ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

Sueño "la Inyección De Irma"


Enviado por   •  28 de Abril de 2015  •  1.351 Palabras (6 Páginas)  •  258 Visitas

Página 1 de 6

SUEÑO “LA INYECCIÓN DE IRMA”

El sueño de la inyección de Irma es un sueño que tuvo Freud del 23 al 24 de julio 1895 y que él mismo consideró como el sueño con el que se le reveló el "secreto del sueño".

El sueño como se presenta en Freud y su auto-análisis

Prehistoria

Freud nos cuenta que en el verano de 1895 tenía una paciente que él llama Irma (hoy sabemos que era Emma Eckstein (1865-1924), una mujer de una prominente familia socialista de Vienna que era muy activa en el movimiento de la liberación de las mujeres y después se hizo psicoanalista) y cuya cura ha sido terminada solamente con un éxito parcial. Un día, Freud tiene la visita de su amigo/colega Otto, también médico, que dice: "Irma está mejor, pero no completamente curada.". Freud se enfada por este comentario, porque piensa oír un reproche por lo cual, por la noche, se sienta para escribir la historia del análisis de Irma para dársela al doctor M. (Breuer), un amigo común, como para justificarse.

El sueño

Un gran vestíbulo - muchos invitados, a quienes nosotros recibimos. - Entre ellos Irma, a quien enseguida llevo aparte como para responder a su carta, y para reprocharle que todavía no acepte la "solución". Le digo: "Si todavía tienes dolores, es realmente por tu exclusiva culpa." - Ella responde: "Si supieses los dolores que tengo ahora en el cuello, el estómago y el vientre; me siento oprimida."- Yo me aterro y la miro. Ella se ve pálida y abotagada; pienso que después de todo he descuidado sin duda algo orgánico. La llevo hasta la ventana y reviso el interior de su garganta. Se muestra un poco renuente, como las mujeres que llevan dentadura postiza. Pienso entre mí que en modo alguno tiene necesidad de ello. - Después la boca se abre bien, y hallo a la derecha una gran mancha blanca, y en otras partes veo extrañas formaciones rugosas, que manifiestamente están modeladas como los cornetes nasales, extensas escaras blanco-grisáceas. - Aprisa llamo al doctor M., quien repite el examen y lo confirma...El doctor M. se ve enteramente distinto que de ordinario; está muy pálido, cojea, está sin barba en el mentón... Ahora también está de pie junto a ella mi amigo Otto, y mi amigo Leopold la percute a través del corsé y dice: "Tiene una matidez abajo a la izquierda", y también señala una parte de la piel infiltrada en el hombro izquierdo (lo que yo siento como él, a pesar del vestido)... M. dice: "No hay duda, es una infección, pero no es nada; sobrevendrá todavía una disentería y se eliminará el veneno"... Inmediatamente nosotros sabemos de dónde viene la infección. No hace mucho mi amigo Otto, en una ocasión en que ella se sentía mal, le dio una inyección con un preparado de propilo, propiteno...ácido propiónico...trimetilamina (cuya fórmula veo ante mí escrita con caracteres gruesos)... No se dan esas inyecciones tan a la ligera... Es probable también que la jeringa no estuviera limpia.

El análisis del sueño

Freud dice que con este sueño queda claro con qué eventos del día se relaciona, pero nadie que conoce la prehistoria y el contenido del sueño puede sospechar qué significa el sueño. Freud mismo tampoco lo sabe. Se asombra con los síntomas de los cuales se queja Irma en el sueño, ya que no son los mismos que tenía durante la cura. También la idea sin sentido de la inyección con un preparado de ácido propiónico le parece absurda a Freud. Por todo eso, se pone a analizar el sueño detalladamente:

Reprocho a Irma no haber aceptado la "solución". Digo: "Si todavía tienes dolores, es tu culpa."

Freud sospecha que la intención del sueño aquí puede ser que sí sea la culpa de Irma, y no culpa suya que la paciente aún tiene dolores.

La palabra "solución" lleva las connotaciones de "solución de un líquido" y "solución de un problema".

Me asusto con la idea que haya omitido una afección orgánica.

Otra vez lo interpreta así que de verdad quiere liberarse del reproche del fracaso que le hizo Otto: Si los dolores de Irma tienen una causa

...

Descargar como (para miembros actualizados) txt (8 Kb)
Leer 5 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com