El Sabio No Dice Lo K Piensa

EL SABIO NO DICE LO QUE PIENSA, PERO SIEMPRE

PIENSA LO QUE DICE

La inteligencia consiste no sólo en el conocimiento, sino también en la destreza de aplicar los conocimientos en la práctica, ya que Aristóteles un gran filósofo de Grecia nos muestra que las palabras son la forma de decir a los demás cómo somos interiormente.

Uno es esclavo de sus palabras y dueño de sus pensamientos, es de sabios reflexionar y ordenar sus pensamientos antes de verbalizarlos. El que no reflexiona y a borbotones verbaliza, lo que piensa que "su verdad es la verdad"•, ante la reacción negativa de la mayoría trata de enmascarar que ha sido mal interpretado. Esto se puede ver como constante en la clase dirigente política de Bolivia, donde "ven la paja en el ojo ajeno y no la viga en el propio", siempre "ponen la culpa afuera". Eso se convierte en un obstáculo en el progreso.

El sabio constantemente observa al universo de una forma o ya sea de un punto de vista diferente a lo demás, porque él, observa valga la redundancia de una forma neutra o equilibrada para ser imparcial y así respetar su contribución, podría ser una idea u opinión.

Aristóteles con esta frase: “El sabio no dice lo que piensa, pero siempre piensa lo que dice”, intenta expresar también que al decir lo que pensamos, quedamos al descubierto y podemos ser blanco de los demás, que no saben del respeto si bien volvemos a la época de éste vemos que a principios la gente en si la sociedad no veía su potencial de saber porque pensaban que era como los sofistas que no tenían fundamento al hablar, pero Aristóteles no se dio por vencido ya él era prudente y eso bastó para que se den cuenta de la capacidad de conocimiento que él poseía.

Los sofistas se llamaban a sí mismos "sabios", no se trata ya del amor a la sabiduría misma. Nosotros sólo podemos aspirar al asombro como fuente del amor a la sabiduría, porque sabemos que todo hombre nace en las tinieblas y hasta el momento sólo ve los famosos simulacros de Platón: el sabio es para el sofista aquel que ve lo que es, para el hinduismo son sabios los moralistas como Lao Tse o mejor aún Con-Fu-Tse ( Confucio) quien si fue un maestro el "arte" de buscar los correctos y más armónicos caminos que conducen al hombre al equilibrio entre sí mismo y el mundo. Kurosawa en el cine fue un discípulo suyo su ética desde el cine. Nuestro tiempo no cree ya ni en los ejercicios del sofista ni en la producción social del hombre sabio: el hombre cultivado no es un hombre sabio. Y resulta absolutamente imposible encontrar las certezas que buscan y creen encontrar los sabios.

Para entender un sabiduría es una habilidad que se desarrolla con la aplicación de la inteligencia en la experiencia, obteniendo conclusiones que nos dan un mayor entendimiento, que a su vez nos capacitan para reflexionar, sacando conclusiones que nos dan discernimiento de la verdad, lo bueno y lo malo. La sabiduría y la moral se interrelacionan dando como resultado un individuo que actúa con buen juicio. Algunas veces se toma el concepto de sabiduría como una forma especialmente bien desarrollada de sentido común.

En la Sabiduría se destaca el juicio sano basado en conocimiento y entendimiento; la aptitud de valerse del conocimiento con éxito, y el entendimiento para resolver problemas, evitar o impedir peligros, alcanzar ciertas metas, o aconsejar a otros. Es lo opuesto a la tontedad, la estupidez y la locura, y a menudo se contrasta con éstas. Tomás de Aquino define la sabiduría como "el conocimiento cierto de las causas más profundas de todo". Por eso, para él, la sabiduría tiene como función propia ordenar y juzgar todos los conocimientos.

Si nos damos cuenta el que posee las ideas más exactas sobre las causas de las cosas y es capaz de dar perfecta cuenta de ellas

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