Todos somos teólogos
Enviado por JAGM-A24 • 18 de Junio de 2023 • Reseña • 1.520 Palabras (7 Páginas) • 52 Visitas
Título: Todos somos teólogos.
Referencia del Documento: Sproul, R.C. Todos somos teólogos. (Una introducción a la Teología Sistemática), El Paso, TX: Mundo Hispano, 1ª Ed. 2015
Palabras Clave: Ciencia, Teología, Paradigma, Revelación, Epistemología, Autoridad, Autoría, Inerrancia e Infalibilidad, Reconstruir, Argumento circular,
Palabras nuevas aprendidas: Atomismo, Revelación mediata e inmediata, Verbum Dei, Vox Dei,
Porcentaje de Lectura: 100%
Tipo de Trabajo: capítulos 2 al 8.
Resumen del documento:
El libro a resumir trata de lo que es la Biblia en sí. Es un tratado teológico que en los capítulos que el autor desarrolla, nos conduce por los temas tan interesantes de fondo como la Revelación, Inspiración, Autoridad, Inerrancia, etc. Nos impela a considerar lo ya conocido desde siempre; relativo al legado por los Apóstoles, y considerado como normativo de parte de Dios a través de ellos y no pararse en aquello que pueda ser “novedad” sin haber pasado por el filtro de qué dice la Escritura.
Nos hablará de ciertos puntos principales que exponemos seguidamente:
Sproul dirá que, “Para la teología sistemática, la fuente principal es la Biblia. De hecho, la Biblia es la fuente primaria para todas las disciplinas teológicas: teología bíblica, teología histórica y teología sistemática”.
Todas estas disciplinas deben aunar esfuerzos para llegar a definir, de la mano del teólogo, lo que contiene la Biblia y que armonice, exprese, diga en unidad de pensamiento el mensaje de Dios y que no esté disperso porque las disciplinas enumeradas arriba, no se pongan de acuerdo o rivalicen entre ellas; eso no puede ser. Es por eso que alude a lo del “atomismo” en las facultades. Si se habla de cualquier tema, deben expresar lo mismo aunque cada autor bíblico lo diga con “matices”. Esto nos lleva a considerar con Sproul que: La presuposición es que Pablo no estaba inspirado por Dios cuando escribió Gálatas y Efesios, y por eso no hay unidad ni coherencia en la Palabra de Dios. Recientemente se ha hecho más común escuchar a teólogos que dicen que encontramos diferencias no solamente entre el Pablo “temprano” y el Pablo “tardío”, sino también tantas teologías en la Biblia como hay autores.
El autor requiere que cada creyente considere darle el valor que la misma teología tiene cuando ésta emana de las Escrituras Reveladas por parte de Dios al hombre. Cada cristiano no puede evadir esta responsabilidad por lo que a cada paso que da al leer, escuchar, hablar de las Escrituras, “hacemos teología”. Es aquí donde II Timoteo 3:16 tiene su vital importancia y valor. “Preparados…para todo como principio que surge del texto mencionado”. La Biblia nos pone el dedo en la llaga para no dar la espalda al Criticismo nefasto que aúlla desde los Siglos XIX hasta nuestros días.
El escritor en ciernes desarrolla esta parte de la Teología (que se puede desarrollar tanto en la Teología Propia como en la Bibliología) al considerar las formas en que Dios se ha revelado.
No podemos ver a Dios con nuestros ojos, pero sí que a través de esta parte de la Revelación, algo de sus atributos cognoscibles, de sus características, nos lleguen por medio de la Revelación general y natural que hace para todo ser humano al develarse desde, por y con la creación (Salmo 19:1).
Encuentra Sproul toda una diferencia (yo también, claro está) entre Revelación General y Revelación Especial. Esta última nos da a conocer a los creyentes, a los nacidos de nuevo por la gracia de Dios, el carácter de Dios desde la Biblia, a través de ella constantemente. La Palabra de Dios junto a la Encarnación del Hijo de Dios, Palabra Encarnada, son los que nos dan la suficiencia del poder llegar a conocer a Dios y de las cuales emanan todas las excelencias de parte de Dios para los creyentes, sus hijos. La revelación especial nos muestra el plan redentor de Dios. Nos cuenta de la encarnación, la cruz y la resurrección; cosas que no se pueden aprender por medio del estudio de lo natural. La Biblia da testimonio de la forma en que Dios se ha revelado de manera especial: Hebreos 1:1-3.
En este otro punto, nos llevará por la doctrina tan importante que es la Inspiración de las Escrituras y la Autoridad de la misma. La Inspiración es proclamada en dos textos fundamentales como son II Timoteo 3:16 y II Pedro 1:21.
Dios no trató con los escritores de forma mecánica, cuales amanuenses (aunque en definitiva lo que escribían era por la providencia y dirección de Su Espíritu) como si de robots se trataran (Teoría del Dictado), sino que respetó sus perfiles y personalidades y cada autor escribió desde su impronta personal, contexto y trasfondo…pero siempre guardados por Dios para que no mancharan Su gloria al dejar lo relativo a Su Revelación. La inspiración es “Dios-soplada”, “respirada” que es lo que él término, theopneustos, significa. Por cierto, es un “hápax legomenas” (frase que tan sólo ocurre una vez en todo el NT).
...