El Docente Q Necesitamos

El Docente que Necesitamos

Se puede decir que la educación es la facultad principal de todos los seres humanos, donde podemos desarrollar nuestras capacidades y destrezas ya sean; físicas e intelectuales. El objetivo principal de la educación es ayudar, cultivar y orientar al educando porque a través de eso nos permite fortalecernos de muchas formas.

La pedagogía es la rama sistemática y científica muy importante en la educación y su finalidad es el estudio, el arte entre otros; se deben buscar soluciones para entender la pedagogía pero a su vez se debe enfocar es en la orientación para que así el educando posea nuevas alternativas.

La didáctica no es más que la enseñanza o una técnica del aprendizaje que explica esquemáticamente métodos más factibles y eficaces para poder inculcarle al educando una serie de conocimientos para su formación.

Desde siempre el hombre ha tenido la necesidad de aprender y de ir mas allá de las barreras del conocimiento existente, es por ello que es fundamental la presencia de un maestro o educador que lo guié en este proceso de formación.

Más allá de adquirir y enseñar aquellos conocimientos, es fundamental la presencia de este educador, porque no es solo aprender, sino formar personas.

Si indagamos en la pedagogía como rol del docente, es preciso señalar que es fundamentalmente filosófica y que su objeto de estudio es la “FORMACION”, es decir, donde el sujeto pasa de una “conciencia en sí” a una “conciencia para sí” y donde el sujeto reconoce el lugar que ocupa en el mundo y se reconoce como constructor y transformador de éste.

Roberto Magni Silvano dijo; en este siglo la Patria convoca a los Docentes, porque corre el riesgo de ser sometida por la peor de las miserias, “la miseria espiritual”. Esta es la HORA DE LOS DOCENTES, porque el docente es la reserva moral del pueblo, porque es la garantía de la confirmación del ser nacional. No hay destino digno sin cultura nacional, no hay cultura nacional sin valores, no hay valores si no hay docentes capaces de vivirlos para poder enseñarlos.

El docente es un pilar fundamental dentro de esta sociedad, a lo mejor el docente no construye edificios, no salva vidas, entre otras, pero es capaz de construir con una sólida base la educación y formación de una persona.

En esta noble causa, la práctica educativa debe aplicar los poderes y saberes creadores de las experiencias vividas, enriquecidas a diario, con la fuerza creadora de aprender; En la medida que los estudiantes pongan en práctica la válida ilusión de querer hacer, rehacer, convivir, ser y compartir, nos encontraremos ante la presencia de un educador y un educando progresista, irreverente, curioso con ganas de traspasar barreras; las cuales hacen referencia a que andamos tras la búsqueda de lo trascendental,

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