El Perdón 1

Capítulo 3

EL PERDÓN I

El mundo espiritual y celestial funciona así: si tienes pecado, Dios no tiene trato contigo, no hay una relación con Dios, porque sólo se relaciona con quien tien perfección o justicia. El mundo espiritual es un mundo legal.

Hace muchos años en algunos países, para que una persona llegara a ser abogado, tenía que estudiar el libro de Romanos, el cual es argumento de cómo Dios toma a alguien que es pecador o sucio, que está separado de Dios y lo legaliza.

El primer aspecto que debemos captar es que Dios sólo trata con gente que no tiene pecado. Romanos 3:23 “todos han pecado y están destituidos de la gloria de Dios”. Su plan era que el ser humano tuviera una vida gloriosa, impactante, abundante; este era el plan de Dios desde el principio, pero lo que impidió, desvió y causó que no sucediera esto fue el pecado; todos han pecado y por consecuencia están separados de Dios, no tienen una relación, ni tampoco trato con Él.

Sólo hay dos manera para que alguien sea limpio y santo (santo es alguien que no ha pecado). La primer manera para que alguien pueda ser santo es: que nunca peque; no hay nadie que no haya pecado, y la única manera de quitar el pecado y restablecer la relación con Dios es a través del perdón.

La palabra perdón quiere decir: soltar de, si alguien ha sido perdonado quiere decir que ha sido soltado de algo. Por ejemplo, si alguien me arremete y yo lo perdono, lo suelto de sus acciones hacia mí y de las consecuencias de sus actos que serían que yo estuviera molesto con esa persona y la tratara diferente, Entonces, perdonado quiere decir soltar de, el evento y de las consecuencias, Esto llega a ser algo sumamente importante porque sabemos que la vida está fincada sobre principios de causa y efecto; la Biblia dice: el alma que peca debe morir.

El universo y la vida están construidos de tal manera que cuando pecamos hay consecuencias eternas.

Dios es justo. Una de las grandes misericordias del mundo antiguo fue los Diez Mandamientos. Dios fue misericordioso en este sentido: porque si peleabas con alguien y perdía un diente, la persona te mataba por ser rencoroso o macho, ¡te mataba!. Cuando vino la ley de Dios, fue algo misericordioso en el sentido de que el castigo era conforme al hecho. Hubo entonces, una balanza en los juicios; en cambio, hoy en el mundo árabe si robas te cortan la manos, es una castigo drástico, no es una ley justa, robar algo no debe tener una consecuencia tan drástica. Dios, al dar la ley, tuvo misericordia del mundo, porque los castigos fueron conforme a los hechos.

Es así como podemos entender algunas cosas acerca de Dios, nosotros y el universo. Cuando Dios comienza a hablar de pecado dice: “el pecado tiene consecuencia eternas”.

Nosotros fuimos hechos a la imagen de Dios, tuvimos atributos similares a los atributos de Dios, todavía tenemos residuos de esos atributos en nuestras vidas, todavía somos seres eternos. Nos ha sido dad la capacidad de crear vida de nada, nuestros hijos no existían anteriormente, pero ahora sí y no cesarán de existir, estarán en el cielo eternamente o estarán en el infierno, pero existirán siempre.

De repente nuestros hechos tienen grandes consecuencias y si pecamos las consecuencias son eternas, si hemos roto una ley eterna, tiene consecuencias eternas ¿cómo debe ser el castigo? Eterno, porque lo que hemos hecho tiene consecuencias eternas.

El mundo espiritual y natural son mundos legales, por eso cuando alguien muere sin Cristo es sumamente terrible, porque la consecuencia eterna o su castigo es eterno. El perdón llega a ser algo importantísimo, porque las consecuencias de no recibirlo son tremendas: la primer consecuencia es el infierno o separación eterna de Dios. Esto significa que si alguien escoge no recibir a Dios estará alejado de Él para siempre.

¿Cuáles son las implicaciones de estar separado de Dios eternamente? Todo lo opuesto de Dios lo compone el infierno. Dios es amor, el infierno es odio y temor; Dios nos da vida eterna, fuerza, seguridad, salud, consolación, luz y recompensa, el infierno es inseguridad eterna, debilidad, temor, enfermedad, soledad, oscuridad y tormento eterno. El infierno será un lugar lleno de odio, la soledad será tan densa en el infierno que se estará verdaderamente solo para siempre.

Todo lo que sucede, desde el nacimiento hasta la muerte, desde la perspectiva de Dios tiene la prioridad de prepararnos para la eternidad. Por ejemplo si quieres levantar un negocio, está bien Dos te respaldará, pero no lo hará si el negocio tendrá prioridad sobre la eternidad; es mejor que quiebres y vivas pobre y estés listo para la eternidad.

Si hemos tenido pecado en nuestra vida la única alternativa que nos queda es que Dios perdone nuestros pecados.

Culpa

Los psicólogos manejan el principio de transferencia de culpa. Cuando se peca existe una consecuencia eterna pero también hay consecuencias en esta vida; por ejemplo, una de las consecuencias del pecado es la culpa, esta llega a través del tiempo. Generalmente, la culpa que no es frenada tendrá una de dos salidas:

• Violencia hacia sí mismo o suicidio.

• Violencia hacia otros.

Las consecuencias de la culpa son sumamente importante para el área de la autoestima; si alguien no puede sentirse bien consigo mismo comienza a inventar cosas para poder hacerlo. Puede ser que invente una nueva manera de vestirse u otros nuevos arreglos, pero si no puede hallar una nueva manera de sentirse bien y aceptarse a sí mismo comienza forzosamente a tener pensamientos autodestructivos. Las consecuencias de la culpa son tan fuertes que de ser posible las evitaríamos.

La misión del psicólogo al tratar pacientes es la de transferir su culpa a otro, él escuchará toda la situación y buscará transmitir la culpa a otra persona; por ejemplo dirá: “este no es su problema, porque durante su niñez su mamá no le limpio bien el pañal y por eso quedo afectado...” y el paciente dirá: “es cierto, mis papás hicieron eso” y comenzarán a transmitir la culpa a otra persona, lo más sorprendente es que se siente mejor, ¡funciona! Lo que la gente no sabe es que esto no funciona sólo provisionalmente.

De ahí que podemos concluir que “los principios del mundo funcionan, pero sólo provisionalmente.

Volvamos al ejemplo anterior, la persona que se sentía bien al culpar a otros por sus problemas comienza a sentirse tan culpable como se sentía anteriormente, pero ahora se siente peor

...