El Vendedor Mas Grande Del Mundo

INTRODUCCIÓN

El vendedor más grande del mundo

Don Ogmandino

Este libro está destinado a ejercer influencia en incontables vidas.

En él se presenta aquí la leyenda de Hafid un caballero hace 20 siglos de años, y su ardiente deseo de mejorar su humilde condición, fue puesto a prueba por el señor Pathros un gran mercader de la caravana enviándolo a belén a vender un solo manto, pero este fracaso, a pesar de ir su cabeza la cual fue interpretado por Pathros de que era una señal de los dioses y le obsequia a Hafid diez pergaminos antiguos que cuestionan la sabiduría necesaria para que el joven realice todas sus ambiciones.

Este libro fue respetuosamente dedicado al gran vendedor W. Cleement Stone

Junto a la leyenda del señor Hafid participaban otros personajes como el señor Erasmo su principal tenedor de libros, persona de confianza del señor Hafid con quien compartía todos pensamientos y sentimientos y su secretos en los podemos mencionar.

El misterio relacionado con una de la sala estaba vacío con la excepción de la presencia de un pequeño cofre de cedro en un rincón alumbrando por un haz de luz. Esto fue una sorpresa para el señor Erasmo, ya que se había rumorado durante muchos años sobre los que mantenía oculto su señor en la torre. Se ha dicho que había aquí, barriles de diamantes, lingotes de oro, o animales salvajes o avestruces. En cierta ocasión un personaje, un comerciante de alfombras persa, insinuó que el señor Pathros tenía ahí un pequeño harén.

el señor Pathros lo mostro el cofre a Erasmo, para su sorpresa cuando lo abrió no había nada en el cofre, sino, pergaminos de cuero para el señor Pathros esos pergaminos son su mayor riqueza porque su conducta como su decisiones fueron guiadas siempre por estos pergaminos, no fue por mi propia sabiduría que he adquirimos tanto talentos de oro, yo fui solamente el instrumento de su cumplimiento para mí ha resultado todo un éxito.

El señor Pathros quedo sorprendido cuando el camillero Hafid le solicito trabajo y le dijo no estar conforme con tu trabajo de cuidado de trabajo de cuidado de animales?, si señor pero quiero y deseo ser vendedor de sus mercancías en vez de ser un simple camellero porque muchas veces llegue a oír a usted cuando le decía a muchas personas recordándole que cualquier puede vender todas las mercancías de su almacén, en poco tiempo, si solamente se dedicada a aprender los principios y las leyes del arte de vender.

Mi ambición es la de llegar a ser aun mas grande que usted, el mercader mas grande, el hombre más rico y el vendedor más grande del mundo, el señor Pathros, esfuérzate por alcanzar la felicidad, por ser amado y amar, es decir, procura con ahincó alcanzar la paz mental y la seguridad, pero Hafid le respondió, que la pobreza es una señal de falta de capacidad o falta de ambición y no creo que carezca de ambición de capacidad. El señor Pathros, nunca te avergüences de emprender algo aunque fracases, porque aquel que no ha fracasado nunca no ha intentado tampoco nada.

Hijo, hay un precepto que debes recordar al comenzar esta nueva vida, guárdala siempre fijo en la mente y vencerás obstáculos a todo aquel que tiene ambiciones.

El fracaso no te sobrecogerá nunca si tu determinación para alcanzar este es suficientemente poderosa. Si comprendiste todo el significado de mis palabras, entonces repítemelas. El fracaso no me sobrecogerá nunca si mi determinación para alcanzar el éxito es lo suficientemente poderosa.

Cuando el señor Pathros había perdido la capacidad para seguir trabajando le enseño el cofre dentro, y dentro del habían diez pergaminos de cuero, cada uno de ellos numerados, el primero contenía el secreto de la sabiduría, y los otros contenían los secretos y principios necesarios para alcanzar un gran éxito en el arte de vender. En el cofre hay una bolsa que contienen cien talentos de oro para que te inicie en el mundo de los negocios.

Podría darte más riquezas pero esta provocaría en ti un terrible perjuicio, mejor será que te convierta en el vendedor más grande y rico del mundo por tus propios esfuerzos, como vez no me he olvidado de tu promesa. Cuando apliques los principios de los pergaminos llegaras a ser mucho más rico de lo que hayas soñado jamás.

PERGAMINO NUMERO UNO.

Hoy comienzo una nueva vida.

El fracaso no será mi recompensa por la lucha, en el pasado lo acepte como acepte el dolor. Ahora lo rechazo y estoy preparado para abrasar la sabiduría y los principios que me sacaran de las sombras para internarme en la luz resplandeciente de la riqueza, la poción y la felicidad muy superiores a mí, más extravagante sueño.

Solamente los principios perduraran y estos poseo, porque de las leyes que me conducirán a la grandeza figuran en las palabras de estos pergaminos, me enseñaran a evitar el fracaso que alcanzar el éxito, ¿Por qué que es el éxito? Sino un estado mental, y el fracaso se describe siempre de la misma forma. El fracaso es la incapacidad del hombre de alcanzar sus metas en la vida, cualesquiera que sean.

Me formare buenos hábitos y seré esclavo de los hábitos

Mis acciones son gobernadas por el apetito, la pasión, el prejuicio, la avaricia, el temor, medio ambiente, hábitos, y el peor de todos estos tiranos es el hábito.

Leeré cada pergamino durante treinta días en esta forma prescrita, antes de proceder la lectura del pergamino siguiente.

PERGAMINO NÚMERO DOS.

Saludare este día con amor en mi corazón

Saludaré este día con amor en mi corazón. De aquí en adelante amaré a toda la humanidad. Desde este momento todo el odio ha sido extraído de mis venas porque no tengo tiempo para odiar, sólo tengo tiempo para amar. Desde este momento doy el primer paso requerido para convertirme en un hombre entre los hombres. Con amor aumentaré mis ventas en un ciento por ciento y me convertiré en un gran vendedor. Aunque no posea otras cualidades, puedo alcanzar el éxito con el amor solamente. Sin el amor fracasaré aunque posea todos los conocimientos y habilidades del mundo.

Saludaré este día con amor, y tendré éxito.

PERGAMINO NUMERO TRES

Persistiré hasta alcanzar el éxito

De aquí en adelante reconoceré que todos los días de la vida me ponen a prueba en igual forma si persisto, si sigo probando, si continuo invistiendo alcanzare el éxito.

Los premiso de la vida se encuentran al fin de cada jornada y no cerca del comienzo y no me corresponde a mi saber cuantos pasos son necesarios a fin de alcanzar mis metas.

Siempre daré un paso más, si ese no es suficiente daré otro, y aun otro, en realidad un paso por vez no es muy

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