Las Tares De Un Docente.

Introducción

Responsabilidades, habilidades, valores, actitudes, tareas, dificultades, convivencia, retos, son algunos de los múltiples características que se requiere para “ser docente”.

En el transcurso de nuestra formación se ha logrado conocer las características y aspectos que se necesitan en la organización en el aula; así como también en la escuela primaria; es por ello que en esta asignatura Observación y Práctica Docente lll se espera que se manifiesten los conocimientos adquiridos y habilidades desarrolladas que se han obtenido en los semestres anteriores para lograr ser aplicados cuando nos encontremos frente a cualquier grupo escolar.

Afrontar las dificultades y superar retos, es el objetivo que persigue dicha asignatura. En el presente ensayo hemos decidido abarcar tres diferentes temas y son los siguientes: “Las tareas y habilidades del profesor al trabajar con los niños en el grupo.” “Los retos que implica el trabajo docente” y por último “La influencia de la escuela y su entorno en el trabajo del aula”, consideramos que al desarrollar los temas podrán percatarse de lo que hasta este momento de nuestra carrera y experiencias en la práctica se ha logrado.

Un maestro es uno de los recursos más importantes en un salón de clases, claro está, que es quien debe desempeñar labores que detallaremos en el desarrollo del presente escrito, como lo son: el observar, llevar a cabo la organización de la jornada, seleccionar el material adecuado, evaluar, y establecer una comunicación apta para cada grado, son estas las cuales nos permiten a nosotros los profesores el adquirir diferentes habilidades.

También sabemos que en la educación no solo influye el maestro, los alumnos, el personal docente, sino que también los padres de familia y todos los habitantes de la comunidad donde se encuentre situada la escuela, y es que es un factor muy importante saber que tanto interviene la sociedad en una institución y la forma en que lo hace. Es relevante saber que tanto la escuela recibe un impacto con la comunidad, como la comunidad la recibe con la institución.

El fin que se persigue es conocer y desarrollar estrategias para diseñar, organizar, adecuar, poner en práctica estrategias didácticas con los niños y la comunidad. Así como también aprender a dominar los diversos retos que el docente enfrenta dentro del aula.

“La tarea del maestro consiste en proporcionar un entorno y oportunidades de aprendizaje que constituyan un reto para el niño, sin que queden fuera de alcance. Tiene que haber una combinación de familiaridad y novedad que encaje correctamente en la etapa de aprendizaje que ha alcanzado el niño.” Menciona el autor Joan Dean en el escrito “El rol del maestro” (1993).

Esto quiere decir que un profesor debe cumplir una variedad de tareas con los alumnos que permita a los estudiantes lograr un aprendizaje significativo brindándoles las herramientas que estos requieran, las cuales les facilite el desarrollar distintas habilidades para formar sus conocimientos. Durante las lecturas analizadas y las prácticas realizadas en los semestres anteriores pudimos identificar una gran lista de tareas que todo maestro necesita realizar.

La primera de ellas es llevar a cabo la “observación” al grupo con el que va a trabajar, lo anterior nos lleva a conocer algunas de sus actitudes, sus habilidades, dificultades, formas de trabajo, entre otras cosas. Un docente ha de observar para adaptar el programa de enseñanza y aprendizaje a las necesidades individuales y grupales. Claro está que en dicha tarea se demuestran las habilidades que ponemos frente a la situación, y en este aspecto es la de interpretar lo observado, es decir, descifrar la conducta que presentan los alumnos, esto se logrará con algunas actividades o estrategias que adecuemos según creamos conveniente.

Posteriormente a lo que respecta a las tareas del profesor, es la organización de la clase, es decir realizar una planificación o planeación, la cual debe estar organizada para satisfacer las necesidades identificadas a partir de lo observado, relacionando el trabajo diario, con las experiencias para aportar oportunidades de aprendizaje.

Según el escritor Dean Joan (1993) “Toda escuela y todo maestro necesita una estructura de trabajo constituida para que dé cabida a la flexibilidad, pero también lo bastante sistemática como para asegurar que los niños puedan avanzar.” Nos recalca como una habilidad el realizar la planificación, por tanto es indispensable que se adquiera esta habilidad ya que nos da la pauta para realizar la jornada de clases, tomando en cuenta la diversidad de necesidades que los alumnos presenten.

Una más de las tareas que se agregan a la lista del profesor, es el seleccionar el material de aprendizaje adecuado que capacite a los estudiantes ya sea de manera individual o grupal, se toma en cuenta la edad, el contexto en el que se encuentran, así como la relación con el plan de clases.

Evaluar, es sin duda una de las tareas que causa polémica en el rubro educativa, ya que muchas veces confundimos la evaluación con un examen que puede hacer todo menos cumplir con el propósito que esta requiere. Y es la evaluación es la pauta que nos permite conocer los avances, las habilidades, el empeño y el conocimiento que los pequeños adquirieron; debemos como futuros formadores tener en cuenta la multitud de tipos de evaluación que existen (diagnostica, formativa, sumativa, cualitativa, cuantitativa, autoevaluación, coevaluación, etc.).

(Joan Dean, 1993.) “Los seres humanos desarrollan y aprenden resolviendo los problemas a los que se encara”

Esto es cierto ya que afrontando y buscando soluciones a las dificultades que se nos presentan es que podemos obtener un aprendizaje significativo, y es necesario que los formadores tengan la capacidad de detectar los problemas a lo que de enfrente el grupo con el que trabaja, debemos examinar a fondo y plantearnos soluciones posibles, posteriormente tenemos que seleccionar la que consideremos adecuada tomando en cuenta las características que presentan los estudiantes, así podrá llevar a cabo la solución y para finalizar será necesario evaluar los logros obtenidos y valorar si el problema ha sido resuelto.

La capacidad de establecer buenas relaciones con los niños es un requisito de la buena “comunicación” y enseñanza. Esta buena comunicación depende en gran parte de la personalidad del profesor, nuestras actitudes son las que generan la confianza que depositaran los alumnos en nosotros, ya que ayudan a demostrar que realmente nos interesan

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