esta práctica (Kumar, 2020). En un contexto general, un líder se entiende por alguien que es seguido por uno o varios adeptos, que indistintamente de si sus ideas son política y/o moralmente correctas, estos últimos creen fielmente en que sus enseñanzas, la forma de expresar y vivir dichas ideas son su mejor alternativa en un ámbito específico (ideología política, religiosa, laboral, económica o cualquier otra). En la era moderna, la responsabilidad social, la ética y el buen comportamiento son un requisito indispensable para las organizaciones y sus líderes, ya que, gracias a las comunicaciones abiertas e instantáneas basadas en medios de comunicación como las redes sociales, un desliz o equivocación puede costar la lealtad de clientes, proveedores, seguidores o cualquier otra entidad que tenga relación con quién cometió el agravio.

Desarrollo

Establecemos primeramente la hipótesis de que todos los líderes cuyo enfoque es el Servant Leadership deben actuar éticamente. Partiendo de esta suposición, tenemos que, hay un par de atributos (Kumar, 2020) que denotan si un líder tiene un comportamiento ético y su grado de madurez en ello: conciencia/criterio, control y la previsión (ser precavido). En base a estos tres atributos listados, debemos de evaluar si todos los Servant Leaders tienen un grado avanzado en cada uno de ellos.

Empezando por la conciencia, se habla de un individuo que ha sido capaz de formarse un criterio propio sobre lo que es bueno y malo, esto es únicamente posible si su entorno social a lo largo de sus varias etapas de vida le proveyó las herramientas y experiencias necesarias. Tenemos entonces que una persona que, durante gran parte de su vida, escuchó decir a su padre, madre o figura jerárquica mayor cosas como: “el que no es tranza no avanza” o los vio hacer alguna acción como sobornar a un agente de vialidad o policía tras incurrir en una falta administrativa, y esto sin recibir al menos una explicación como: “esta mal, tú no debes hacerlo”, seguramente tendrá un impacto negativo en su criterio y habilidad para distinguir entre lo éticamente bueno y malo. En cambio, hablando en otro ámbito, un trabajador que ha sido entrenado y se le han dado las herramientas necesarias para distinguir entre un interno de soborno y las consecuencias que esto puede tener no solo para él sino para la organización a la que sirve, se sensibilizará y tendrá más posibilidades de apegarse a la ética mediante un criterio formado como efecto de las pautas tomadas por la empresa, como el ya mencionado adiestramiento.

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