Criando Niños

Criando Niños en La Familia Cristiana

Sal 127:3: Los hijos son una herencia del SEÑOR, los frutos del vientre son una recompensa. NVI

Jesús ama a los niños, y da una severa advertencia:

Mt 19:14: Dejen que los niños vengan a mí, y no se lo impidan, porque el reino de los cielos es de quienes son como ellos.

Cuando Dios llamó al arrepentimiento a su pueblo, invitó también a su congregación a los pequeños y aun a los niños de pecho.

Jl 2:16: Congreguen al pueblo, purifiquen la asamblea; junten a los ancianos del pueblo, reúnan a los pequeños y a los niños de pecho. Que salga de su alcoba el recién casado, y la recién casada de su cámara nupcial.

1. Los Padres deben hacer todo lo que está en su poder para criar a sus hijos en tal manera que ellos “vengan al Señor” muy temprano en su vida y permanezcan con el Señor. Y …

2. Para no “impedírselos a ellos” nosotros debemos criar y entrenar nuestros hijos de acuerdo a las instrucciones del Señor como se encuentran en Su Palabra, la Biblia.

Este mandato es para todos los hombres, sean padres o no. La responsabilidad que tenemos es llevar a los niños a los pies del Señor.

¿Entonces por qué tantos problemas de crianza de los hijos?

- Porque los padres rechazan obedecer la Palabra de Dios.

Los padres han entregado su vida al Señor, pero no dejan que Cristo transforme su vida y la vida de su familia. Tratan a su pareja y a sus hijos “como a él lo criaron”. Así los pecados y los malos comportamientos pasan de una generación a la otra. El ambiente en estos hogares de parejas cristianas es el mismo que el de hogares no cristianos. (Irresponsabilidad de papás en involucrarse en la educación de los hijos y dejarlo todo a la mamá)

Prv 22:6: “Instruye al niño en su camino, y aún cuando fuere viejo, no se apartará de él”.

"Instruye al niño en su camino" es literalmente: "de acuerdo a su [el del niño] camino". Es natural que queramos criar a cada hijo o prepararlo de manera similar a la nuestra. Pero el mandato del Señor en este versículo denota que los padres deberían discernir los puntos fuertes especiales e individuales que Dios le ha dado a cada uno de los niños. Cada niño tiene una inclinación natural que los padres pueden y deben ayudar a desarrollar.

Muchos padres quieren tomar todas las decisiones por sus hijos, pero esto los daña a la larga. Cuando los padres enseñan a sus hijos a tomar decisiones, no tienen que cuidar cada paso que estos den. Los padres saben que si le enseñan correctamente, ellos permanecerán en el buen camino porque han aprendido escoger lo correcto. Por eso prepare a sus hijos para que escojan el camino correcto.

Ef 6:4: Y ustedes, padres, no hagan enojar a sus hijos, sino críenlos según la disciplina e instrucción del Señor.

OJO: Según la disciplina y la instrucción del Señor.

La primera parte de este texto, tiene que ver, con que los padres en su trato con los hijos deben cuidarse de ser ásperos y rígidos al grado que hagan que los hijos se enojen o llenen de ira (amargura) de modo que ellos sean la causa de que se alejen del Señor. Los padres no deben conducirse despóticamente con sus hijos y descargar sobre ellos sus frustraciones y hostilidades. Un trato que sea inconsistente y cruel de parte del padre confunde a los hijos, causa problemas emocionales y despierta resentimiento. Trae consecuencias lamentables, especialmente para la unidad de la familia y aun de la iglesia. Uno de los problemas más graves de nuestra época es el del abuso físico y emocional de los niños de parte de los padres.

La segunda parte del texto demanda de los padres la crianza de los hijos en la disciplina y la instrucción del Señor. Esto tiene que ver más con la enseñanza verbal y practico. Que mejor formación es lo que un padre puede dar al hijo hablando y haciendo él mismo primero, y no tanto el castigo. El padre cristiano como cabeza y guía espiritual de la familia debe instruir a su hijo cristiano en las cosas del Señor y en su Palabra, siendo guiado por el contenido de la fe mutua que abrazan y por el mismo Espíritu que los guía. Debe actuar en amor, tratando a sus hijos como Cristo trató a las personas que amó. Esto es vital en el desarrollo de los hijos y en el concepto que tengan del Señor.

- Porque los padres mezclan sus tradiciones con la sabiduría de Dios.

Esencialmente criamos a nuestros hijos como nos criaron a nosotros con algunas pequeñas adaptaciones bíblicas. Usamos versículos para criar a nuestra manera. Existirán serias inconsistencias. Los hijos notarán y rechazarán la hipocresía.

- Porque los padres aplican los principios bíblicos sin ser ellos espirituales.

La pareja sigue mecánicamente las enseñanzas de la Biblia pero sin el calor de la presencia de Cristo. Esto genera un ambiente rígido y legalista: Es decir, conozco la palabra de Dios pero no lo aplico en mí mismo, pero si lo aplico a mi esposa y a mis hijos.

Todo padre de familia, con humildad debe de reconocer su dependencia del Señor: Es decir todos tenemos que renunciar a nuestros gustos y a nuestra manera de hacer las cosas, y disponernos seriamente a adoptar y practicar los principios bíblicos en la crianza de nuestros hijos.

Esta es una GRAN RESPONSABILIDAD, y por lo tanto:

I. Padres deben tomar la GUIANZA y RESPONSABILIDAD para ENSEÑAR y ENTRENAR a sus hijos.

El correcto y apropiado orden para el hogar es: El padre es la cabeza de la familia (Ef. 5:23 el marido es cabeza de la esposa, como Cristo es la cabeza de la iglesia) y por lo tanto el Señor sostiene la responsabilidad del padre para ser un buen líder, maestro y ejemplo para su esposa e hijos.

• Como lo muestra el versículo anterior, el padre ya sea que provoca o el instruye y disciplina. La familia podrá prosperar o sufrir por sus elecciones.

• El padre puede delegar algunas responsabilidades de enseñanza a su esposa. Hay algunas cosas que ella puede ensenar mucho mejor. Ellos son un equipo.

• Padre y Madre deben discutir y llegar a un acuerdo en que enseñar y como debe de enseñarse. Ellos deben buscar en las Escrituras y orar juntos para encontrar las respuestas y llegar a un acuerdo.

Proverbios 22:6 Instruye al niño en el camino en que debe andar, y aun cuando sea viejo no se apartara de él.

• Un niño hijo es entrenado por lo que él ve y experimenta de su padre y madre y su reacción del uno al otro y

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