Las Cuatro Competencias Docentes

LAS CUATRO COMPETENCIAS BÁSICAS DE UN DOCENTE

“Dime y lo olvido, enséñame y lo recuerdo, involúcrame y aprendo.” Benjamín Franklin (1706- 1790)

ESCUELA NORMAL SUPERIOR DEL ESTADO DE MÉXICO

Licenciatura en Educación Secundaria

Especialidad: Español

Asignatura: Observación y Práctica Docente lll

Profesor: Ismael Santos Neri

Quinto Semestre

Alumna: Mariela García Ventura

LAS CUATRO COMPETENCIAS BÁSICAS DE UN DOCENTE

La actitud es una de las competencias básicas que se debe alcanzar dentro de la formación y el trabajo docente y es un requisito fundamental para todo profesor, como lo mencionan los autores; Fishbein y Ajzen, (1980) “Es el resultado de un ambiente de trabajo y se encarga de generar el conocimiento o de atrofiarlo.” Por esta razón dentro de la actitud está implícito el ser servicial, apoyar en cuestiones académicas, administrativas y todo lo que conlleva el trabajo pedagógico; ser apoyo para la escuela secundaria de tal manera que se pueda servir de ejemplo a los alumnos para que ellos puedan involucrarse en las actividades y logren imitar las buenas cualidades de sus profesores.

Toda actitud influye en las personas, ya sea de manera positiva o negativa; es la forma de actuar de una persona ante los demás; en este caso es el comportamiento de un profesor frente a sus alumnos, es la manera en la que se demuestra ante ellos y de está depende su trabajo, el aprendizaje y el comportamiento de los estudiantes, los autores Fullan y Hargreaves (1996) hablan de la actitud como parte del profesionalismo, considerando que va implícita la reflexión del trabajo que el profesor realiza con los alumnos, respondiendo a las interrogantes, qué ciudadanos queremos formar, qué ciudadanos estamos formando realmente, qué ciudadanos somos nosotros y sobre todo qué estoy haciendo para cumplir con un buen trabajo de formador de individuos.

De tal manera que la actitud involucra la disposición para responder a las demandas que el trabajo escolar solicita y a las exigencias que toda sociedad exige, es por eso que se debe reconocer las fortalezas y debilidades que se poseen o se necesita adquirir para desempeñar un buen trabajo como profesor y como formador de valores en los alumnos.

La actitud lo es todo dentro del trabajo docente, de acuerdo con el autor Capella Rivera (1999) nos habla de la actitud como el comportamiento del alumno en clases y es el producto de las interacciones de los roles que adopta un profesor y su estilo de enseñanza depende del control y la autoridad con que se muestre frente a los alumnos; será la actitud la que intervenga en el respeto o la ausencia de esté de un alumno a un profesor, con relación a lo anterior podemos pensar que una actitud adecuada frente a los alumnos es el resultado del correcto aprendizaje.

Con relación a lo anterior se puede decir que la actitud se encarga de desarrollar un buen trabajo académico y es necesario que los alumnos se identifiquen con el profesor, ya que la manera en la que el docente se exponga frente a ellos dependerá para el gusto o el desagrado por la asignatura; se debe agradar a los alumnos para provocar la simpatía por la asignatura y dar como resultado un buen aprendizaje, tal como el autor Trahtemberg, (2000), nos menciona que la personalidad del docente influye en la enseñanza-aprendizaje, y esta no solamente trasmite conocimientos sino que también es capaz de motivar, seducir e hipnotizar al alumno para que este se integre en las actividades académicas.

Al hablar de competencias docentes también se incluye la planeación y el autor Según Stoner (1996) la define como “Un proceso de establecer metas y elegir medios para alcanzar dichas metas” podemos ver a la planeación como un aspecto primordial en el trabajo de los profesores, está se fundamenta con el plan de estudios 201, es la herramienta primordial de cada docente, ya que se planean las actividades de forma esquematizada, llevando una secuencia lógica y un objetivo en cada estrategia, siguiendo un propósito que en este caso es la enseñanza-aprendizaje de los alumnos.

Con respecto a lo anterior el autor George R. Terry (1956) habla de la planeación como” La selección y relación de hechos así como la formulación y uso de suposiciones respecto al futuro en la visualización y formulación de las actividades propuestas que se cree son necesarias para alcanzar los resultados esperados". Es decir de acuerdo con lo que el autor nos expresa, la planeación es el adelanto de determinados acontecimientos que en este caso conducen hacia la enseñanza-aprendizaje.

La planeación debe adecuarse a las características y necesidades que cada grupo manifiesta, ya que las estrategias que nos resulten favorables en un grupo puede que no resulten en otro, porque los alumnos son distintos y cada grupo tiene necesidades diferentes, por lo tanto aprenden de manera distinta, así que la planeación debe apoyarse también previamente de la observación para así saber que estrategias se deben llevar acabo y que correspondan al desarrollo de la enseñanza-aprendizaje que cada grupo demanda.

Dentro de la planeación se deben considerar las posibles situaciones que puedan presentarse e incluir siempre alternativas que sigan conduciendo hacia la meta, de la misma manera dentro de la planeación hay que incluir la motivación que es fundamental para despertar el interés por la clase y facilitará de cierto modo el trabajo académico.

Para el autor Díaz-Barriga (1998), La planeación didáctica es diseñar un plan de trabajo que contemple los elementos que intervendrán en el proceso de enseñanza-aprendizaje organizados de tal manera que faciliten el desarrollo de las estructuras cognoscitivas,

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