Inteligencia Emocional

1 INTELIGENCIA EMOCIONAL

El término inteligencia emocional fue utilizado por primera vez en 1990 por Peter Salovey y John Mayer, como la capacidad de controlar y regular los sentimientos de uno mismo y de los demás y utilizarlos como guía del pensamiento y de la acción¨.

Un fundamento previo lo encontramos en la obra de Howard Gardner, quien en 1983 propuso su famoso modelo denominado "inteligencias múltiples" que incluye 7 tipos de inteligencia: verbal, lógico-matemática, espacial, musical, kinestésica-corporal, interpersonal, intrapersonal.¨ (Bernal)

La Inteligencia Emocional se define como la capacidad humana de sentir, entender, controlar y regular los sentimientos de uno mismo y de los demás personas utilizando como guía del pensamiento. Se centra en un amplio número de habilidades y rasgos de personalidad que cada una de las personas tiene: empatía, expresión y comprensión de los sentimientos, tendencia a la proximidad o huida, independencia, capacidad de adaptación, capacidad de resolver los problemas de forma interpersonal, habilidades sociales, persistencia, sensibilidad sensorial ante los estímulos, amabilidad y respeto, todas estas ¨configuran rasgos  

de carácter como la autodisciplina, la compasión o el altruismo, que resultan indispensables para una buena y creativa adaptación social¨ (Goleman).

La inteligencia emocional nos permite tomar conciencia de nuestras emociones, comprender los sentimientos de los demás, tolerar las presiones y frustraciones que soportamos en el trabajo, acentuar nuestra capacidad de trabajar en equipo y adoptar una actitud empática y social, que nos brindará mayores posibilidades de desarrollo personal.

1.1 ELEMENTOS QUE PERMITEN CONTROLAR LAS EMOCIONES

El recorrido físico de la inteligencia emocional empieza en el cerebro, en la médula espinal. Aquí tienen lugar las primeras sensaciones que deben viajar desde la parte frontal del cerebro para que podamos pensar racionalmente en una experiencia. Pero antes tienen que pasar por el sistema límbico, donde se experimentan las emociones. Por lo tanto, la inteligencia emocional requiere una comunicación efectiva entre las mentes racional y emocional del cerebro.

Habitualmente existe un equilibrio entre la mente emocional y la mente racional, ya que en la mayoría de las ocasiones estas dos mentes están coordinadas porque los sentimientos son esenciales para el pensamiento y lo mismo ocurre a la inversa. Pero cuando las emociones son más fuertes que la razón, el equilibrio se rompe y la mente emocional desborda y secuestra a la mente racional.

En conclusión, el área racional del cerebro (la parte frontal del mismo) no puede detener la emoción sentida por el sistema límbico, pero las dos áreas se influyen mutuamente y mantienen una comunicación constante.

La comunicación entre el cerebro emocional y el cerebro racional es la fuente de inteligencia emocional física.

1.2 ¿QUÉ HABILIDADES SOCIALES NOS PERMITE DESARROLLAR LA INTELIGENCIA EMOCIONAL? DESCRIBA CADA UNA DE ELLAS.

Las habilidades sociales ayudan a manejar de mejor manera las emociones en las relaciones, interpretando de manera adecuada las situaciones y relaciones sociales, haciendo que se entienda positivamente con los demás.

1.2.1 El autoconocimiento:

Se refiere al conocimiento de nuestras propias emociones y cómo nos afectan en nuestro diario vivir. Es muy importante conocer el modo en el que nuestro estado de ánimo afecta en nuestro comportamiento, cuáles son nuestras virtudes y nuestros puntos débiles de los cuales en muchos de los casos no nos damos cuenta.

A veces nos cuesta mucho trabajo aceptarnos a nosotros mismo, en actitudes en las que sabemos que cometemos errores pero no lo aceptamos. Esto se enfoca en la habilidad de reconocer y entender nuestros estados de ánimo, nuestras emociones y sentimientos, y su efecto en las personas que están a nuestro alrededor. Así mismo la autoconciencia nos sirve para valorarnos y aceptarnos como somos, determinar hacia dónde vamos y qué metas podemos cumplir para lograr llegar a la realización personal y profesional. Además reconoceremos nuestros errores y seremos más cautos al realizar determinada labor en la cual nos estemos desenvolviendo.

Este componente comprende, a su vez, tres aptitudes emocionales:

• Conciencia emocional: Reconocimiento de las propias emociones y sus efectos, aceptar las consecuencias de nuestros actos.

• Autoevaluación precisa: Conocimiento de los propios recursos interiores, habilidades y límites.

• Confianza en uno mismo: Certeza sobre el propio valor y nuestras facultades.

1.2.2 La autorregulación:

La autorregulación nos permite no dejarnos llevar por los sentimientos del momento. Es saber reconocer que es momentáneo

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