Confesiones De Una Perturbada

Hola os preguntareis quien soy y por qué voy a escribir esta historia, pues veréis mi nombre era Sonia, digo era porque solo las personas tienen nombres y yo ya no lo soy. Mi historia comienza como muchas otras con una infancia feliz y alegre....en apariencia bajo esa fachada de dulce familia, se escondía la verdad unos padres locos con ideas muy extrañas sobre el concepto de la muerte, tan extrañas que ellos mismos se perturbaron creyéndose ser vampiros, tal fue su locura que llegaron a alimentarse solamente de sangre, al principio solo era de animales hasta que su sed fue aumentando y con ello sus ansias de muerte. Vivíamos en un pueblo pequeño y como siempre pasa en los pueblos, no es fácil esconder una cosa así por lo que tuvimos que mudarnos a la ciudad.

A estas alturas yo contaba con unos 8 años y una forma de vida un tanto extraña como ya os podéis suponer, mientras vivimos en el pueblo no tuve que ir a la escuela ya que mi madre me daba la lecciones en casa y eso era muy natural para el resto de la gente ya que yo parecía una niña algo enfermiza, no es de sorprender, apenas comía puesto que la "comida" de mis padres no me sentaba muy bien, a causa de esto tuve grandes palizas y un par de intentos de muerte por parte de mi padre no sé si para mi suerte o mi desgracia. mi madre suavizaba el asunto diciendo que ya me entraría sed, que aún era muy joven. Una vez que nos instalamos en el nuevo apartamento yo empecé a ir a la escuela y hacer nuevos amigos que no me duraban mucho os imaginareis porque, tras nuestra llegada y la aparición de tantos desaparecidos en una nueva ciudad y todos relacionados con nuestra familia, me refiero por ejemplo al jefe de mi padre o al hermano mayor de alguna amiga mía en fin rápidamente las sospechas cayeron sobre nosotros.

Me acuerdo que fue el 20 de mayo al poco de cumplir los 13 años cuando condenaron a mi padre a la silla eléctrica y a mi madre la llevaron a un centro psiquiátrico de máxima seguridad , me acuerdo porque durante esos años en los que fui a visitar a mi madre esta me forzaba a continuar su legado de sangre y en mi empezaba a formarse una idea muy extraña sobre quien era mi amigo y quien no, yo había nacido en el seno de una familia desquiciada y lógicamente acabe como ellos, aunque, ya hacía varios años que mi cabeza no andaba muy bien pero fue sobre esta época en la que yo misma empecé a darme cuenta. Con mi madre encerrada y mi padre muerto fui de familia en familia hasta que cumplí los 17 ya para entonces bebía sangre y hacía varias atrocidades que no me atrevo a escribir, hasta que conocí a Juan y Verónica mis mejores amigos, nos conocimos cuando me quede por fin con la última familia que me quiso acoger la cual no sabía nada de mi vida secreta, conocí a Juan y a Vero en el instituto, nos sentaron juntos y nos hicimos grandes amigos, nos íbamos al cine, de marcha donde fuera pero siempre íbamos los tres, para entonces

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