Discurso Del Metodo

DISCURSO DEL MÉTODO

Para Descartes el encuentro de un método preciso es la primera condición del pensamiento. Este método es para superar todas sus dudas.

El discurso es donde se ofrecen “los procesos para guiar bien la razón y buscar la verdad de las ciencias”.

El discurso del Método consta de seis partes. En la primera, intitulada “Consideraciones relativas a las ciencias”, donde Descartes dice que “El buen sentido es igual entre todos los hombres; depende de los diversos caminos que sigue la inteligencia y de que no todos consideramos las mismas cosas”. Aquí, el buen sentido es la razón, es decir que todos los hombres tenemos el mismo grado de razón, pero depende de como es aplicada. Dice Descartes que la razón es la característica del hombre, en cuanto por ella nos diferenciamos de las bestias.

Descartes dice haber encontrado ciertos caminos con consideraciones y máximas que forman un método, por el cual piensa que puede aumentar sus conocimientos y elevarlos evitando la mediocridad de su inteligencia y la corta duración de su vida. Como resultado desconfía de las fuerzas.

Marca la necesidad de conocer todas las ciencias, hasta las mas supersticiosas y falsas, a fin de apreciarlas en su justo valor y no incurrir en errores frecuentes.

Dicen que los que tienen vigoroso el pensamiento y digieren bien las ideas pueden persuadir; y los que tienen gran fuerza de imaginación y saben expresar sus imágenes con galanura, serán poetas excelentes. Es decir, que los dos tipos pueden expresarse según sus facultades pues aún siendo distintos hay un razonamiento de por medio.

Descartes creía falso todo lo que se presentaba en su inteligencia aún con el carácter verosímil. El quería distinguir lo verdadero de lo falso para juzgar con claridad sus acciones y caminar rectamente por la senda de la vida. Hay en el una lucha por saber.

En la segunda parte del Discurso, intitulada “Principales Reglas del Método”.

El creé que los juicios hechos por una sola persona son mas cercanos a la verdad que los hechos por varias personas.

Se puede cambiar de ideas, quitar todas las ya tenidas desde pequeños y modificarlas a nuevas. La resolución de deshacerse de las ideas recibidas, para sustituirlas por otras depuradas con el propio juicio y de la propia razón. El propósito que tenía Descartes es el de levantar el edificio de sus ideas y creencias sobre un cimiento exclusivamente suyo.

Descartes dice “Que mas que un conocimiento verdadero y cierto, es la costumbre y el ejemplo lo que nos persuade”. Es decir, que en la costumbre se deja de juzgar para saber si es real ese conocimiento, si es verdadero. Por ende la persuasión se debe a seguir el ejemplo sin cuestionar que tan cierto es.

El objeto de sus investigaciones es llegar al conocimiento de las cosas. Descartes creé que la lógica con sus silogismos, mas que para aprender las cosas, sirve para explicarlas al que las ignora o para hablar de ellas aunque no las conozcamos.

El resultado encaminado a eludir la incertidumbre son cuatro reglas:

No admitir como verdadero sino lo evidente (Principio de la Evidencia); es decir, no incluir nada mas en los juicios sino aquello que se presentara tan claramente y tan distintamente al espíritu que no tuviera ocasión de ponerlo en duda.

Dividir el problema en tantas partes como sea preciso (Principio del Análisis).

Ordenar los pensamientos de lo mas simple a lo mas complicado (Principio de la Síntesis); es decir, subir poco a poco.

Practicar revisiones o recuentos para ver que nada se omita (Principio de la Enumeración).

Descartes piensa que todas las cosas susceptibles de ser conocidas se relacionaban como aquellos razonamientos. “Que no hay cosa tan lejana que a ella no pueda llegarse ni tan oculta que no pueda ser descubierta”.

Descartes se esfuerza por descubrir los supuestos mas generales de los fundamentos metódicos de las ciencias. Cree que hay un equilibrio con las matemáticas y otras ciencias particulares. Dice que la razón interviene como principal elemento en la labor científica.

Las reglas pueden dividirse en dos ideas centrales:

Si queremos conocer algo debemos evitar la precipitación y la prevención;

Una vez evitadas ambas debemos proceder con claridad y distinción; debemos poner en duda la realidad para alcanzar la verdad. Para Descartes prevención es prejuicio, es decir que debemos analizar lo que se creé como verdadero y falso, esto es una actitud crítica personal como la tendencia cartesiana. La precipitación significa para Descartes un género de pensamiento que atiende mas a la voluntad que a la razón. La voluntad puede ser infinita, pero la razón tiene límites.

En la tercera parte intitulada “Algunas reglas de moral sacadas de este método”.

Descarte dice “La razón me dictaba la mayor irresolución en mis juicios” formó para su uso moral provisional algunas máximas, que consideró con la actitud ética que necesita para vivir, por ello la llama moral provisional “Nada es más verosímil que no se conozca lo que se creé” ósea que nos falta mucho por conocer.

Primer máxima, obedecer las leyes y costumbres de su país de donde se deriva: 1) la creencia de Dios, y 2) no enajenar nunca la libertad

Segunda Máxima, consistía en emplear en sus actos la mayor energía y firmeza de que fuera capaz y seguir las opiniones dudosas, una vez aceptadas, con la constancia con que seguiría las mas evidentes. Se refiere a tomar una decisión y llevarla a cabo hasta el final. Deshecho los remordimientos y las indecisiones.

Tercer Máxima, consistía en aspirar, mas que la fortuna, a vencerse, y mas a cambiar de deseos, que a que el orden real se trastornará por dar cumplida satisfacción a las deleidades. Descartes quería habituarse a creer que solo nuestros pensamientos nos pertenecen. Yo estoy en desacuerdo con esto, pues creo que mis pensamientos son en base a muchas críticas e ideas de otras personas ya dados, es decir que no me pertenecen por completo, aunque claro llevan un grado de mi reflexión que si me pertenece.

Observo que Descartes se muestra positivo en sus ideas en contraste con Nietszche que niega y crítica lo que Descartes dice. “Haciendo de la necesidad una virtud, el deseo de la salud en el enfermo o el de la libertad en el encarcelado,

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