Sigmund Freud

Sigmund Freud

Sigmundo Freud (1856 – 1939), Médico vienés, que nace el 6 de Mayo en Freiberg - Moravia, en el seno de una familia Judía, que en ese entonces era provincia del norte del Imperio Austro – Húngaro, actualmente parte de la República Checa. Fue el mayor de ocho hermanos. Su Padre fue comerciante de lana pobre por lo que al fracasar en sus negocios se muda con toda su familia a Leipzig y luego a Viena; por ese tiempo Sigmund tenía cuatro años, quien al demostrar su precoz genialidad, su familia le concede situaciones de privilegio frente a todos sus demás hermanos como: tener mejor luz para leer de noche y que al estudiar nadie debía interrumpirlo, ni hacerle ruidos.

Fue por su origen Judío, que no le permitieron aprovechar ciertas oportunidades educativas, sobre todo una carrera académica en la investigación universitaria; ya que sólo la medicina y la abogacía eran áreas posibles de estudio para los judíos vieneses. El año 1873 ingresó a la Universidad de Viena (a los 17 años), que por tener un interés en el estudio muy variado o disperso; la formación en medicina que era de seis años la termina en ocho años, recibiendo su título de médico el año 1881. Posteriormente en Viena toma unos cursos con Franz Brentano, así, se introduce ya formalmente en la Psicología del siglo XIX.

El impacto de Freud en la psicología del siglo XX fue grande, contribuyó para que la psiquiatría se reconociera como la rama de la medicina que se ocupaba de las psicopatologías. Progresivamente fueron apareciendo técnicas válidas para el tratamiento de anormalidades mentales y de conducta. Una de las más productivas fue el uso de la hipnosis, que encabezó el médico francés Jean Martín Charcot (1825 – 1893), famoso en toda Europa, con quien Freud se puso en contacto y al recibir una beca el año 1885, le permitió ir a París para estudiar con Charcot durante cuatro meses y medio para aprender hipnosis y sus teorías acerca de la importancia de los problemas sexuales no resueltos en la etiología de la histeria. Así, tanto Freud como otros médicos y fisiólogos se formaron con Charcot, quien atendía pacientes histéricos con síntomas desde la hiperemocionalidad hasta las manifestaciones físicas de perturbaciones emocionales con el hipnotismo. Otro médico: Hippolyte Bernheim (1837 – 1919), establece un sofisticado análisis hipnótico como forma de tratamiento para problemas psicológicos. También encontramos al destacado Pierre Janet (1859 – 1947), quien fue estudiante de Charcot, y utilizó el hipnotismo para resolver las fuerzas de los conflictos emocionales, que para él eran importantes en la expresión de los síntomas histéricos. Freud, también utilizó las técnicas hipnóticas aprendidas con Charcot, al volver a Viena e iniciar su trabajo psicoterapéutico, al mismo tiempo que presenta sus experiencias realizadas con Charcot a la “Sociedad Médica de Viena”, quien la recepciona con gran frialdad e indiferencia, lo cual genera un gran resentimiento en Freud que afecta su relación con éste “mundo médico cerrado”.

En su residentado, Freud atendió pacientes con problemas anatómicos y orgánicos del sistema nervioso; se hizo amigo de Josef Breuer (1842 – 1925), quien fue un médico famoso por sus investigaciones en la respiración, y empezaron a trabajar con pacientes afectados con trastornos nerviosos; siendo el de mayor importancia el “caso de Anna O.”, era una joven inteligente con síntomas histéricos graves y difusos. Breuer se dio cuenta que ciertas experiencias eran expresadas sólo en estado hipnótico y que en estado consiente no recordaba; además de que sus síntomas se aliviaban luego de hablar de ellos en la sesión hipnótica. Breuer atendió este caso alrededor de un año, llegando a la convicción de que “la cura por el habla”, la catarsis, consistente en la revisión de recuerdos desagradables a través de la hipnosis era eficaz para minimizar sus síntomas. Breuer no pudo continuar con este caso por celos de su esposa , razón por la cual Breuer suspende el tratamiento de este caso.

Freud continuó trabajando con Breuer con la hipnosis y la catarsis, abandonando posteriormente la hipnosis y quedándose para trabajar con la catarsis; según Freud por las siguientes razones: Porque no todos los sujetos son susceptibles a ser hipnotizados, entonces es sólo para ciertos grupos, porque algunos de sus pacientes se negaban a creer lo que les revelaba al despertar; concluyendo en que los pacientes tenían que saber del proceso de descubrir recuerdos ocultos de la conciencia. Porque al aliviar con hipnosis un conjunto de síntomas, después aparecían otros. Además, de admitir que la naturaleza de la sexual idad se relaciona con las emociones de las situaciones olvidadas, es que se distancia de Breuer. Sin embargo, el año 1895 publicaron la obra: “Estudios sobre la histeria”, obra que se cita como la primera del movimiento psicoanalista, la misma que durante 13 años sólo lograron vender 626 ejemplares.

Freud hacía terapia

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