ATENCIÓN PSICOLÓGICA INTEGRAL

CENTRO DE ATENCIÓN PSICOLÓGICA INTEGRAL

Debido a las exigencias de la sociedad actual nos enfrentamos a retos y vicisitudes diariamente, situaciones que requieren herramientas para sobrellevarlos de la mejor manera posible. Sin embargo las familias mexicanas se han visto en la necesidad de priorizar exigencias tales como cubrir las necesidades de alimentación, invertir en educación y atender las necesidades de salud fisiológica que se puedan presentar.

La salud mental ha sido una de las cuestiones que a lo largo de los años se ha relegado por la gran mayoría de los mexicanos y que sin embargo no por ser la menos atendida quiere decir que sea la que menos problemáticas conlleve. Por el contrario cada año las enfermedades mentales van en aumento y se presentan con mayor frecuencia en la población mexicana, ejemplo de ello son los eventos de depresión, ansiedad, estrés, etc. que están íntimamente relacionados con cuestiones laborales, presiones familiares y exigencias sociales a las que nos enfrentamos día con día.

Referente a ello, según los datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía  (2011) indican que en el Distrito Federal el 9.2% de la población está diagnosticada con un padecimiento mental, aunado a ello de acuerdo con reportes del Sistema de Información en Salud de la Secretaría de Salud del Distrito Federal, en el primer trimestre de 2015, de 60 mil 510 consultas de psicología que se otorgaron dentro de centros de salud y hospitales de la red capitalina, 10 mil 990 correspondieron a los trastornos mentales y del comportamiento relacionados con el estrés; este tipo de datos avalan que en los próximos años algunas de las enfermedades que ocuparán los primeros lugares de incidencia en el país serán precisamente las enfermedades mentales, como es el caso de la depresión.

Según datos del Panorama Sociodemográfico del Distrito Federal (2011), la Delegación Gustavo A. Madero ocupa el segundo lugar de las delegaciones con mayor población en el Distrito Federal con una población total de 1 185 772 habitantes. En cuestión de educación de cada 100 personas, solo 24 tienen algún grado aprobado en educación superior, de la población económicamente activa (54.4%) de cada 100 personas 54 participan en actividades económicas, las personas no económicamente activas representan el 44.4% de la población, la cual está conformada por estudiantes, personas dedicadas a los quehaceres del hogar, jubilados y pensionados, personas con alguna limitación física o mental permanente que les impide trabajar y personas en actividades no remuneradas. Por último 1.2% de la población no especifica las actividades que desempeña.

De la misma forma, la población derechohabiente representa el 67.8% de la población, lo que quiere decir que de cada 100 personas, 68 tienen derecho a servicios médicos de alguna institución púbica o privada, siendo la seguridad social púbica la que abarca la mayoría del porcentaje (63.1%). Un dato relevante a considerar que las estadísticas mencionan es el relacionado a las limitaciones físicas o mentales, donde de cada 100 personas, 6 reportan alguna limitación de ésta índole (Panorama Sociodemográfico del Distrito Federal, 2011)

Como se puede observar en las estadísticas presentadas la población de la Delegación Gustavo A. Madero, en cuestión de salud, si bien la mayoría de las personas cuentan con algún servicio al cual recurrir es importante destacar para acudir a una cita para el servicio de salud mental es necesario esperar bastante tiempo antes de que la problemática pueda ser atendida, debido a que la demanda sobrepasa a los sistemas de salud pública, en ese periodo de espera es muy probable que las personas desistan de acudir al servicio.

Es por ello que resulta indispensable que se tomen medidas que puedan cubrir la demanda que próximamente irá en aumento, y para ello se requerirá la participación activa de psicólogos que posean las competencias necesarias para enfrentar dichas problemáticas, así como el apoyo gubernamental para la creación de centros que satisfagan dichas demandas.

Es menester promover una perspectiva más amplia con respecto a los beneficios que puede otorgar una terapia, ya que se tiene la firme creencia de que con el uso de psicotrópicos se solucionará definitivamente las enfermedades mentales, y la realidad es que si bien el uso de medicamento puede ayudar de manera significativa en el progreso de la salud mental, es indispensable que se acompañe de un proceso terapéutico; en relación a ello los estudios señalan que la psicoterapia ejerce un efecto neurofisiológico al mismo nivel de los fármacos con acción psicotrópica, se ha demostrado que la psicoterapia produce cambios a nivel de las tasas metabólicas neuronales, a nivel neuroquímico y estimulación de la plasticidad neuronal (Iragorri., Rosas, Hernández y Orozco-Cabal, 2009)

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