Filosofía y Educación: cinco miradas

Introducción

Los procesos de enseñanza están relacionados con una posición liberal o comunitarista sobre la educación. La primera está vinculada a conceptos como libertad, naturaleza y educación, entre otros. Con diferentes expositores como lo son Platón, Locke, Rousseau, Kant y Marx cada uno con ideas del cómo debe de ser la educación en la sociedad para que esta sea eficaz para el alumnado y tenga un mejor desarrollo en su vida.  

La trayectoria de esta visión podría identificarse desde Locke, pero su sentido moderno aparece más claro en Rousseau con su Emilio. La manera en cómo estos pensadores, y algunos otros como Kant, pensaron la educación liberal será el objetivo de las siguientes líneas. La segunda visión conlleva una crítica a la modernidad. Presentaremos esta perspectiva por medio de MacIntyre y Luis Villoro. Mientras que el filósofo mexicano Villoro le interesa el sentido comunitario desde la herencia de los pueblos originarios, el pensador escocés MacIntrye considera necesario la práctica de la moral aristotélica.

Todos los autores que se presentaran tenían como fin formar individuos capaces de encajar con la sociedad en la que son miembros además de poder aprender de esta misma en su proceso de aprendizaje.

Filosofía y Educación: cinco miradas

Rousseau, Locke y Kant

Locke, ha sido considerado el padre del liberalismo. Él sostuvo que todo gobierno surge de un pacto o contrato, con el propósito de proteger la vida, la libertad y la propiedad de las personas, teniendo los signatarios el derecho a retirar su confianza al gobernante y rebelarse cuando éste no cumple con su función. (Várnagy, 2002)

Locke encontró en el concepto de enseñanza el punto central de su propuesta para orientar al caballero en ciernes. En esa formación, le solicita al enseñante poner cuidado tanto en el cuerpo como en la mente del aprendiz. El pensador realizó varias recomendaciones para mantener con buena salud al estudiante, entre ellas destaca la higiene, respirar aire fresco, practicar natación, comer ciertas cosas, como frutas, pero lo más importante fue la disciplina. En cuanto a la mente, Locke pensaba en que el alumno debería ser motivado para pensar racionalmente, con el objeto de formar un criterio.

Locke piensa en dos conceptos diferenciados: educación e instrucción. La primera sería la que les correspondería a los padres con un tratamiento amoroso y no violento, pero con claros y sutiles niveles de exigencias. Evitar los castigos físicos. Por su parte, instrucción, el aprendizaje de los contenidos de matemáticas, lógica, lenguas y retórica. Locke considera que lo verdaderamente central eran valores como la honestidad y rechazar, por tanto, la mentira y el engaño.

Jean Jacob Rousseau fue uno de los ilustrados franceses más célebres. El pensamiento del galo tuvo en el contrato social y en la ética a dos de sus pilares, y estuvo interesado en la existencia de una correspondencia entre el interés colectivo y el individuo. Otro elemento esencial del pensamiento de Rousseau fue su concepción sobre el origen de la desigualdad. Ante esto, propone un nuevo Estado en el cual no existan desigualdades, por medio de un contrato social que garantice el ejercicio democrático y, con ello, el bien común.

La propuesta educativa roussoniana está basada en el amor: el individuo debe sentir amor por sí mismo, por la comunidad, y por la naturaleza. Lograr estos sentimientos permitiría, según el francés, regresar al estado natural (Murueta, 2007)

El escenario sería un sistema abierto, flexible y permanente. Además, no habría condicionantes de edad o de sexo para entrar, permanecer o egresar. La prioridad sería desarrollar una inteligencia social, y se concibe como un tema permanente, o en toda la vida, pero el núcleo de la educación sería la escolaridad formal.

En ese proceso se da la humanización, lo que podría comprenderse como lo único que permite hacerse hombre es entrar en contacto con otro hombre, y de esta forma se podría decir que la educación cumple con este principal objetivo.

La educación es una responsabilidad compartida entre familia, escuela y el resto de la sociedad para formar a los integrantes de ésta. Por cuanto se refiere a la propuesta educativa de Rousseau, éste consideraba que sería en la experiencia del individuo, durante la vida cotidiana, cuando se perciba lo conveniente y lo opuesto a ello.

Kant escribió un documento dedicado a la educación intitulado: “Reflexiones sobre la Educación o Tratado de Pedagogía”, y fue publicado en 1803. Una de las ideas centrales de ese importante documento es la que la educación hace al Hombre. Serían las relaciones con otras personas en escenarios diferentes, como la familia, la escuela, la Iglesia, el Estado, etcétera, las que intervendrían en la “construcción” del individuo, de su ser cultural.

En el núcleo de la idea kantiana está el amor, pero reconoce en la educación una necesidad biológica y moral.

Kant habló de cuatro ámbitos sobre la formación del Hombre. El primero es la disciplina, dirigida a impedir la animalidad que busca, entre otras cosas, limitar el uso de la libertad para dirigirse a la razón y la práctica de lo bueno.

El segundo aspecto es el de la culturalización, entendido como el conjunto de habilidades físicas, cognitivas, laborales, artísticas, entre otros como esenciales en la conquista de los propósitos individuales en la vida en sociedad. De esta forma, leer-escribir, aplicar el pensamiento lógico-matemático, el desarrollo de la memoria, la necesidad de trabajar en grupo. El tercer punto sería la prudencia, comprendida por nuestro filósofo como la capacidad de vivir armónicamente. Por último, no existiría vida en sociedad sin un proceso de moralización. En esto a Kant le interesa que los hombres tengan buenos sentimientos, pues al tenerlos éstos decidirían hacer las cosas buenas.

Todos los autores anteriormente expuestos tienen la idea de una educación que no solo es responsabilidad de una escuela o de un maestro, por el contrario, asumen que la responsabilidad es de toda la sociedad y personas que interactúan con el individuo que está siendo educado, comenzando con que es responsabilidad de la familia enseñarle valores como responsabilidad, honestidad y honradez; entre otros. Esto anterior en un ambiente de amor y respeto resaltado que no haya maltratos físicos y verbales para el educado. Por otra parte, el educador o la institución es la encargada de dar a conocer el pensamiento lógico-matemático, leer-escribir y el desarrollo de la memoria. Mientras tanto la sociedad lo dota de conocimiento de cómo debe de ser su comportamiento, en otras palabras, que sean personas de buenos sentimientos. Lo anterior mencionado para que nuestro individuo pueda desarrollarse en la sociedad de manera correcta y tener la capacidad de vivir armónicamente.

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