Ensayo Elton Mayo

¿Qué hacer para rendir más en tu trabajo?

Queda claro que una de las partes fundamentales de una empresa son los recursos humanos pero ¿qué hacer cuando los trabajadores no están rindiendo al 100%? y peor aun cuando el bajo rendimiento le causa pérdidas a la empresa. Algo parecido se preguntó cerca del año 1924 George Elton Mayo Psicólogo industrial especializado en teoría de las organizaciones y las relaciones humanas; al observar la excesiva rotación de personal en un departamento donde él trabajó en una fábrica textil de Filadelfia; logro observar que al poco tiempo de habérseles asignado para trabajar allí, los trabajadores mostraban la tendencia a hundirse en un estado de abatimiento y desconsuelo y a la larga llegaban a tornarse irritables, sin razón aparente alguna, e impulsivamente renunciaban a su empleo; (esto ¿te suena familiar?) con la diferencia de que en estos tiempos tú no puedes renunciar a tu empleo y tienes que soportar el abatimiento y desconsuelo; pero puedes hacer algo para que esto no suceda y poner en práctica lo hecho e investigado por Mayo el cual afirma la importancia del estado de animo de los trabajadores en su desempeño en el trabajo, pero eso queda más que claro, el problema es ¿cómo lograr un buen animo en todos los empleados de la empresa? La respuesta es muy sencilla que si bien en la época de Mayo no era tanto y fue que gracias a ello que le dedico gran parte de su vida analizar en el trabajador los efectos psicológicos que podían producir las condiciones físicas del trabajo en relación con la producción, y de allí surgió el estudio de la motivación del hombre en su trabajo, lo que condujo a examinar las necesidades humanas y su relación con las recompensas monetarias, no monetarias y otros factores de la vida organizacional, tales como el tipo de supervisión, la relación entre actitudes, conducta y el rendimiento en el trabajo. Como parte fundamental de los estudios y experimentos de Mayo se encuentra un proyecto heroico, el cual tuvo lugar en los talleres Hawthorne de la Western Electric Company con ayuda de sus colegas, Elton requería de practicar más de veinte mil entrevistas con la finalidad de descubrir qué existía en la mente de los trabajadores y qué relación tenía esto, si es que la había, con su productividad de la empresa. La mayoría de los trabajadores de Hawthorne acogieron con beneplácito las entrevistas. En virtud de que estas se efectuaban prácticamente en un solo sentido, pues los trabajadores eran los que hablaban mientras los entrevistadores se concretaban a escuchados con simpatía, se obtuvo muchísimo de lo que los obreros vaciaron de sus pechos; y tras dar rienda suelta a sus sentimientos, quedaban en posición de contemplar de modo más objetivo sus propias situaciones y, como dice Mayo, "darse a sí mismos un buen consejo". En muchos casos quedaron en aptitud de llevarse mejor con sus camaradas de trabajo y con los supervisores.

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