Las Abejas De Emile Beneviste
Enviado por totinga2014 • 13 de Junio de 2014 • 1.049 Palabras (5 Páginas) • 428 Visitas
En su texto “Comunicación animal y lenguaje humano” [1], Benveniste compara las características del lenguaje humano, con las de la comunicación de las abejas. Con ello, pretende establecer una serie de condiciones lingüísticas, que todo lenguaje debe cumplir para llamarse como tal.
Las abejas muestran un grado muy sofisticado de comunicación que destaca incluso frente al de otros animales. Es un hecho patente, que la organización y la división del trabajo de la colmena, responden en cierta medida, al desarrollo de estas facultades comunicativas. El desarrollo de dicha comunicación, llega al grado de que las abejas, pueden comunicar por ejemplo, el lugar donde se encuentra una fuente alimento. Ese desarrollo y precisión en la comunicación, nos hacen preguntarnos si estamos frente a un lenguaje no humano. En el texto que sigue, se reconstruirán los argumentos que Benveniste ofrece en contra de esa posición. Antes, cabe señalar que el interés de Benveniste no son las abejas. Él pretende más bien, usar el modelo de comunicación de las abejas para contrastarlo con el lenguaje humano, y así: ver las características fundamentales del leguaje humano.
La comunicación de las abejas se efectúa más o menos así:
Una abeja “exploradora” encuentra una fuente de alimento y la marca. En seguida, vuelve a la colmena, y las abejas de la colmena toman un poco de polen y un poco del alimento que es masticado por la exploradora. Así saben de qué alimento se trata. Posteriormente por medio de una danza, la exploradora muestra a sus compañeras (camaradas o lo que sean) el origen del alimento. El punto nodal está en la danza, pues las investigaciones de zoólogos (Benveniste se basa en el trabajo de Karl von Krisch) muestran que esa danza esta perfectamente cifrada. En la danza hay dos movimientos: uno consiste en dar círculos horizontales de izquierda a derecha y derecha a izquierda, en el otro; la abeja mueve su abdomen como si imitara la figura de un ocho. El primer movimiento indica la distancia a la que se encuentra el alimento, no pasa de los cien metros, los ochos; indican que la distancia es mayor a los cien metros. En lo que se refiere a los ochos la cosa es más compleja, pues la frecuencia del movimiento, indica distancias exactas. A mayor distancia, mas lenta es la danza. Asimismo, el eje del ocho que realiza la abeja, muestra la dirección conforme a un punto de referencia que es el sol. La abeja muestra un ángulo con respecto al eje y así indica la dirección.
Según Benveniste las abejas se muestran capaces “de producir y comprender un verdadero mensaje, que encierra varios datos […] pues registran relaciones de posición y distancia; pueden conservarlas en la memoria; pueden comunicarlas simbolizándolas por diversos comportamientos somáticos. El hecho notable es [añade Benveniste] que manifiesten aptitud para simbolizar: hay ciertamente correspondencia convencional entre su comportamiento y el dato que traduce.” [2] Ahora bien, lo que nos hace pensar en un lenguaje, es justamente el hecho, de que encontramos la capacidad característica de todo lenguaje, esto es: “la capacidad de formular e interpretar un “signo” que remite a cierta realidad, la memoria de la experiencia y la aptitud para descomponerla” [2] La pregunta
...