Azufre Y Sal
Enviado por ivanacatellez • 15 de Enero de 2013 • 751 Palabras (4 Páginas) • 596 Visitas
Capítulo: I
Encuentro Divino
Conduzco a casa con precaución; después de todo muchas cosas pueden matarme. He tenido muchos accidentes en toda mi existencia. Una vez me caí de un caballo, me quede en el hospital como un año. Mi segundo accidente ocurrió cuando trabajaba en el negocio de la construcción: el andamio cayó desde un quinto piso y nuevamente dos años en el hospital. La gente dijo que que desgracia. Los humanos constantemente atribuyen a un rito cuando si lo pueden explicar; a mí todo eso me causa tristeza. No enciendo un cigarrillo lo que cualquier adolecente haría. (Porque eso puede matarme)y me sirvo un vaso de agua, me gusta el agua aunque no es mi favorita. Una o dos copas al día podrían ser nocivas para la salud, espero que no, aunque eso me importa mucho: no puedo hacer nada de lo quiero porque a todo le doy importancia. Es más voy hacer los deberes. Tengo muchas ganas de hacer el análisis literario de DORIAN GRAY, aunque OSCAR WILDE no me cae muy bien. Es uno de los escritores que más odio. Me paro a leer el diario la internacional habla de la paz en Bagdad; la nacional habla de las fuertes sequias tras fueres insolaciones y de la solidaridad entre los carteles de la droga; la deportiva, la felicitación de un jugador por haberse liado a besos y abrazos en un importante partido y la de espectáculos, de lo bien que le salió la cirugía estética a la que se sometió una famosa cantante. El pecado (o las consecuencias de él) en toda la extensión de la palabra. Pronto me des aburro del diario y recuerdo que mi emparedado está en el horno. Regreso a la cocina lo saco y lo tiro a la basura por que se quemó, me paro frente a la barra de la cocina . Pronto amanece y me preparo para ir a la escuela tengo que verme horrible solo por ser el segundo día. Salgo de la alcoba y me dirijo al baño despeino mi cabello y no le pongo nada para que luzca feo . Me dirijo a la escuela y me subo a mi horrible Volkswagen y como no me gusta la velocidad me tarde como dos horas en llegar a la escuela. Es una escuela privada pero a ella asiste sola una clase de chicos sociales. Ingreso al edificio haciendo uso de la poca autoestima que tengo y camino un poco jorobado como tal vez lo haría una mujer, los brazos un poco entumidos y la espalda muy reclinada hacia enfrente. Todos me saludan lo cual me preocupa mucho, es el segundo día ya iré consiguiendo más adeptos. Distingo a Ángela parada frente a una mesa de la más avanzada tecnología intentando convencer a un par de chicos de unirse a la sociedad protectora de animales. Los animales me importan mucho son criaturas hermosas y no tienen que sufrir por sus actos. Pero a pesar de todo no los quiero y quiero ganarme a Ángela de manera que me acerco y tomo un tríptico con información: focas que son cazadas como deporte en Canadá, ratas que son usadas para experimentar
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