Desarrollo De La Personalidad

Desarrollo de la personalidad

“Los destinos de la pulsión, defendiendo al yo”

El desarrollo de un individuo abarca diferentes aspectos, tales como lo motor, la percepción, la memoria, el aprendizaje, el habla sin embargo no solo se desarrolla eso, también se desarrolla lo psíquico, lo cual lo convierte en sujeto, no en mero organismo, ya el bebé desde sus primeros años de vida se construye así mismo, ya que si bien lo psíquico es social y cultural también es particular, lo primordial en el desarrollo de un individuo es tomar en cuenta lo psíquico que aunado con los procesos de maduración conformaran la personalidad del sujeto.

El aparato psíquico es lo que constituye al sujeto, integrado por las tres instancias que se conocen el ello, yo y súper yo. Instancias que se encuentran en una dinámica constante, en una lucha, relativamente permanente. El yo por otro lado busca un equilibrio que le permita una estabilidad.

Durante este desarrollo el yo se hace más fuerte y equilibrado, por lo tanto va regulando de mejor manera la energía. Toda la personalidad se hace más integrada, lo que quiere decir que se facilitan los intercambios de energía entre los tres sistemas con el mundo externo (Calvin S. Hall 1983).

Mediante el aprendizaje, se desarrolla una habilidad mayor para enfrentar las frustraciones y las angustias (Calvin S. Hall 1983).

Una frustración es cualquier cosa que impide descargar una excitación penosa o incomoda. En otras palabras, una frustración es algo que se interpone en el funcionamiento del principio del placer (Calvin S. Hall 1983).

Un ejemplo de lo anterior puede ser cuando no se logra alcanzar un objetivo que cause satisfacción, es decir cuando se reprueba un examen, no se consigue un empleo etc.

La angustia es una experiencia emocional penosa producida por excitaciones de los órganos internos del cuerpo. Estas excitaciones son provocadas por estímulos internos o externos y están gobernadas por el sistema nervioso autónomo (Calvin S. Hall 1983).

Cuando al cruzar la calle un individuo no se fija que la luz ya está en verde, inmediatamente se pone alerta, su corazón late más rápido, ya que se está enfrentando a una situación que pone en riesgo su vida lo cual le genera angustia.

Las maneras en que la persona se enfrenta y trata de superar o adaptarse a esos obstáculos modelan su personalidad (Calvin S. Hall 1983).

Con el desarrollo del yo, el principio de realidad adquiere una segunda función además, de la capacidad de posponer reacciones. Ciertas pulsiones no solo deben ser diferidos sino también restringidos en forma más o menos permanentes. El yo aprende a resguardarse de los que son impulsos peligrosos o inadecuados (Gerld S. Blum 1972).

El desarrollo de la palabra transforma gradualmente el pensamiento prelógico en un pensamiento lógico, organizado, y adecuado, lo que constituye un avance decisivo hacia el principio de realidad (Gerld S. Blum 1972).

El yo encuentra las formas y lo métodos de omitir aquellas situaciones de angustia, frustración y conflicto, encuentra las formas de satisfacer un deseo, que no pueda llevar acabo en la forma que en realidad quiere, sin embargo encuentra salidas para ello algunas como las que se mencionaran en seguida.

La sublimación es desviar el trayecto de la pulsión cambiando su meta, esta maniobra consiste en el reemplazo de la meta sexual ideal, por otra meta no sexual pero valorada socialmente. Las realizaciones culturales y artísticas, las relaciones de cariño entre padres e hijos, los sentimientos de amistad y los vínculos sentimentales en la pareja, son todos ellos expresiones sociales de las pulsiones sexuales desviadas de su meta virtual. La amistad, por ejemplo, es alimentada por una pulsión sexual desviada hacia una meta social (Juan David Nasio 1999).

Respondemos que la sublimación es la única noción psicoanalítica susceptible de explicar el que obras creadas por el hombre, realizaciones artísticas, científicas e incluso deportivas, alejadas de toda referencia a la vida sexual tomada de una fuente sexual. El concepto de sublimación responde fundamentalmente a la necesidad de la teoría psicoanalítica de dar cuenta del origen sexual del impulso creador del hombre (Juan David Nasio 1996).

Un ejemplo de sublimación es cuando una persona investiga mucho acerca de un tema, tiene el deseo del saber ahí es depositada la pulsión sin embargo la realidad de la pulsión, es el deseo de la curiosidad sexual.

El sujeto encuentra entonces la posibilidad de satisfacer la pulsión, por ejemplo a través de actividades artísticas, son altamente aceptables por la sociedad.

Por otro lado se encuentra la identificación se define como la incorporación de las cualidades de un objeto externo, generalmente las de otra persona, a la propia personalidad. Una persona que se identifica exitosamente con otra persona se parecerá a ella. (Calvin S. Hall 1983).

La identificación tal como es concebida por el psicoanálisis freudiano es un proceso de transformación efectuado en el seno mismo del aparato psíquico, fuera de nuestro espacio habitual y que no puede ser percibido en forma directa por medio de nuestros sentidos (Juan David Nasio 1996).

Referido a lo anterior puede suceder que no se dé cuenta de que se está imitando a alguna persona, suele pasar desapercibido es inconsciente sin embargo, en algún lugar se sabe el por qué se está en un sitio, es decir, por ejemplo un determinado grupo de amigos, todos se identifican porque tienen características en común, por algo se está ahí. Algo les da ese lugar.

Existen también personas que suelen identificarse con individuos que

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