La Comunidad Juvenil

EL GRUPO O LA COMUNIDAD JUVENIL

La Comunidad Juvenil es la experiencia central que la Pastoral de Juventud ofrece como medio pedagógico para la educación de la fe de los jóvenes.

En Paraguay, respecto a la denominación, existen ciertas variantes en las experiencias pastorales, pues en algunas diócesis se lo llaman grupos juveniles, y en otras, comunidades juveniles, que es la definición más aceptada en los últimos tiempos. Lo importante es reconocer que la experiencia grupal tiene una dimensión comunitaria. Las comunidades viven un proceso de crecimiento y madurez, ello quiere decir que todo grupo tiene el desafío de convertirse en una comunidad de jóvenes.

En la práctica pastoral en las diócesis nos encontramos frecuentemente con una diversidad de grupos que expresan una dinámica interna con algunas semejanzas y al mismo con diferencias entre sí. Esto nos lleva a preguntarnos sobre cuál es la dinámica interna que viven las comunidades juveniles, cuáles son los indicadores que se deben tener en cuenta para su acompañamiento.

Los obispos de nuestro continente, expresaron en el Documento de Santo Domingo en el número 19: la Pastoral Juvenil.... deberá favorecer la creación y animación de grupos y comunidades juveniles vigorosas y evangélicas, que aseguren la continuidad y perseverancia de los procesos educativos de los adolescentes y jóvenes y lo sensibilicen y comprometan a responder a los retos de la promoción humana, de la solidaridad y de la construcción de la Civilización del Amor.

Por lo tanto, al hablar de Grupos o Comunidades Juveniles, estamos hablando de una herramienta fundamental en la tarea de la Pastoral de Juventud. Siendo así, se debe prestar especial atención a los que a continuación se menciona..

Definición:

La teoría grupal, desde las primeras décadas del siglo pasado, nos ha aportado mucho, respecto a la comprensión de la dinámica grupal. Siguiendo los aportes de la teoría de grupo, podemos entender por grupo juvenil a “el conjunto reducido de jóvenes que mantienen relaciones profundas entre sí, buscan un objetivo común y mantienen una referencia a Jesús en sus vidas” .

Bajo estas consideraciones, para ser considerado un grupo se debe respetar estos elementos. No cualquier reunión de personas que realicen algún actividad puede ser considerado un grupo.

Los grupos o Comunidades Juveniles son grupos pequeños, de 12 a 15 jóvenes, de uno y otro sexo, de edad homogénea, con un nivel de participación estable y con un ritmo periódico de encuentros o reuniones que se constituyen en lugar de crecimiento, maduración, formación y realización personal y comunitaria.

El grupo o comunidad juvenil está conformado por jóvenes que tienen necesidades e intereses semejantes y viven una misma realidad. Donde cada joven es importante, todos participan en igualdad, deciden juntos y aprenden unos de otros.

Es una comunidad que debe estar vinculada a otras comunidades y grupos de la Parroquia, a través de la organización de la Pastoral de Juventud.

Características:

• Facilitan la creación de lazos profundos de fraternidad, donde cada uno es reconocido como persona y valorado como tal, es decir, descubrir el sentido de las experiencias de la vida y elaborar la propia identidad personal cristiana.

• Ayudan a enfrentar los desafíos de esa etapa de la vida, decisiva para la maduración en la fe y la integración social, asegurando la continuidad y la perseverancia del Proceso de Educación en la Fe (PEF).

• Educan para mirar y descubrir junto con otros, la realidad, para compartir experiencias y para desarrollar los valores de la vida en comunidad.

• Permiten encontrarse con Jesús de Nazaret, adherirse a Él y su proyecto de vida, nutrirse de la palabra y orar en común.

• Impulsan la renovación permanente de la del compromiso de servicio a la iglesia y a la sociedad en la construcción de una sociedad más justa, más fraterna y solidaria.

• Dan solidez a la proyección misionera, expresada en el testimonio personal, en la maduración de opción vocacional, por un estado de vida y por una opción de vida laical, como también en el compromiso con la promoción humana y la transformación de la sociedad.

Etapas:

Nadie se vuelve “hombre nuevo”, comprometiéndose con el Proyecto de Jesús, de la noche a la mañana. Hay un proceso a ser vivido y etapas que necesitan ser respetadas.

El grupo de joven es una como la vida misma, fuimos pensados y llamadas a la vida para el amor, fuimos gestados durante nueve meses, pasamos por la infancia, adolescencia y juventud hasta llegar a la vida adulta. Lógicamente la comunidad no es igual que una persona, pero pasa por procesos, fases similares y se desarrollan etapas muy semejantes a las del crecimiento humano. También

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