Josué; Un Lider Acertado

En el análisis que hemos tenido por los pasados meses hemos ido conociendo la historia del pueblo de Israel desde la salida de Egipto en el 1513 a E.C. y los cuarenta años que estuvieron vagando por el desierto.

Esto nos lleva al 1473 a.E.C. Los israelitas, están listos para entrar en Canaán, la Tierra Prometida. Ese territorio al otro lado del Jordán está habitado por numerosos reinos pequeños, y cada uno tiene su propio ejército particular.

Para la nación de Israel significa que tienen que tomar las muchas ciudades amuralladas y fortificadas, como Jericó, Hai, Hazor y Lakís, para poder sojuzgar esa tierra. Les espera un tiempo crítico. Tienen que pelear y ganar batallas decisivas, en las que Jehová mismo va a intervenir con milagros poderosos en favor de su pueblo a fin de cumplir su promesa de establecerlos en esa tierra.

Indudablemente alguien tendrá que llevar un registro de estos sucesos excitantes, tan sobresalientes en los tratos de Jehová con su pueblo, y esto lo haría un testigo ocular. ¡Quién podría hacer esto mejor que Josué mismo, aquel nombrado por Jehová como sucesor de Moisés!

Recordemos que Moisés acaba de morir y se elige a Josué, tanto para caudillo como para poner por escrito los sucesos que estaban por tener lugar.

¿Cómo ha sido esta elección? Acertada.

1. Él ha sido un compañero muy allegado de Moisés durante los 40 años anteriores en el desierto.

2. Ha sido “el ministro de Moisés desde su mocedad en adelante”, lo que indica que está capacitado como caudillo espiritual y militar. (Jos. 1:1.)

3. En el año que Israel salió de Egipto, 1513 a.E.C., él fue capitán de los ejércitos de Israel en la derrota de los amalequitas. (Éxo. 17:9-14.)

4. Fue la elección para representar a la tribu de Efraín cuando se escogió a un hombre de cada tribu para la peligrosa misión de espiar Canaán. Su valor y fidelidad en aquella ocasión le aseguró la entrada en la Tierra Prometida.

Como recompensa Jehová a sus siervos; y nosotros; cómo nos sentimos cuando Jehová nos utiliza en diversos privilegios; gracias a nuestro historial. Por eso nos anima este relato de Josué.

“un hombre en quien hay espíritu”, un hombre que ha “seguido a Jehová íntegramente”, un hombre “lleno del espíritu de sabiduría”. No es de extrañar que ‘Israel siguiera sirviendo a Jehová todos los días de Josué’. (Jos. 24:31.)

No debemos tener ninguna duda de este libro y su escritor.

Las Escrituras Griegas Cristianas lo mencionan por nombre.

Es lógico que tal como se utilizó a Moisés para escribir sobre los sucesos que tuvieron lugar durante su vida, también se utilizara a su sucesor, Josué, para escribir sobre los sucesos que él mismo presenció.

La tradición judía reconoce a Josué como el escritor, y el libro mismo declara: “Entonces Josué

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