Articulo Magnifico

La unidualidad del hombre

La unidad del hombre desde la antigüedad ha sido tratada de encontrar pero es el mismo hombre el problema cuyos aspectos sociales, políticos y éticos, que no solo proceden a los aspectos científicos. En la cultura occidental la idea de unidad de hombre es muy pausada y débil, desgastada y dispersa, cuando observamos la noción del hombre tanto en sociedades arcaicas como en históricas es vistas desde una doble conciencia. De una parte todo extranjero puede ser visto como un extraño o como un dios, en otras sociedades podría ser visto como barbaros es decir no psíquicamente humanos, esto nos muestras fácilmente como la expulsión del hombre esta ligada a todo fenómeno de enemistad. En el siglo XVII Bruyése describe al hombre en general, Montaigne la describe como la condición humana esta ligada a la idea hic et nunc. La idea del hombre surge a la vez de un examen subjetivo y objetivo de las diferencias de las opiniones, creencia, costumbres, etc. y no puede ser disociada de la idea de pluralidad de las culturas. Por otra parte la idea de unidad se afianzo y afirmo en el humanismo; la idea universalista y emancipadora: la idea de los derechos del hombre, es decir todos los hombres son hombres; son, pues, todos libres e iguales en derechos, de allí empieza a crecer el humanismo racionalista recurre a la humanidad biológica de la especie del homo, pero en lugar de fundarse en la naturaleza se funda en el derecho y lo ideal.

La conciencia humanística se difundió ampliamente en la cultura del siglo XIX, no extrajo ni siquiera paro fundamentalmente la segunda conciencia entre los verdaderos hombres es decir nosotros y los otros; donde se empiezan a desarrollar los nacionalismos. El humanismo triunfante en el occidente dominador solo planteo idealmente la idea de unidad de la especie humana. En el siglo XX se ha visto el estallido de del humanismo en occidente, el racionalismo nacional-socialista es un ataque que contesta en la base biológica, la idea de unidad del hombre. Por otro lado se condeno al humanismo abstracto, pues el hombre que explota al hombre se excluye ipso falto de la humanidad. La idea de hombre es denunciada como como inútil y aprovechada por la ciencia de las estructuras y la idea de unidad del hombre es denunciada. Hoy nos parece que el humanismo fue una tentativa abstracta y jurídico-moral para fundar la unidad del hombre fuera de toda consideración biológica, es decir, el margen de la idea de naturaleza humana. Todo debate es estéril porque es controlado por un paradigma disyuntor, propoi del pensamiento occidental moderno dónde la unidad solo puede ser sólo puede ser concebida ocultando la diversidad, donde la diversidad sólo puede ser concebida excluyendo u ocultando la unidad. Así se oponen una unidad sin diversidad y una diversidad sin unidad. Si, al mismo tiempo, la idea de unidad del hombre permanece separada de la idea de especie humana, es porque incluso ahí el paradigma de la disyunción no solamente separa y opone, sino que excluye y oculta, uno mediante el otro, el anthropos biológico y el anthropos cultural. La biología nos obliga a concebir la diversidad humana, puesto que nos aporta la idea de una diversidad extrema de los individuos, mayor que en cualquier especie viva; Henos aquí,

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