El lenguaje de la arquitectura sostenible

El Lenguaje De La Arquitectura Sostenible.

de las estrategias de climatización pasiva y su lenguaje: una inquietud sobre los procesos de expresión a través de la sostenibilidad arquitectónica.

SÍNTESIS TEMÁTICA.

Durante  el transcurso del siglo XX y con las influencias del movimiento moderno la arquitectura asumió una actitud “modernista”, que en la mayoría de los casos rechazo las expresiones culturales tradicionales, generando como resultado un modelo arquitectónico internacionalista que se aplicó en las regiones tropicales, incluyendo a Venezuela.

Algunos arquitectos, en Venezuela como Tomas José Sanabria, Carlos Raúl Villanueva y Fruto Vivas lograron incorporar a su discurso algunas vivencias del medio ambiente; del desarrollo arquitectónico local; de las técnicas constructivas y de las experiencias culturales de las personas del sitio, produciendo así un acercamiento a un modelo de arquitectura que responde al lugar, y al clima.

Con el uso de principios de climatización pasiva y una gama de diversos elementos constructivos, tanto tradicionales como modernistas; estos arquitectos lograron definir un modelo de arquitectura local que reflejó las preocupaciones más universales de la arquitectura y el pensamiento arquitectónico de dicho momento histórico, además de las influencias regionales. Generando así un acercamiento a un nuevo lenguaje arquitectónico local y a una manera de expresión única propiciada por la necesidad de entender la afectación de la naturaleza a la arquitectura.

El proceso de aplicación de los principios de climatización pasivas como herramienta para el diseño de una edificación, también  exige entender las condicionantes medio ambientales,  considerar las preocupaciones permanentes de la población de una región, y las características culturales de su  asentamiento humano. Este hecho le confiere una actitud regionalista al producto arquitectónico, con lo cual el lenguaje de la arquitectura cambia y se adquieren nuevas maneras y elementos de expresión que permiten comunicar los ideales del pensamiento arquitectónico y los hechos culturales.

Todos estos hechos como: el entendimiento de las condicionantes culturales y ambientales del lugar y sus habitantes, los principios de climatización pasiva y sus modos de aplicación, la estética particular de las soluciones de diseño de dichas herramientas y su capacidad de expresión permite hacerse la pregunta. ¿Cómo podemos articular un lenguaje arquitectónico a partir del entendimiento del lugar, el uso de los principios de climatización pasiva y los elementos constructivos que surgen de ellas como respuesta a su aplicación en el proyecto arquitectónico? 

SÍNTESIS PROTOTEORICA.

Desarrollo arquitectónico sostenible.

A finales del siglo XX y principios del siglo XXI, comenzó un cambio de pensamiento en las teorías de la arquitectura, producido por eventos políticos como: el informe de la Comisión Mundial de Medio Ambiente y Desarrollo (WCED) ^[1] de la Organización de las Naciones Unidas, “Informe Brundtland” (1987) y la “Declaración de Interdependencia Por Un Futuro Sostenible”, en el Congreso Internacional de Arquitectos (UIA)^[2] Chicago (1993), por nombrar algunos, en los que se pone en evidencia el impacto del ser humano sobre el ambiente y la creciente necesidad de establecer una relación arquitectura-naturaleza fundamentada en estrategias de diseño arquitectónico y construcción que permitan alcanzar la meta de un desarrollo sostenible “…que atienda las necesidades del presente sin comprometer la capacidad de las generaciones futuras de atender a sus propias necesidades…” (Brundtland.:1987: pág. 43).

Lo que nos plantea la necesidad de reflexionar y enfocar los métodos de proyectar-diseñar en una dirección que nos permita reducir significativamente los efectos adversos producidos por la arquitectura sobre el medio ambiente y potenciar una relación ambiente-arquitectura que maximice el aprovechamiento de las condicionantes climáticas del sitio.

El sincretismo sostenible; cómo las estrategias sostenibles y la tradición arquitectónica se unen.

.“La estrategia fundamental del regionalismo critico consiste en reconciliar el impacto de la civilización universal con elementos derivados indirectamente de las particularidades de un lugar concreto” (Framton: 1983:pag44)

“Si damos por bueno que:” Kenneth Frampton tiene razón (tomándome el atrevimiento de usar una frase de uno de mis profesores, el arquitecto J.H. Gómez) podríamos pensar en la sostenibilidad como teoría de la arquitectura fundamenta sus propuestas y sus estrategias en condicionantes universales aplicables a diversos modelos arquitectónicos sin importar su lugar o su contexto cultural y social.

Teniendo en cuenta este fenómeno de universalidad que es particular de los movimientos arquitectónicos revolucionarios debemos entender que la aplicación de las estrategias de proyecto y herramientas que se plantean para cumplir con los objetivos de la sostenibilidad deben aplicarse en un modo critico que entienda las particularidades del entorno físico, ambiental y cultural  venezolano y los problemas que la arquitectura se plantea resolver a través del acto de proyectar-diseñar.

Debido a estos procesos de adaptación de las universalidades de la sostenibilidad y a las apropiaciones de las características típicas de los modelos de arquitectura, implementados tradicionalmente en Venezuela, surge como resultado un modelo de sostenibilidad que sincretiza los valores culturales de la arquitectura regional y la sostenibilidad global.

El reconocimiento de las características físicas, geográficas, climáticas, sociales  y culturales del sitio de implantación de la arquitectura y sus interacciones como sistemas con la arquitectura.

“El proyecto ecológico exige que el arquitecto contemple y entienda el medio ambiente como un sistema natural activo, y que reconozca que el entorno edificado depende de él” (Yeang: 2001:pag31).

De esta frase podríamos entender que el hecho de proyectar exige un acercamiento al sitio y a nuestra relación con él; esto significa adaptarse a un planteamiento que permita tener un acercamiento a la naturaleza que entienda al ambiente como un aspecto positivo a la hora de proyectar, que se aleje del paradigma de la arquitectura como elemento dominador sobre la naturaleza. Para esto es necesario entonces, que el proyecto comience con una serie de análisis del paisaje, del clima y del entorno medioambiental por completo, además de las relaciones que existen dentro del mismo.

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