TRASTORNOS DEL COMPORTAMIENTO (Niños hiperactivos).
Enviado por juliobatman • 10 de Noviembre de 2012 • Ensayo • 499 Palabras (2 Páginas) • 454 Visitas
TRASTORNOS DEL COMPORTAMIENTO (Niños hiperactivos).
En 1994 se menciona por primera vez el TDAH en el famoso Manual Estadístico y de Diagnóstico (llamado DSM IV), de la Asociación Americana de Psiquiatría. Hasta entonces se hablaba del « síndrome del niño hiperactivo». En este manual se establecen los cinco criterios que caracterizan este trastorno, aunque no tienen por qué aparecer siempre todos a la vez.
• El niño presenta dificultades para mantener la atención o se muestra hiperactivo e impulsivo con frecuencia. Estas conductas persisten más de seis meses seguidos y no son coherentes con su nivel de desarrollo.
• Los síntomas aparecen antes de los siete años.
• Los síntomas se manifiestan en dos o más ambientes (el colegio, el hogar, con los amigos, etc.).
• Los síntomas tienen un efecto negativo en sus relaciones personales y rendimiento escolar o deportivo.
Cómo es un niño con TDAH
Los padres de un niño "inquieto" viven en alerta permanente. Nunca saben cuándo la armonía dará lugar al caos. Eso hace que los padres estén expectantes y nerviosos, lo que genera tensión en el niño. ¿Qué tienen en común los pequeños hiperactivos?
• No se concentran en ninguna tarea, pasan de una cosa a otra. Los padres dicen "están en todo y no están en nada". Suelen ser muy despiertos y muchos obtienen muy buenos resultados en los test que miden el coeficiente intelectual.
• No pueden estar quietos ni un momento. Si el niño está sentado, se mueve constantemente en la silla, cambia de postura, lo toca todo y las cosas se le caen, canturrea o sigue un ritmo golpeando objetos. Y si no se le permite moverse y él lo logra con gran esfuerzo, se siente nervioso.
• Actúan sin pensar en las consecuencias. Les resulta imposible inhibir o atemperar sus reacciones. Actúan de forma inmediata, sin pensar ni detenerse en las consecuencias. Son capaces de arrojar contra el suelo el play station, se desgarran la ropa, rompen lo que tienen a mano. Es muy complicado contenerlos. Los padres hacen un gran esfuerzo por evitar estas reacciones (la consigna es que el niño no se enoje), con lo cual demuestran al hijo que ellos son tan impotentes como él para calmarlo. Y esta incapacidad angustia aún más al niño.
• Altera la convivencia escolar. Porque en una clase, lo primero es la convivencia. Un niño que no puede permanecer sentado, que interrumpe, insulta o trata despectivamente al maestro, que molesta... rápidamente se convierte en un desclasado. No se integra en la clase y ocupa un lugar marginal, no respeta las normas de conducta que rigen a todos.
• Le mortifica el rechazo de otros niños. Es muy importante que los padres formen equipo con el maestro para integrar al niño en la vida escolar, que entre todos traten de evitar que sea «el que se porta mal» o, por lo menos, que también
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