Derechos humanos. ¿Cómo se mide la corrupción?

¿Cómo se mide la corrupción?

     Antes de pasar a los métodos sobre cómo se mide, es necesario que, primero, respondamos a la siguiente pregunta: ¿es necesario que se mida la corrupción?

     A nuestro parecer, si es necesario porque a pesar de que la medición de la corrupción resulta un poco problemática, es necesaria para poder crear un marco de referencia, con el objetivo de despertar la conciencia tanto en el pueblo como también en aquellas personas que ocupan un cargo público en nuestro país, puesto que, en conjunto hacen estos actos de corrupción; así a partir de la medición también evaluar la posibilidad de nuevos métodos que nos ayuden a erradicar o, por lo menos, minimizar ésta problemática que hay en nuestro país.

     Decimos que es dificultoso el poder hacer una medición de la corrupción, puesto que no hay muchos registros donde se puedan apreciar las denuncias por este hecho, ya que vemos éste acto como algo cotidiano, algo normal y cuando se practica no lo informamos ante autoridades que puedan hacer un cambio, ya que nos perjudicaríamos y decidimos no hacer nada al respecto, un ejemplo muy básico de esto, es cuando un policía nos va a multar, y para evitar hacer un pago de mil pesos, nos “arreglamos” con cien pesos con el oficial para que nos deje ir.

      Para apoyar la idea anterior, de acuerdo con el artículo de Michael Johnson titulado “Es posible medir la corrupción, ¿pero podemos medir la reforma?” que se puede encontrar en Revista Mexicana de Sociología menciona lo siguiente:

“En condiciones ideales podríamos medir la corrupción de forma directa, detallada  y precisa… Sin embargo, es particularmente difícil medir la corrupción con precisión y certeza: a diferencia de otro tipo de faltas, como el robo y el asalto, la corrupción por lo general carece de una víctima… que tenga interés en elaborar un informe y proporcionar evidencia. Efectivamente, casi todas aquellas personas que tienen conocimiento de algún hecho relacionado con la corrupción también tienen un interés por mantenerlo en secreto”

     Esperamos despertar la conciencia de las personas, para que se den cuenta de que el apoyar la corrupción está mal, y si seguimos con la mentalidad de la vía rápida no podremos minimizar este problema, sino que contribuiríamos a acrecentarlo más y más.

     Para poder medir la corrupción pudimos encontrar tres métodos para hacerlo:

1.-Medir la percepción general o de grupos focalizados sobre corrupción

2.-Medir la incidencia de actividades de corrupción

3.-Usar estimaciones de expertos sobre el nivel de corrupción

     La primera consiste básicamente en hacer encuestas a la población en general sobre este tema; el Índice de Percepción de la Corrupción de Transparencia Internacional (IPC) presenta un promedio de varias encuestas; dichas encuestas contienen preguntas sobre los niveles de corrupción que posee un determinado país, en nuestro caso, México.

     También presenta una lista de países clasificándolos de acuerdo al valor obtenido, que va de 10 a 0 (a menor valor, mayor nivel de corrupción). Este índice ha sido publicado año con año desde 1995 y en los resultados de 2002, México se encuentra clasificado en el lugar número 57 de un total de 102 países, con una calificación de 3.6.

     Otro estudio importante es la Encuesta Nacional de Corrupción y Buen Gobierno que realizó Transparencia Mexicana. De acuerdo con una publicación en la página de programa anticorrupción “la encuesta, levantada durante junio y julio de 2001, comprendió 13,790 entrevistas en nivel nacional registrando la corrupción existente en 38 servicios públicos proporcionados en los tres niveles de gobierno y por particulares”.

     Con lo anterior, se afirma que funcionarios del gobierno son los que más practica la corrupción, por decirlo así, pero claro, que por ser encuestas que se realizaron a la población esto puede que haya sido una conclusión más subjetiva que objetiva por parte del pueblo.

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