Cuidar enseñando
Enviado por rominuchag • 13 de Octubre de 2015 • Apuntes • 1.366 Palabras (6 Páginas) • 110 Visitas
Cuidar enseñando
En una Argentina con altos índices de desnutrición y pobreza infantil, donde la inanición y la falta de responsabilidad adulta, se pone muchas veces en riesgo las condiciones de vida de los niños y jóvenes y la cuestión del cuidado de las nuevas generaciones tiene un rol central.
El tema del cuidado es un problema central en las escuelas de hoy. Después de la crisis, pero después también de Carmen de Patagones y de Cromagnon, la preocupación de que estamos haciendo los adultos con respecto al bienestar de los niños y adolescentes adquiere una urgencia que antes no tenía.
El cuidado en la actualidad esta teñido de miedos. Todos nos sentimos más vulnerables y esta vulnerabilidad viene por una vida que se ha vuelto menos previsible y más sujeta a los accidentes que nos acechan. Los sujetos esta época vivimos con más miedos, a que nos roben nos maten, a enfermarse, a que no nos quieran. El cuidado en esta etapa posterior a Crogmanon y Carmen de Patagones está teñido de miedo y ese miedo culpabiliza al estado por no hacer bien sus deberes. La gente exige más seguridad en las estructuras edilicias, ya que el miedo el miedo se articula con la catástrofe. Pero el cuidado que debemos brindar a las nuevas generaciones no debe agotarse en los edificios y en la asistencia material.
Lo ideal sería, buscar otras formas de conjurar el miedo a las catástrofes estableciendo lazos de mayor protección mutua, que pongan la vida como un valor fundamental y que promuevan actitudes más cuidadosas entre todos y principalmente que las formas de cuidado surja del amor.
Conviene recordar que la educación tuvo que ver desde sus orígenes con el cuidado. La palabra “pedagogo” en las sociedades griegas, señalaba al adulto que acompañaba al niño, que lo guiaba hasta la casa del didaskalos (quien enseñaba las letras). Los acompañaban y protegían de los peligros de la calle o de la vida.
Este significado fue cambiando con el tiempo. Para Kant, la educación incluía dos actividades centrales: los cuidados y la formación. Los cuidaos son para el, la parte vinculada a domesticar la animalidad de los hombres y tiene una función disciplinaria clara: la de someter las pasiones y las debilidades emocionales a la razón y tiene mas que ver con cuidarse a una mismo mas que a los otros. Para el la instrucción letrada, era un plus, un extra, que era bienvenido pero no mas importante que esta primera tarea civilizatoria, kant hace un disociación entre cuidado e instrucción.
En el siglo XX, aparecen otros sentidos a la palabra “Cuidado”, probablemente provenientes de la medicina. En este caso el cuidado tiene que ver con la prevención y la reparación; se asocia a una protección mas integral de la infancia y la adolescencia y a la orientación para el desarrollo de sus potencialidades Ya no es tanto el cuidarse a si mismo lo que le preocupa a la pedagogía, sino el cuidado de los otros. En esta acepción más moderna el cuidado pedagógico es menos pesimista, es una cura una reparación y es visto como una acción de asistencia al otro. Es visto como una acción integral de asistencia al otro.
El cuidado en la última década, sobre todo con la brutalidad de la crisis económica y social reciente, tomo otros matices. Cuidar significó, asistencia social, (Dar de comer, nutrir, vestir, contener emocionalmente). El cuidado estuvo asociado a veces a la contención social. Pero desde esta mirada, A veces el cuidado, se instala un lugar de una desigualdad irremediable: cuidar al pobre, al desvalido, al enfermo. Es una acción que puede condenar a los otros a permanecer eternamente en esa situación que se juzga inferior.
Para organizar otras formas de cuidado mas igualitarias hay que reconocerse, como necesitados de cuidados y como dadores de cuidado. Pero en esta relación de dependencia mutua, debe reconocerse la asimetría entre adultos y niños-adolescentes. No estamos en igual situación frente a la vida, frente al saber y frente a la sociedad. Todavía menos en las escuelas, donde los adultos tenemos, un poder más tangible y concreto que los alumnos.
La escuela es una institución que enseña pero a su vez cuida y ampara.
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