¿Que es competente?
Enviado por Sadai19 • 4 de Septiembre de 2015 • Documentos de Investigación • 1.748 Palabras (7 Páginas) • 211 Visitas
CUESTIONARIO |
[pic 1]Ser competente significa tener la capacidad para aprender, identificar situaciones y llevar a cabo ciertas tareas específicas. Muchas veces, solemos confundir el ser capaz con el ser competente, sin embargo, el ser capaz es tener la habilidad y el conocimiento (la aptitud o la capacidad) para hacer algo determinado, y el ser competente es ser el ideal para hacer ese algo, esto es, ser competente es ser capaz y mejor que eso. Un hombre o una mujer competente, demuestra poseer un amplio rango de conocimientos y habilidades útiles para la vida, por lo que posee un conocimiento holístico (analiza y observa el sistema como un todo integrado y global que en definitiva determina cómo se comportan las partes del mismo) y hasta cierto modo, sabio. “Un ser humano debe ser capaz de cambiar pañales, planear invasiones, carnear cerdos, navegar barcos, diseñar edificios, escribir sonetos, contabilizar saldos, levantar paredes, tratar fracturas, dar consuelo a moribundos, recibir órdenes, dar órdenes, cooperar, actuar solo, resolver ecuaciones, analizar nuevos problemas, palear estiércol, programar computadoras, cocinar bien, luchar eficientemente, morir con gallardía. La especialización es para los insectos”. (Heinlein, 1973). |
Desde mi punto de mi vista, considero que el fin de conocer el grado de dominio de competencias que poseen los alumnos, no es determinar el nivel de conocimientos que posee el estudiante sobre una materia concreta, sino valorar, esencialmente en qué grado posee una determinada competencia. Al tener el valor o el grado en que se tiene la competencia, se busca mejorar el trabajo del docente, es decir, mejorar las técnicas, herramientas y habilidades que este utiliza en su método de trabajo, así como el proceso que este sigue. Ahora bien, para facilitar la valoración del logro de la competencia, se puede diseñar una matriz de valoración en la que pueden establecerse de un modo escalonado y jerárquico, diferentes grados en el dominio de la competencia por el estudiante y sus correspondientes equivalencias en el sistema de calificación utilizado. |
Primeramente, el docente debe desarrollar su empeño formativo asumiendo que la competencia sobre la que se debe formar ha de ser planificada y desarrollada coordinando los objetivos del aprendizaje que se pretenden alcanzar, los contenidos que se van a impartir, los métodos y técnicas a utilizar, los recursos que se necesitan emplear, las evidencias que se deben recopilar, así como los métodos e instrumentos de evaluación del logro o competencia que se van a aplicar. Estos se deben situar en una coordenada espacio – temporal suficiente para que el estudiante pueda adquirir la capacidad. La evaluación se puede clasificar en tres partes: 1.- Evaluación inicial o de diagnóstico 2.- Evaluación de proceso o formativa 3.- Evaluación final o de promoción |
Conocer el grado de dominio que el alumnado ha adquirido de una competencia es una tarea bastante compleja, ya que implica partir de situaciones-problema que simulen contextos reales y disponer de los medios de evaluación específicos para cada uno de los componentes de la competencia. Concluyó que sería, específicamente dos, por un lado tendríamos el resultado del aprendizaje, y por otro lado el proceso de enseñanza que nos lleva al resultado de aprendizaje, y por tanto el proceso de enseñanza y el proceso de aprendizaje son dos procesos pero están íntimamente relacionados de tal manera que aquello que aplicamos en las aulas está correlacionado con resultados de aprendizaje que tendrán los alumnos. Por tanto la formación de competencias y el objeto de evaluación de las competencias tendría que ser también la propia actuación docente por un lado y luego también las actuaciones que estamos observando en los alumnos para determinar si están siendo competentes en la resolución de problemas para la vida. Dado que la competencia se define como la respuesta eficiente ante una situación real, concreta y en un lugar y momento determinado, podemos llegar a la fácil conclusión de que la evaluación de competencias, propiamente dicha, es imposible si no se realiza en el mismo momento en que se plantea la circunstancia que exige ser competente. Como hemos visto, enseñar competencias, al igual que cualquier tipo de enseñanza en el ámbito educativo escolar, siempre comporta pensar en el futuro. Casi nunca se enseña algo pensando solo en el presente. Es más, lo presente, en la mayoría de los casos, es solo el medio para lo futuro. La educación siempre se define con la intención de formar para un mañana más o menos lejano, especialmente cuando se propone de forma explícita formar para la vida. |
La primer gran problemática a la que se enfrenta un docente, es un tanto difícil al ser algo que exige un cambio de mentalidad. A veces se necesita un cierto valor para hacer una apuesta y decir que si las cosas siguen como hasta ahora, tendremos las tasas e índices de fracaso que tenemos. Vamos a probar una nueva cosa a ver si verdaderamente, una vez comprendido y visto cuáles son sus virtudes, puede mejorar esas tasas negativas y esos índices; pero todo ello requiere del acuerdo de instituciones, de acuerdos completos, porque no es sólo una tarea de docentes, las autoridades también necesitan creer en esto y ponerlo en marcha y los resultados son siempre mejorar lo que se tenía hasta ahora. [pic 2]en una formación por competencias como ellos tienen que resolver problemas de la vida, saber analizar, tener esquemas de actuación incorporados y aplicarlos de manera estratégica todo esto supone que es una complejidad en la forma de enseñar y luego en la forma de evaluar también, y luego se enfrenta a que el simple examen no es suficiente para evaluar una competencia, porque en ese examen nos es imposible saber si la persona es competente, si lo memorizó para pasar el examen pero realmente no es competente y cuando se enfrente a la vida no será capaz de utilizar esas competencias de manera adecuada, esos p roblemas tienen que ver con cuestiones como que los profesores estamos acostumbrados a evaluar más para sancionar que para informar, de tal manera que se aprueba o reprueba, en la enseñanza por competencias tenemos que ir a una evaluación que por un lado cubre una parte normativa y por tanto da una calificación, y por otro lado una parte criterial en función de las capacidades que tenga cada alumno para responder a esa competencias. Por tanto tendríamos que elaborar boletas con dos columnas, una normativa que es la oficial y otra parte criterial, en donde en función de la competencia que ya ha adquirido el alumno, yo le pueda medir hasta qué grado está llegando, después de una formación y serie de actividades didácticas que yo le he puesto. Tiene que ver más con el aprovechamiento, con aquello que ahora ya saben que antes no podían hacer y por tanto un alumno que ha mostrado una situación muy básica pero ha hecho un gran desarrollo de la competencia podrá tener una calificación muy alta y otro alumno que ya trae la competencia desarrollada y no ha hecho un esfuerzo durante el periodo de formación podría ser baja su evaluación criterial. |
En el proceso de evaluación de las competencias, como hemos podido observar, los indicadores se refieren a uno o varios componentes de la competencia. De modo que hay indicadores que muestran el conocimiento o dominio de uno o más de los componentes factuales, conceptuales, procedimentales o actitudinales de la competencia. A partir de una situación-problema se realizan las actividades que permiten darle respuesta para cada uno de los indicadores de evaluación. Actividades cuyo significado debe depender de la capacidad de mejora de la comprensión de la situación-problema y de la aptitud de proveer de información acerca del grado de aprendizaje de cada uno de los distintos componentes de la competencia. Por esta razón, dichas actividades deben ser apropiadas a las características de cada uno de los componentes. Observar la capacidad de análisis que tiene los alumnos frente a una situación problemática. Una herramienta muy importante es crear situaciones problema, simularlas, o más bien crear situaciones reales problemáticas, que tengan que resolver los alumnos, y en esa resolución observar cómo analizan y las decisiones que toman, y tendrían que ser respecto de los esquemas de actuación que hemos enseñado, y que ellos, se supone que han aprendido para poder resolver esa situación. |
Trabajo colectivo del profesorado y de metodologías abiertas en donde los alumnos constantemente den información al docente. Cada vez que los niños hacen algo nos dan información, esto implica metodologías activas en donde los niños tengan que hacer cosas. Qué métodos nos permitirán evidenciar las competencias. |
Las principales implicaciones que se tienen, es, primeramente, desarrollar competencias docentes. Además de ellos, debemos ser buenos observadores y evaluadores de los alumnos, tener metodologías activas, en dónde los alumnos puedan participar y organizar de manera compleja el aula y desarrollar competencias docentes para poder observar a los alumnos. Buenos escuchas de los alumnos. |
La competencia es un constructo complejo, lo cual implica la utilización de procesos de evaluación que también son complejos. Evaluar competencias siempre implica evaluar su aplicación en situaciones reales, en contextos también reales y que hacen referencia a unas intenciones que se deben desarrollar fuera de la escuela. Sin embargo, la mayor importancia que podemos resaltar, es la vida. Aprovechar cualquier problema. Un contexto complejo ayuda a la enseñanza por competencias, entonces usar el contexto como espacio educativo. Hay que crear situaciones problemáticas. |
El proceso de desarrollo de una competencia en una situación concreta. Necesitamos muchas situaciones. Una herramienta importante es el portafolio de evidencia, el contrato didáctico, etc. |
[pic 4]Convertir la casa en espacio educativo. De la heteronomía moral a la autonomía moral. Lo hago porque me lo dicen, porque me lo piden, a lo hago porque me lo creo porque lo he incorporado en mi escala de valores y por tanto me comporto en consecuencia. |
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