GUERRA ESPIRITUAL

Cuando vamos caminando en la vida de Cristo, nuestra vida comienza a transformarse y nuestras situaciones comienzan a mejorar de manera sorprendente, sin embargo, con el paso del tiempo caemos en un letargo espiritual y poco a poco comenzamos a bajar la guardia y le abrimos de nuevo la puerta al enemigo; pero lo que no sabemos es que cuando el diablo comienza a perder la batalla, como león rugiente, anda alrededor buscando a quien devorar (1 Pedro 5:8), y comienza a sembrar en nosotros tentaciones para recuperar el terreno perdido (Romanos 1:29), pero por si fuera poco no viene solo, sino que se arma con un ejército de 7 espíritus más para asegurarse de salir victorioso.

Por eso debemos crear un blindaje espiritual, debemos contar con armas poderosas para derribarlo, y nuestra principal arma es la oración, creando una guerra espiritual, y por supuesto, cubriéndonos con la Sangre de Cristo (Apocalipsis 12:11) creando un cerco espiritual de protección.

La lucha no es contra sangre y carne, sino contra principados, (espíritus que habitan en nuestras casas, tales como de ruina, violencia intrafamiliar, infidelidad, pobreza, etc.), contra potestades (espíritus que habitan en las personas, como la amargura, homosexualidad, enfermedades, mentira, alcoholismo, engaño, rebeldía, drogadicción, etc.), contra gobernadores (espíritus que habitan en la ciudad, como de muerte, delincuencia, violencia, narcotráfico, etc.) y contra huestes (son los espíritus que habitan en un país, como la idolatría, violencia, narcotráfico, avaricia, corrupción, robo, etc. ) espirituales de maldad en regiones celestes. (Efesios 6:12).

Como los demonios pueden oprimir a una persona:

Cuando desobedecemos las leyes de Dios. Debemos vivir en la palabra de Dios, haciendo su voluntad y cumpliendo sus mandamientos y leyes.

Cuanto tengo emociones negativas por largo tiempo. Tales como falta de perdón, culpa, temor, ira, cólera, amargura, codicia, autocompasión, odio, celos o cualquier otra actitud equivocada. Si permites que esas emociones negativas persistan, pueden ocasionar padecimientos y enfermedades.

Participar en cualquier práctica ocultista. La Biblia nos habla claro de éste tema, no importa cuán inofensivas parezcan, tales como astrología, sesiones espiritistas, numerología, horóscopos, hipnotismo, proyección astral, yoga, tarot, meditación trascendental, etc.

Durante periodos de tragedia o trauma. La muerte de un ser querido, por ejemplo puede abrir el camino para que espíritus de temor, dolor, amargura, ansiedad o rechazo te controlen.

En momentos de gran desilusión. Cualquier evento que nos cause una desilusión.

El endurecer el corazón contra Dios. Al momento de endurecernos a las cosas del Señor, nos exponemos a que el diablo tenga un asidero en nosotros.

Heredar una atadura espiritual. Lo que la Biblia denomina “la maldad de los padres sobre los hijos hasta la tercera y cuarta generación” (Exodo 20:5). Puedes heredar esclavitud de tus generaciones así como heredas el color de los ojos.

La Armadura de Dios

Si yo sigo cayendo en pecado, estoy levantando infracciones en mi contra y le estoy dando argumentos y altivez al diablo para que intente ganar la guerra y para ello enviara sus dardos de fuego, por eso debo vestir la armadura de Dios y traerla

...