La curva de Philips

La curva de Philips da su nombre como reconocimiento al trabajo empírico sobre el desempleo y los salarios nominales en el Reino Unido llevado a cabo por A.W Philips. Y esta no es más que una relación entre inflación (sea de los precios o en los salarios) y el nivel de desempleo. En donde, supongamos, que el Banco Central de cierto país ha determinado aumentar la oferta monetaria, política monetaria expansiva, lo que estimulara la producción, y con ello el empleo, es decir, que la tasa de desempleo disminuirá. No obstante, también al generarse un crecimiento en la demanda agregada, debido al estímulo en la producción, habrá un aumento en los precios, lo que se traduce en que se eleve la tasa de inflación.

Los conceptos de inflación y desempleo no son ajenos a la realidad venezolana, la cual ha sufrido en los últimos 7 años los efectos de una recesión económica profunda y prolongada junto con una hiperinflación. Los cuales se han visto reflejadas en el colapso de los ingresos laborales de los trabajadores venezolanos, ocasionando una significativa erosión en las condiciones de vida de sus habitantes.

Sin embargo, luego de todos estos años de crisis económica, Venezuela presento vestigios de una naciente, pero limitada recuperación económica a finales del 2021, debido a un proceso de dolarización en donde el dólar ha ganado peso como unidad de cuenta, como medio de intercambio en las transacciones, y como determinante de precios y salarios. Tal como lo dice el Observatorio Venezolano De Finanzas, al comentar que al cierre del 2021 un 71% de las remuneraciones del sector privado se pagaba en USD, frente a 62% hace un año.

Es por ello, que en el presente ensayo se busca conocer, utilizando como soporte teorico-analitico a la curva de Philip bajo la visión monetarista, los efectos de las perspectivas económicas para Venezuela en el año 2022.

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