DESARROLLO HUMANO, PROCESOS DE SOCIALIZACION Y EDUCACION DE LA INFANCIA

DESARROLLO HUMANO, PROCESOS DE SOCIALIZACION Y EDUCACION DE LA INFANCIA

Existen gran variedad de teorías sobre desarrollo humano, sin embargo para tratar de emitir un concepto lo mas acertado a la realidad por  lo que se puede decir : el desarrollo se refiere a las personas y no a los objetos, el ser humano por sus características físicas, sociológicas, sociales y culturales, desde su nacimiento  a través de los procesos de socialización primarios, (la familia), secundarios, (la escuela), y terciarios, ( la sociedad), va adquiriendo conocimientos y los adecua de acuerdo a la interacción con su entorno para el logro de un grado de desarrollo cada vez mayor que le permita satisfacer sus necesidades fundamentales y así lograr el mejoramiento de las condiciones en su calidad de vida, desde este punto de vista podemos decir que: “…el desarrollo humano consiste en el conjunto de características biopsicosociales propias de toda persona que se ponen en juego en la búsqueda del pleno bienestar y la autorrealización, acorde con las posibilidades y limitaciones personales y del contexto social, económico, político, ambiental y jurídico en el cual vive. Para abordar dicho desarrollo humano es recomendable dividirlo, mas no fragmentarlo, en una serie de dimensiones con el fin de comprenderlo mejor y establecer estrategias para potencializarlo…”^[1].

El hombre desde su niñez va logrando su desarrollo mediante el aprendizaje permanente y evolutivo, dominando niveles cada vez más complejos de movimiento, pensamiento, sentimientos y relación con los demás, por lo que se puede afirmar que el desarrollo es un proceso multidimensional, que abarca todos los aspectos de manera integral, es decir, que los diferentes elementos del desarrollo del niño están interrelacionados y deben ser considerados en su conjunto; los cambios que se producen en una dimensión influyen en el desarrollo de las otras y viceversa; por ello el niño debe verse como parte del desarrollo humano que ocurre durante toda la vida, comienza en la gestación durante el nacimiento y continúa a lo largo de la vida, a medida que el niño responde a sus ambientes biofísicos y sociales. Interactúa con ellos y aprende de ellos, esta interacción se produce con las personas, las cosas y el medio donde vive.

• Desarrollo comunicativo o dimensión comunicativa
• Desarrollo lógico o dimensión lógica del pensamiento
• Desarrollo personal-social o dimensión personal social
• Desarrollo corporal-cinético o dimensión corporal-cinética
• Desarrollo moral y Espiritual

Estas dimensiones están íntimamente ligadas con las potencialidades del desarrollo humano, lo cual se refiere a lo que el hombre es capaz de hacer, el potencial que tiene una persona en su interior y que se puede entrenar para tener un mayor potencial humano que le permita mejorar las condiciones de vida, estas potencialidades se desarrollan paulatinamente en la medida que el niño va desarrollando sus dimensiones a través de su desarrollo físico y psicosocial,  a través de los procesos de socialización, puesto que el ser humano es un ser social y no puede desarrollarse aisladamente sino mediante el apoyo permanente de la sociedad donde vive, de acuerdo a las características sociales y culturales de la misma. El niño, en principio, desconoce las pautas culturales, son los adultos los que incorporan a los nuevos miembros a la cultura de su entorno a través del proceso de socialización, consistente en la adquisición de los hábitos, las normas y los valores característicos de la cultura donde debe insertarse el individuo, con el objetivo de conseguir la adaptación social. Esta transmisión se produce a través de procesos de interacción. Definimos la socialización como “un proceso de interacción entre la sociedad y el individuo, por el que se interiorizan las pautas, costumbres y valores compartidos por la mayoría de los miembros de la comunidad, se integra la persona en el grupo, se aprende a conducirse socialmente, se adapta el hombre a las instituciones, se abre a los demás, convive con ellos y recibe la influencia de la cultura, de modo que se afirma el desarrollo de la personalidad” (Fermoso, 1994, 172).

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