Concepto, Contexto, Contenido.

Concepto, contexto, contenido.

La lectura nos presenta las relaciones y discrepancias entre el concepto arquitectónico, el contexto y el contenido del espacio. Primero nos habla acerca del concepto y contexto, estos siempre trabajan juntos, aunque no siempre son recíprocos uno con el otro (Cabe destacar que el contexto no se refiere solo a lo visual que existe en la zona, sino también a la situación política, económica, social, cultural, etcétera). Aquí es donde la indiferencia y los conflictos aparecen; por una parte, si se ignora la idea o la situación en que se encuentra se obtiene como resultado una imposición de una parte o de la otra. Mientras que los conflictos se crean cuando el contexto y el concepto chocan y se crea una batalla entre ambos bandos. Es en este momento en el que tenemos que hacernos una pregunta: ¿Se puede conceptualizar el contexto o contextualizar el concepto? Esto significa adaptar las circunstancias de un sitio al concepto arquitectónico.

Sin embargo, el contexto y el concepto no lo son todo a la hora de diseñar un espacio, pues este espacio tendrá un contenido dentro. Es en este punto en el que hablamos del programa arquitectónico; una lista en donde se definen todas las actividades y requerimientos que debe tener un espacio para el usuario; esta es una manera típica en que se comienza el diseño arquitectónico. Sin embargo, el programa arquitectónico no necesariamente debe definir al concepto, pero sí nos da la pauta para que los espacios sean recíprocos con las actividades, exista una indiferencia entre ellas o se genere un conflicto. Este mismo ejemplo podemos verlo en el contexto. El contenido y el contexto pueden crear reciprocidad entre ellos, indiferencia o conflictos. Por ejemplo, se crea un conflicto social a la hora de emplazar un aeropuerto en una reserva natural.

Entre los proyectos que se muestran en la lectura, es importante destacar cómo se comenzaron a diseñar. Algunos bocetos que son simplemente líneas y trazos a mano sugieren una idea que a su vez, cumple con las normas establecidas de los lugares en donde se piensa emplazar el proyecto. Sin embargo, en el caso del Museo de Arte Africano en Nueva York, fue esencial destacar el motivo del edificio, darle carácter del lugar que se quiere representar y al mismo tiempo protegerlo de las normas que limitaban el concepto del edificio.

El caso del memorial del 9/11 en Manhattan, fue importante destacar las emociones sentidas ese día pero al mismo tiempo, el memorial debía adaptarse a una de las ciudades más dinámicas del mundo y que se entendiera que es un espacio diseñado en pleno Siglo XXI.

La arquitectura es como una gran ciudad, en donde no predomina ningún sistema sobre otro, sino que a través de las diferencias entre cada sistema, se conduce a nuevas alternativas y diferentes modos de acción.

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