Ensayo De Libro ETICA PARA AMADOR

INTRODUCCION

FERNANDO SAVATER:(San Sebastián, 1947) Filósofo y escritor español dedicado sobre todo a la reflexión sobre la ética. Profesor de Filosofía en diversas universidades, y más tarde de Ética en la Universidad del País Vasco, su amplia labor de divulgación y de crítica cultural lo ha convertido en un referente imprescindible para toda una generación en España. Savater es un escritor multiforme, contradictorio, torrencial; con todo, siempre conserva la fidelidad a al menos dos constantes: el estilo marcado y un espíritu alegre, pleno, decidido. Entre sus estudios más específicamente filosóficos se cuentan sus diversas investigaciones sobre los objetos y los mecanismos de la ética.

A continuación realizo un ensayo basado en su libro “Ética para Amador”, escrito en 1991 y acreedor a un Best- sellers (1995), es un libro que explica de una manera muy personal, diferentes aspectos éticos y morales que a diario atañen el diario vivir, los diferentes conflictos que traen consigo las decisiones que se toman y como la moral influye en este tipo de cuestión, se explica también la manera humana de cómo tratar a las personas como personas y no como cosas, cada parte inmiscuida en este trabajo recalca todo el tiempo la libertad, libertad para escoger lo que nos conviene, libertad para desarrollar una personalidad, ser uno mismo, claro está bajo los parámetros que se nos imponen con las normas y las políticas.

DE LA LIBERTAD, LA MORAL Y LA ETICA…

Hay cosas que convienen y otras que no, solo hay que decidir cuál es la ideal, por lo general lo conveniente es lo “bueno”, ya que al hacerlo deja un sentimiento de satisfacción, como hacer deporte, porque hace bien al corazón y al estado físico, elegir entre lo bueno y lo malo es simple. Con la capacidad de razonar, el hombre actual sabe con toda seguridad que cosas elegir, qué camino tomar. Dice Savater:

“la mentira es algo en general malo, porque destruye la confianza en la palabra y enemista a las personas pero a veces parece que puede ser útil mentir para obtener alguna ventajilla. O incluso para hacerle un favor a alguien. Por ejemplo: ¿es mejor decirle al enfermo de cáncer incurable la verdad sobre su estado o se le debe engañar para que pase sin angustia las últimas horas? (pág. 3).

Es por esto que se crean unos parámetros unas normas que se imponen para evitar el libre albedrio de la humanidad, al haber limitante, la libertad del ser, de poder decidir acerca de lo que se quiere y se puede hacer, pasa a interrogantes tales como ¿conviene o no conviene? ¿Lo hago o no lo hago? Lo que queda claro es que hay libertad para escoger el modo de vida que se quiere seguir, por el camino del bien o por el del mal, pero siempre con un margen que frena el desarrollo de las actividades.

Cabe decir que esas márgenes que frenan de una u otra manera esa libertad son las normas, las leyes, las ordenes y las costumbres; la primera se trata de aquella conducta (norma) Impuesta por la sociedad como obligatoria, su acatamiento es voluntario y que él no acatamiento tiene como consecuencia el rechazo de la misma sociedad, la segunda es un precepto dictado por una autoridad competente. Este texto manda o prohíbe algo en consonancia con la justicia y para el bien de la sociedad en su conjunto. La tercera es un mandato que se debe obedecer y por la ultima son todas aquellas acciones, prácticas y actividades que son parte de la tradición de una comunidad o sociedad y que están profundamente relacionadas con su identidad, con su carácter único y con su historia.

Con respecto a las órdenes son algo que se imponen y de lo cual es imposible discutir y rehusarse a hacerlas, hacen parte de un comportamiento de sumisión, donde se obedece, porque no hay libertad de decidir, por ejemplo: cuando hay una orden medica que se debe seguir para el tratamiento de una enfermedad, como lo es tomar medicamentos, es algo que se debe hacerla mayor parte del tiempo las personas que van al doctor por alguna dolencia, es porque busca su bienestar. Bueno al no seguir estrictamente esas órdenes puede haber una des mejoría total y agravamiento de la salud. A diario se siguen ordenes como parte ya de la cotidianidad: en el trabajo, el hogar, si el individuo observa un aviso de Pare en una vía lógicamente se va a detener, está recibiendo una orden.

Las costumbres son sin embargo parte de la rutina, de lo que se ha inculcado desde la infancia, como las tareas y los deberes que se deben ejercer a diario: la costumbre de levantarse todos los días a la misma hora por que debe ir al trabajo, tomar el medio de transporte para dirigirse al empleo, realizar una actividad física todos los días. Tanto las ordenes como las costumbres son algo que se impone, que viene de fuera, “en el arte de vivir el hombre es al mismo tiempo el artista y el objeto de su arte, es el escultor y el mármol, el médico y el paciente” (Erich Fromm, Ética y Psicoanálisis).

En el párrafo anterior hacer lo que se impone o tener la libertad para hacerlo, se juega con 2 opuestos, el bien y el mal, a donde se quiere llegar es que al hacer siempre lo que se considera bueno y que llena de satisfacción y gozo a la persona, es entonces esta persona considerada como buena?. Un ejemplo básico seria: el soldado que se especializo en el ejército para asistir a grandes misiones, lo envían a una misión en la selva amazónica para liberar unos secuestrados, este en dicho enfrentamiento liquida a 5 subversivos, logra la liberación entonces de los secuestrados y llega a su ciudad en donde se convierte en héroe, gana medalla al merito por su labor, pero entonces, donde queda eso de quinto mandamiento (No Mataras).

De allí la duda, ¿se puede realmente ser bueno?, después de la lectura del libro, se puede concluir que hay muchos factores y circunstancias que hacen ver a una persona sea hombre o mujer como bueno o malo en su actuar, factores que pueden influir serian los de clase social, educación, situación política, ubicación geográfica (rural o urbana), todos se presentan en ámbitos diferentes por eso el comportamiento individualista de cada cual.

Pero entonces cuando se habla de libertad, de ser libres para escoger lo que deseamos, lo que realmente queremos eso si bajo esas normas y esos deberes que debemos cumplir, viene una frase en el libro que vale estudiar y esa frase dice: “Haz lo que quieras”. Es una frase que suena como a libertad de decidir, de opinar, de realizar, pero cuando se está pequeño es como un “hazlo si pero…”. Siempre que se escuchaba ese hazlo, era como un juego de soltar un poco pero al mismo tiempo atajar o frenar, porque igual el pequeño no lo hacía por temor a que los adultos se enfadaran

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