Psicologia

“HERRAMIENTAS Y ESTRATEGIAS PARA ABORDAR EL APEGO AFECTIVO DE LOS NIÑOS EN EL PROCESO DE ADAPTACION PREESCOLAR EN EDADES COMPRENDIDAS ENTRE 3 Y 5 AÑOS”

Hay una creencia extendida de que ciertas conductas infantiles son propias de la edad y que con el tiempo tienden a desaparecer, ciertamente así puede suceder en muchos casos. Sin embargo, es muy arriesgado pasar por alto ciertos comportamientos con la esperanza de que el tiempo lo mejorara. Una intervención en la etapa infantil, hecha a tiempo, puede evitar la consolidación, profundización y agravamiento del problema en la adolescencia. Las normas y los valores, así como toda experiencia emocionalmente significativa y con fines adaptativos deben construirse desde la temprana infancia, ya que dicha información es codificada en el cerebro para la construcción de la historia personal y la configuración de la personalidad.

En este sentido, resulta útil y de gran ayuda proporcionar a padres, representantes, cuidadores, educadores y público en general, la orientación e información necesaria referente al vínculo o apego afectivo y su incidencia en los procesos de adaptación en niños de edad preescolar, así como estrategias y herramientas adecuadas para abordarlas.

En el campo del desarrollo infantil, EL APEGO se refiere a un vínculo específico y especial que se forma entre madre-infante o cuidador primario-infante. Dicha relación ofrece la base funcional para todas las relaciones subsecuentes que el niño desarrollara en su vida. El vínculo de apego conlleva a una relación perdurable con una persona en específico; dicha relación produce seguridad, sosiego, consuelo, agrado y placer; la amenaza de pérdida de la persona o pérdida de la misma evoca una intensa ansiedad en el infante.

Las distintas formas de apego afectivo se desarrollan en forma temprana y poseen alta probabilidad de mantenerse durante toda la vida así como las situaciones familiares que lo promueven.

Según observaciones realizadas en preescolares con niños en edades comprendidas de entre tres y cinco años, se constato la recurrente presencia de conductas de APEGO AFECTIVO SEGURO. Este tipo de apego se caracteriza por ser un patrón óptimo de apego, el cual se produce gracias a la sensibilidad materna, la percepción adecuada, la interpretación correcta y la respuesta contingente y apropiada a las señales del niño.

Los niños que presentan conductas propias de apego seguro, tienen cuidadores sensibles a sus necesidades, por lo que son capaces de acudir a ellos como una base de seguridad cuando se sienten angustiados. Estos niños tienden a ser más cálidos, más estables emocionalmente, positivos, integrados y con percepciones coherentes de sí mismos.

Por consiguiente, un buen vínculo afectivo materno, produce en el niño seguridad, condición ésta que le permitirá un sano desarrollo intelectual-afectivo

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