El trabajo en casa

Buenas noches:

La actual crisis mundial, desatada por la pandemia del COVID-19, exigió a los actores del ámbito laboral buscar medidas para continuar con la operatividad sin afectar la salud de los trabajadores colombianos. En este contexto surge el trabajo en casa y se promueve el uso del teletrabajo con el objetivo de brindar a los empleadores alternativas para proteger el empleo y la actividad productiva del país, en condiciones de seguridad para la salud de sus empleados.

Así las cosas, la distinción de las posibles medidas a las cuales puede recurrir los empleadores, supone la presencia de escenarios jurídicos diferentes, con obligaciones y consecuencias legales distintas. Es importante recordar que esta modalidad de teletrabajo o como otros lo llaman “home office” se creó bajo la ley 1221 del 2008, reglamentada por el decreto 1070 del 2015. El artículo 2.2.1.5.2 lo define en los siguientes términos: “El teletrabajo es una forma de organización laboral, que se efectúa en el marco de un contrato de trabajo o de una relación laboral dependiente, que consiste en el desempeño de actividades remuneradas utilizando como soporte las tecnologías de la información y las comunicaciones(TIC) para el contacto entre el trabajador y el empleador sin requerirse la presencia física del trabajador en un sitio especifico de trabajo.” En pocas palabras esta modalidad permite al trabajador hacer sus tareas desde la casa, pero no se trata de un contrato de trabajo a domicilio, pues la naturaleza del teletrabajo permite que pueda ser desarrollado por medio de internet no solo desde la casa sino desde cualquier otro sitio, incluso fuera del país.

Anexo link de información del teletrabajo: https://teletrabajo.gov.co/622/w3-article-8423.html ; https://www.gerencie.com/teletrabajo-en-colombia.html/amp ; https://www.google.com/amp/s/www.semana.com/amp/cual-es-la-diferencia-entre-teletrabajo-y-trabajo-en-casa/303479 

• Primera conclusión:

Respecto a esta figura, vale destacar que, según los expuesto previamente y basada en investigación  de este tema, las condiciones actuales no están diseñadas para una adopción inmediata, en razón de la cantidad de requisitos legales que se deben cumplir y su implementación conlleva para los empleadores inversiones económicas y logísticas significativas, que en principio tendrán resultados de eficacia y efectividad inciertos, por lo cual es una opción a evaluar, la decisión de probar esta modalidad no podría ser una respuesta de emergencia y de serlo representaría un riesgo muy alto para cualquier empresa pues no se realizaría la planeación y sensibilización necesaria, lo cual se podría ver reflejado en una disminución en la eficiencia y los objetivos de producción planificados. De igual forma se puede presentar una incoherencia desde el punto de vista jurídico pues e contrapone la necesidad de aislamiento, derivada de la emergencia sanitaria y la relación de implementar el teletrabajo con los rígidos elementos de lo componen y las cargas en las que puede presentar el empleador.

El trabajo en casa es una figura relativamente nueva en el contexto colombiano, esta surge de la necesidad de una respuesta inmediata para la continuidad de diferentes sectores de trabajo en medio de la pandemia. El concepto surge a través de la circular 021 del Ministerio de trabajo, la cual fue expedida el 17 de marzo del 2020, establece como una medida excepcional, ocasional, y temporal en la cual el trabajador puede desarrollar sus labores desde casa en cualquier sector de la economía, recalcando que esta modalidad es diferente al teletrabajo pues no cumple con los requisitos establecidos para este en la ley 1221 del 2008. El mismo sentido, el trabajo en casa no cuenta con una consagración legal tal como en el teletrabajo y es por ello que ha sido muy llamativa para los empleadores en su aplicabilidad.

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