Psicologia

En este artículo se desarrolla la el concepto de la terapia conversacional en Carl Rogers. La primera fase fue de 1940 a 1950 se caracteriza por creer que la mejor respuesta de un terapeuta consistía en reflejar los sentimientos del cliente y este proceso era “no directivo”. La segunda fase comprende de 1950 a 1957 el cual ahora consiste en un proceso terapéutico centrado en el cliente y la acentuación estaba en la congruencia y autenticidad del comportamiento del terapeuta. Y por último la tercera fase que va desde 1957 hasta la actualidad la cual se orienta más hacia un encuentro entre seres humanos y el terapeuta acepta la relación y muestra también algunos sentimientos, y ahora es un proceso centrado en la persona y al terapeuta se ve como facilitador.

En este proceso se menciona que la terapia, es decir la posibilidad de cambiar la personalidad humana durante el proceso terapéutico siempre fue el punto central de Rogers. Y que sus conceptos de le organismo al cual se le asigna la capacidad de valorar experiencias, impresiones y estímulos, además de que este valora un suceso como positivo, si se refuerza la tendencia a la actualización. Donde la actualización se entiende como una aspiración en dirección a las metas (salud, satisfacción de necesidades, desarrollo corporal y espiritual, etc.). Y como suceso negativo, si la contradice esta tendencia.

Por lo que el hombre debe de atravesar un camino lleno de máscaras de defensa antes de descubrir al extraño que ha vivido tras ellas, ósea, él mismo. Entonces una persona que sigue este proceso, desarrolla confianza en su propio organismo, que hace valoraciones a partir de sí mismo, el cual ve su vida como un proceso que fluye, que descubre constantemente nuevos aspectos de su ver en la corriente de su expresión.

El otro concepto importante es el sí mismo, el cual Rogers considera que es un marco de referencia individual, que solo conoce el propio individuo. Además de que la coincidencia es un término importante y que esta se puede dar por 3 caminos distintos: entre el sí mismo, tal como lo percibe el individuo, entre la realidad subjetiva de este y la realidad del mundo de fuera y entre el sí mismo y un sí mismo deseado.

Retomando algunos conceptos sobre el comportamiento terapéutico fundamental dentro de la psicoterapia conversacional esta la congruencia, la que se entiende como coincidencia con uno mismo. Y se favorece un desarrollo personal en tanto el terapeuta viva lo que es en realidad, autentico y sin fachadas, vive abiertamente las sensaciones y posturas que le mueven en ese instante. Además de que cuanto mayor sea la capacidad del terapeuta para tener en cuenta de forma receptiva lo que suceden el mismo y cuanto mejor logre ser sin miedo aquello que resulta de la diversidad de su sentimientos, mayor será la coincidencia consigo mismo.

Que importante me parece este punto, la congruencia, es un punto

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