6 Estadios Del Pensamiento
Enviado por kicm15 • 25 de Febrero de 2014 • 1.189 Palabras (5 Páginas) • 549 Visitas
Piaget estableció 6 estadios para el desarrollo de la inteligencia.
• Primeros reflejos (0-1 mes)
• Primeros hábitos motores (1-8 meses)
• Inteligencia senso-motora o práctica (8-24 meses)
• Inteligencia intuitiva (2-7 años)
• Operaciones intelectuales concretas (7-11 años)
• Operaciones intelectuales abstractas (11-15 años)
El desarrollo mental del niño.
Tanto el desarrollo físico como el desarrollo psíquico consisten esencialmente en un proceso que pasa de un equilibrio inferior a otro más superior. El desarrollo psíquico implica entonces una marcha hacia el equilibrio, lo cual se cumple en las tres áreas del desarrollo psíquico: la inteligencia, la afectividad y la socialización.
Al estudiar este proceso de equilibración, debemos tener en cuenta dos cosas importantes: estructuras y funciones. Así, es preciso oponer desde el principio las estructuras variables, las que definen las formas o estados sucesivos de equilibrio, y un determinado funcionamiento constante que asegura el paso de cualquier estado al nivel siguiente. Así, las estructuras son variables, y las funciones constantes. Las estructuras variables son formas de organización mental referidas a lo intelectual y a lo afectivo, así como a lo individual y a lo social. Los seis estadios corresponden a seis estructuras diferentes que van construyéndose una sobre la base de la anterior, alcanzando siempre niveles de equilibrio cada vez más superiores y estables.
El recién nacido y el lactante.
El periodo que va del nacimiento a los dos años (adquisición del lenguaje) es una conquista, a través de percepciones y movimientos, de todo lo que rodea al niño pequeño. Al principio el niño se centra en sí mismo y su acción, pero al final de este periodo ya puede situarse como un objeto más dentro del universo que fue construyendo.
1. Reflejos (0-1 mes).- El bebé nace con reflejos, o coordinaciones senso-motrices hereditarias que corresponden a tendencias instintivas, como por ejemplo alimentarse (reflejo de succión). Tales reflejos no son pasivos: el bebé los va perfeccionando activamente (por ejemplo, al cabo de un tiempo succiona mejor).
2. Organización de percepción y hábitos (1-8 meses).- Poco a poco los reflejos van transformándose en hábitos: dejan de ser automáticos y se tornan flexibles. Así, un niño puede chupar objetos diversos, y no sólo el pecho materno. Esto lo logra por ejercitación y por asimilación. El niño empieza también a poder reproducir una conducta que realizó, una y otra vez (reacciones circulares).
3. Inteligencia sensorio-motriz (8-24 meses).- Aparece aquí, mucho antes del lenguaje verbal, la llamada inteligencia práctica, es decir, aquella que se aplica a la manipulación de objetos mediante percepciones y movimientos, no mediante palabras o conceptos.
Dos factores intervienen en la construcción de estos actos de inteligencia:
a) las conductas anteriores se multiplican y diferencian cada vez más, adquiriendo flexibilidad para registrar los resultados de la experiencia.
b) Los esquemas de acción se coordinan entre sí por asimilación recíproca: el niño busca comprender los objetos usándolos y manipulándolos con una determinada.
Hacia el final de este periodo, el niño ya discrimina netamente el mundo interno del externo, empieza a des-centrarse, a considerar la existencia de objetos independientes en el mundo, donde él es también un objeto más. En estos dos primeros años, el niño empieza la construcción de cuatro categorías fundamentales: espacio, objeto, tiempo y causalidad. Estas todavía no son nociones del pensamiento sino categorías prácticas, ligadas a la pura acción sensomotora.
La primera infancia de los 2 a los 7 años.
• La socialización de la acción.- El lenguaje permite aquí ya la comunicación entre individuos en forma continua. Aparece la imitación diferida, que permite reproducir sonidos en ausencia
...