Problemas mentales en Puerto Rico

Elizabeth Perez Rodríguez

Foro 3

El término de trastornos mentales o emocionales incluye un gran rango de condiciones que afectan substancialmente la capacidad de las personas para manejar las demandas de la vida cotidiana. Esta condición puede ocasionar dificultades de pensamientos, sentimientos y conducta funcional. Sus síntomas interfieren significativamente en el rendimiento académico, la comunicación y en las relaciones personales. Aproximadamente el 16% de los adultos puertorriqueños entre 18 y 64 años cumplieron criterios de trastorno mental leve, moderado o severo. El 23.7% combina alguna condición mental con abuso de drogas y/o alcohol.  Se estima que cuatro de cada diez personas con problemas mentales serios no reciben el tratamiento adecuado.

               ¿Qué son los trastornos emocionales y cómo podemos detectarlos?

Los trastornos emocionales según El Acta para la Educación de Individuos con Discapacidades (IDEA, por sus siglas en inglés) se definen de la siguiente manera.

1. Incapacidad para aprender que no puede explicarse por factores intelectuales, sensoriales o de la salud.
2. Incapacidad para mantener relaciones interpersonales satisfactorias.
3. Sentimientos o comportamientos inapropiados bajo circunstancias normales.
4. Un estado de ánimo constante de infelicidad y depresión.
5. Una tendencia a desarrollar síntomas físicos o temores asociados con problemas personales o escolares.

Esta definición incluye a la esquizofrenia, pero no se aplica a los niños o adolescentes que están socialmente inadaptados, a menos que se determine que tienen un trastorno emocional.

Entre los trastornos emocionales mas comunes que afectan a la sociedad puertorriqueña se encuentran los desórdenes de ansiedad, como ansiedad general, pánico y los trastornos afectivos. Se estima que el 8.8% de los adultos padecen de algún tipo de trastorno afectivo como la distimia, la depresión, los trastornos adaptativos o el trastorno bipolar y el 4.5% (128,540) sufren de depresión mayor.

Los trastornos afectivos o trastornos del estado de ánimo son una forma de depresión, que pueden ser transitorios o permanentes, e incluyen sentimientos de agotamiento e infelicidad.  Estos suelen diferenciarse en dos grupos de trastornos dependiendo de si incluye o no episodios de manía o hipomanía: los trastornos depresivos y los trastornos bipolares. El mas conocido de los trastornos depresivos es el trastorno depresivo mayor, habitualmente conocido como depresión clínica o trastorno unipolar. En el caso de este trastorno los pacientes se muestran mayormente con un aspecto triste, postura decaída y ausencia de expresiones faciales. Usualmente estos pacientes descuidan muchos aspectos de su vida cotidiana como sería la higiene personal, la alimentación e incluso a otros seres queridos.

Algunos otros de los subtipos del trastorno depresivo son: La depresión atípica, caracterizada por un estado de animo reactivo y positivo, aumento de peso, somnolencia y un deterioro social significativo como consecuencia de una hipersensibilidad al rechazo social percibido. La distimia, trastorno similar a la depresión mayor ya que se caracteriza por la presencia del mismo tipo de problemas, pero en un grado menos severo, con una duración mayor. La depresión menor, que se aplica a aquellos casos que cumplen los criterios mínimos de duración para un diagnóstico de depresión mayor pero no están presentes en su totalidad el resto de los síntomas requeridos. La depresión melancólica caracterizada por la pérdida de la capacidad de experimentar placer y la falta de una reacción adecuada a los estímulos, retardo psicomotor, pérdida de peso excesiva o un sentimiento excesivo de culpa. (Entre otras)

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