LO QUE EL CEREBRO ELIGE IGNORAR Y SU RELACIÓN CON EL COEFICIENTE INTELECTUAL

LO QUE EL CEREBRO ELIGE IGNORAR Y SU RELACIÓN CON EL COEFICIENTE INTELECTUAL

Para muchas personas, la inteligencia es la característica principal para poder procesar la información que reciben de una manera adecuada y óptima, sin embargo estudios recientes han demostrado que gracias al coefieciente intelectual, este tiene la capacidad de ignorar acontecimientos irrelevantes para las mismas.

El estudio principal consistía en que se les administró a todos los participantes tests de Coeficiente Intelectual, a los primeros 12 se les tomó versiones abreviadas, el resto realizó el estudio completo. Luego de esto, se les pidió que miraran videos de objetos pequeños y grandes que se movían, muy ligeramente, hacia la derecha o la izquierda de una pantalla y trataran de identificar la dirección del movimiento. Los científicos sabían que rastrear objetos grandes es más difícil, posiblemente porque en el mundo natural, los grandes movimientos de fondo suelen ser irrelevantes para la actividad humana, así que el cerebro las descarta o ignora. automáticamente.

Los resultados arrojaron un dato interesante, ya que la habilidad de cada individuo para poder identificar correctamente el movimiento entre objetos pequeños y grandes estaba fuertemente vinculada con el Coeficiente Intelectual. Las personas con alto Coeficiente Intelectual, aunque son rápidos al percibir movimientos pequeños, exhiben desproporcionadamente grandes discapacidades en la percepción de movimiento cuando se aumenta el tamaño del estímulo. Estos descubrimientos vinculan a la inteligencia con bajos niveles de supresión sensorial de patrones de movimiento grandes, ya que nuestros cerebros manejan una cantidad de datos impresionantes y como consecuencia su eficacia es menoscabada con la habilidad de suprimir información sin importancia o irrelevante.

Sin embargo este tipo de procedimientos se han aplicado en pacientes que sufren de autismo, y se encontró que los niños con este transtorno, eran dos veces más efectivos en la detección de movimiento de objetos de alto contraste al igual que los niños con un desarrollo normal. Esta sensitividad resaltada podría explicar porqué a las personas con autismo les abruman frecuentemente las experiencias sensoriales fuertes, como luces brillantes y los sonidos altos que la mayoría de nosotros registramos pero ignoramos. Y se ve ligado ampliamente con los talentos intelectuales de los que gozan estos individuos.

Sin embargo este tipo de investigaciones pueden verse afectadas por la habilidad para evitar las distracciones, puesto que la tecnología avanza a pasos agigantados y por consecuencia facilita nuestras labores cotidianas, viendose afectadas nuestras capacidades para concentrar nuestra inteligencia para resolver dificultades que a diario acontecen, surgiendo una cuestión interesante al observar a nuestras futuras generaciones y su desempeño

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